Qué pasa cuando un Tevez de los All Blacks viola las reglas

El deporte está detenido, pero los deportistas, de alguna manera u otra, encuentran lugar para el protagonismo. Nueva Zelanda, que viene con buenos registros de control de la pandemia instrumentando medidas muy similares a las que fueron impuestas en la Argentina, tuvo otro tema central cuando en las últimas horas una de las estrellas de los All Blacks, Richie Mo'unga, violó las reglas de aislamiento al acudir a un parque para entrenarse en un parque con otros jugadores. Para dar una dimensión de lo que implica este hecho en Nueva Zelanda, cabe decir que es como si aquí hubiese ocurrido lo mismo con Enzo Pérez, Carlos Tevez u otra figura del fútbol local.

Mo'unga tuvo su pico más alto en el campeonato que en 2019 logró Crusaders en el Súper Rugby venciendo en la final a Jaguares. Tal fue su influencia que para la Copa del Mundo el entrenador de los All Blacks, Steve Hansen, desplazó al puesto de fullback al habitual 10 y gran estrella, Beauden Barrett, para que Mo'unga fuera el apertura. Talentoso e imprevisible en la cancha, el jugador de 25 años quedó ahora en el centro de las acusaciones, al punto de que la primera ministra, Jacinda Ardern, enfatizó: "Todavía hay algunos a los que describiría, siendo generosa, como idiotas".

Las imágenes de Mo'unga y un grupo de otros jugadores entrenándose en un parque de Christchurch se replicaron en todos los medios. Inmediatamente, el repudio salió de la propia New Zealand Rugby (NZR) y de Crusaders, cuyo gerente, Colin Mansbridge, fue contundente: "Este es un momento en que nuestra comunidad necesita que trabajemos juntos y nos cuidemos unos a otros. Nuestros jugadores son líderes sociales en ese sentido y no deberían hacer estas cosas".

Mo'unga se disculpó una y otra veces a través de sus redes sociales. Unos días antes, el propio Beauden Barrett había subido a su cuenta de Instagram unas fotos en las que se veía que iba a entrenarse solo a un parque cercano a su casa, en su bicicleta, con una bolsa de pelotas y el tee para patear. Eso está aún permitido: hacer ejercicio en los alrededores del domicilio y de a uno o con los ocupantes de la casa.

Una nota publicada por The Washington Post y reproducida el martes por LA NACION da cuenta del éxito que están generando las medidas tomadas por Ardern, que consisten en un aislamiento total -salvo para aspectos esenciales- de cuatro semanas, que empezaron el 24 de marzo. Incluso, los controles se fortalecerán durante Semana Santa. Las fronteras están cerradas desde el 19 del mes pasado. Quizá la diferencia con la Argentina es que Ardern tiene un apoyo irrestricto de todo el arco político -hasta el derechista Partido Nacional- y el arco empresarial. Pero, claro, siempre algo se va de las manos. El propio ministro de Salud fue descubierto violando la cuarentena al irse con su familia a una playa. Ardern dijo que no lo echaba porque era un mal momento.

Por eso, con el peso de los All Blacks -el símbolo del país- lo de Mo'unga cobró carácter nacional. Alejandro Oneto Gaona conoce en profundidad la cultura kiwi. El año pasado estuvo viviendo con Crusaders, y Mo'unga fue uno de los ABs que en 2018 almorzaron en su casa. Me traza unas líneas para comprender mejor este escenario: "En el ADN neozelandés hay factores culturales omnipresentes. El sacrificio de las preocupaciones o causas personales en pos del mantra (haka) de ayudar al otro. Una filosofía de permanecer unidos, de mantener la moral entre ellos". Como decía un querido y recordado maestro, el rugby es mucho más que correr, saltar y pasar la pelota.