El partido Hermanos de Italia se enfrenta a la prueba del cordón sanitario en el Parlamento Europeo

El partido Hermanos de Italia se enfrenta a la prueba del cordón sanitario en el Parlamento Europeo

La recién elegida eurodiputada del partido Hermanos de Italia, Antonella Sberna, aspira a la vicepresidencia del Parlamento Europeo en una votación que se celebra esta tarde en Estrasburgo. Sberna, antigua funcionaria del Parlamento italiano, ya hizo prácticas en la Eurocámara en 2005 con el grupo del Partido Popular Europeo, PPE.

Es la primera vez que la principal formación gobernante de Italia busca un alto cargo parlamentario, algo que evitaba estratégicamente en el pasado para evitar el llamado 'cordón sanitario', práctica por la que los grupos centristas proeuropeos se agrupan para negar a los partidos de derecha los puestos más altos de la institución. Esta práctica ha excluido históricamente a legisladores de partidos de extrema derecha, como la Agrupación Nacional de Marine Le Pen, el Fidesz de Viktor Orbán y La Liga de Matteo Salvini, de los puestos de poder en el Parlamento Europeo.

Dentro del grupo de los Conservadores y Reformistas Europeos, ECR, solamente la formación polaca Ley y Justicia, PiS, se ha visto sometida al 'cordón sanitario', mientras que otras delegaciones, como la belga NVA, la Alianza Nacional de Letonia o el antiguo miembro del grupo, el español Vox, han visto cómo algunos de sus eurodiputados eran elegidos para puestos de responsabilidad.

¿Se aplicará el 'cordón sanitario' al partido Hermanos de Italia?

La votación de hoy dará respuesta a la cuestión pendiente de si el 'cordón sanitario' se aplica al partido Hermanos de Italia. Si la candidatura de Sberna prospera, será señal de que la formación de Meloni puede participar en el reparto de poder. Si no lo hace, eso comprometería la cooperación del partido con las familias políticas que gobiernan la Unión Europea.

Giorgia Meloni ya se ha lamentado de su exclusión y de la falta de consultas en otras carreras por altos cargos, que el mes pasado desembocaron en los nombramientos de los próximos presidentes del Ejecutivo y el Consejo Europeo, así como del responsable de Asuntos Exteriores de la UE.

La presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, quien se ha reunido con los eurodiputados en un intento de recabar apoyos antes de la votación de confirmación de su reelección el jueves, ha señalado en repetidas ocasiones que no participará en la "cooperación estructural" con el grupo derechista ECR. La última vez que se comprometió a ello fue este lunes en una reunión con el grupo de la Izquierda Unitaria Europea, y la semana pasada ante los liberales. Sin embargo, lo que significa en esencia no está claro, ya que deja la puerta abierta a la cooperación "no estructurada", sea lo que sea lo que esto signifique.

Conversaciones para tender puentes con el PPE

Los intentos del grupo ECR de tender puentes con la agrupación de centro-derecha PPE ya han comenzado, empezando por las conversaciones informales que condujeron al intercambio de la presidencia de dos comisiones parlamentarias. Inicialmente, los conservadores pretendían obtener la presidencia de la Comisión de Libertades Civiles, Justicia y Asuntos de Interior en el primer reparto de altos cargos del Parlamento, pero los eurodiputados socialistas y liberales se opusieron.

El PPE acudió entonces al rescate del grupo ECR acordando transferir a los conservadores la presidencia de la Comisión de Agricultura y Desarrollo Rural del Parlamento Europeo, menos controvertida, pero igualmente poderosa.

Como muestra adicional de buena voluntad, el grupo ECR ha expresado su apoyo a la candidatura de Roberta Metsola para ser reelegida presidenta del Parlamento Europeo. "Es capaz de tender puentes y encontrar puntos en común entre los distintos bandos políticos", declaró Nicola Procaccini, presidente del grupo ECR y figura más destacada del partido Hermanos de Italia en Estrasburgo. Además, Procaccini alabó el compromiso de Metsola con el diálogo, el equilibrio y el compromiso.