Pedofilia. Mandan a juicio al falso productor de programas infantiles

Se presentaba como productor artístico y televisivo. Su speech, hace más de 15 años, se basaba en decir que estaba a cargo de la filmación de una publicidad de shampoo y crema de enjuague para el exterior. Así, logró engañar a decenas de padres que permitieron que sus hijas, de entre cuatro y diez años, fueron filmadas mientras se bañaban desnudas. Pero las grabaciones nunca llegaron a la TV. Habrían sido parte de los 2000 archivos de pornografía infantil hallados en la computadora de Rodolfo Suárez, un suboficial retirado de la Policía Federal Argentina (PFA) que nada tenía con las producciones de ficción y con los comerciales para la pantalla chica.

El falso productor de TV ahora deberá enfrentar un juicio oral y público acusado del delito de promoción de la corrupción de niñas menores de 13 años, reiterado en dos ocasiones, que concursan de forma real entre sí, en concurso real con la producción, distribución y tenencia de representaciones de un menor de 18 años dedicado a actividades sexuales explícitas o de sus partes genitales con fines predominantemente sexuales.

Así lo resolvió el juez en lo criminal y correccional porteño Darío Bonanno al hacer lugar al requerimiento de elevación a juicio presentado por la fiscal Cinthia Oberlander. Como informó LA NACION en septiembre pasado, la causa comenzó de forma fortuita cuando Suárez, de 72 años y vecino de Flores, llevó su computadora a un local especializado para que le hicieran un servicio técnico.

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Corría marzo del año pasado cuando el técnico que debía hacer el trabajo descubrió, almacenados en la PC de Suárez, 11.842 archivos, entre los cuales había más de 2000 archivos de material de pornografía infantil, incluidos los de las víctimas que fueron engañadas y se dejaron filmar al pensar que eran parte de un casting para una publicidad.

"Estos actos de promoción de la corrupción de menores se llevaron a cabo mediante la producción, publicación y distribución de la participación de tales niños en imágenes y filmaciones de actividades sexuales explícitas y con exhibición de sus genitales con fines sexuales, haciéndolos protagonizar y soportar conductas pasibles de impactar sobre su normal desarrollo de la sexualidad", sostuvo la fiscal Oberlander en el requerimiento de elevación a juicio, al que tuvo acceso LA NACION.

Según se desprende del expediente judicial, además de las filmaciones que Suárez producía en las casas de las víctimas se descubrieron archivos que el imputado conseguía por medio de "videollamadas y videoconferencias online".

"El caudal de información que pudo recabarse de dicho soporte electrónico [la computadora que el acusado llevó para que le hicieran el service] reveló conductas delictuosas cuyo principal imputado sería Suárez, que fueron luego delineadas por la interacción del incuso en sus redes sociales, sus conversaciones telefónicas, las tareas de investigación y peritajes hechos por el personal de la Sección Análisis de Investigaciones Especiales de la Policía de la Ciudad y, finalmente, con el material hallado en su hogar en el registro domiciliario", sostuvo el juez Bonanno en septiembre pasado, cuando procesó a Suárez.

Uno de los hechos que habría protagonizado el imputado ocurrió entre 2003 y 2004, cuando la madre una niña de siete años, después de haber llenado una base de datos para un supuesto casting para el programa de TV Patito Feo, recibió una llamada de una mujer para concretar una cita.

Unos días después, Suárez se presentó en Tigre, en el domicilio de la familia interesada en el casting de Patito Feo.

"Suárez logró filmar a la niña en la ducha con ropa interior. La filmación se prolongó por 15 minutos. El imputado le indicaba las poses que debía realizar. Después de un rato, le indicó que se quitara la ropa interior y para convencerla de hacerlo, le dijo que no se preocupara porque la grabación era para el exterior. De esta forma, logró continuar la filmación en el baño, mientras la niña se duchaba desnuda", sostuvo la fiscal Oberlander en el pedido de elevación a juicio.

En un primer momento, el Ministerio Público estuvo representado por la fiscal Marcela Sánchez, que se jubiló en abril pasado.

"Los elementos de prueba reunidos han permitido demostrar que Suárez ha intervenido en la producción de los videos e imágenes de contenido pornográfico, en su publicación y también posterior distribución", afirmó la fiscal Oberlander.