¿Qué ver?: La película que hace reflexionar sobre la adopción

CIUDAD DE MÉXICO, junio 29 (EL UNIVERSAL).- Ya lo ha dicho incansablemente el director mexicano Guillermo del Toro: "La animación es cine. No es un género para niños. Es un medio". Ejemplo de ello es la película franco-suiza "La vida de Calabacín" ("Ma vie de Courgette").

Estrenada en 2016 en el marco del Festival de Cine de Cannes. La historia basada en el libro "Autobiographie d'une Courgette" es un retrato crudo y doloroso de la niñez y lo vulnerables y expuestos al peligro que pueden estar los niños, incluso en sus propias casas.

La trama arranca cuando Ícaro o "Calabacín", un pequeño de ocho años, queda huérfano, luego de la muerte de su madre, quien tenía problemas con el alcohol, por lo que Calabacín es llevado a un orfanato en donde conoce a otros pequeños.

Ahí se nos va revelando, con la inocencia de un niño, las historias que pasaron cada uno de los huérfanos, en las que se involucran temas como la violencia doméstica y el abuso sexual, entre otras.

A través de la técnica de stop-motion, que consiste en aparentar el movimiento de objetos gracias a una serie de imágenes sucesivas, acompañamos a Calabacín en su nueva vida dentro del orfanato, donde junto a sus amigos, reflexionan sobre si nadie los quiere o si nadie adopta niños de su edad (entre los ocho y nueve años), llevándonos como espectadores a también cuestionarnos sobre temas como la adopción.

Además, a través de la relación de Calabacín con compañeros como Ahmed, Alice y Camille, nos regalan un ejemplo de amistad, en las buenas y en las malas.

"La vida de Calabacín" estuvo nominada a Película animada en la entrega del Oscar y del Globo de Oro de 2017 y ganó el César por Filme Animado, entre otros.

¿Dónde?: Mubi