Yahoo Noticias Opinión: El príncipe Harry en la coronación del rey Carlos III me parte el corazón, ¿a ti no?
Nunca hubo una figura más solitaria que el segundo hijo del rey caminando solo por el pasillo en la coronación.
Si no te doliera el corazón por ver al Príncipe Harry, sí, el “repuesto”, la oveja negra, el atípico: tomar esos valientes pasos todos solo para sentarse junto a antiguos amigos y parientes después de meses de acritud, entonces debes ser de piedra.
Olvídese de lo que "ha hecho": las memorias explosivas y reveladoras, el revelador documental de Netflix, las revelaciones del círculo interno que han conmocionado al núcleo de la familia real. Todo lo que vi fue a un hombre tímido, de rostro sombrío, dolorido, sin el consuelo de su esposa para suavizar el golpe. Solo puedo imaginar cuán fuertemente debe haber estado apretando los dientes para hacerlo en primer lugar.
Y mientras el duque de Sussex entraba al lugar con sus primas, Beatrice y Eugenie, y sus respectivas parejas, no podía verse más solo. Todos sabemos lo que es tener que ir a un “gran evento” (una boda, una fiesta familiar, un cumpleaños) sin tu otra mitad: sientes que falta una parte de ti. Estás sin la única persona que te haría sentir “más que” – al mismo tiempo que eres testigo de tu hermano con su esposa e hijos a su lado.
Debe ser muy doloroso para Harry estar sin Meghan hoy.
Tal vez no sorprenda que esté acortando su tiempo en Londres: se rumorea que Harry regresará a los EEUU casi inmediatamente después de la coronación, luego de llegar temprano el viernes por la mañana.
Pero imagina lo rápido que debe haber estado latiendo su corazón, lo difícil que debe haber sido mantener una cara de póquer perfecta. ¿Podrías haberlo hecho? No estoy segura de haberlo logrado. Especialmente porque es la primera vez que Harry ve a su padre, su hermano el príncipe William y otros miembros de la familia real desde que publicó sus memorias Spare en enero; notable por revelaciones tan impactantes como las afirmaciones de que William lo atacó físicamente, así como sus pensamientos sobre la reina Camilla, su vida sexual, su consumo de drogas y su “recuento de muertes” durante su tiempo sirvió en el ejército.
Si alguna vez has experimentado una ruptura familiar o un distanciamiento, o incluso una discusión salvaje en la mesa, entonces sabes cuánto se necesita para caminar de regreso a la habitación (sí, incluso si uno es el que salió furioso en primer lugar). Se necesita valentía, humildad y una gran cantidad de autoconciencia para enfrentar la situación después de haber causado un alboroto real. Por eso, Harry merece ser elogiado.
El hecho de que apareciera en primer lugar es lo suficientemente admirable; muchos no habrían podido digerirlo. Imagina los ojos del mundo, y mucho menos de tu familia, sobre ti y solo sobre ti; los susurros, las risitas y las miradas sarcásticas. Imagina saber que podrías haberlo evitado todo quedándote en casa con tu esposa y celebrando el cuarto cumpleaños de tu hijo. Los planes de cumpleaños de Archie aparentemente incluyen una “discreta” fiesta en la residencia de la pareja en California. Todo lo contrario a una coronación.
La gente critica a Harry por “traicionar” su familia, pero su presencia en el día especial de su padre, en mi opinión, demuestra lo contrario: les está mostrando mucho respeto, a expensas de su propia comodidad. Alguien menos hombre no habría ido en absoluto.
Hemos explorado antes la idea de que podrías tener que “divorcio” su familia para tener un matrimonio exitoso; He escuchado el argumento de que, de hecho, está bien que Harry haya elegido a Meghan y a sus hijos Archie y Lilibet, por encima del sentido del deber y la rígida responsabilidad que lo habrían mantenido sofocado e infeliz. Algunos podrían argumentar que lo más valiente hubiera sido que Meghan asistiera a la coronación para estar a su lado. Pero si no se hubiera separado del establecimiento, si hubiera permanecido en Gran Bretaña y la pareja fuera el centro de los procedimientos, supongo que veríamos a un hombre aún más reducido.
Lo que Harry ha hecho hoy requirió agallas, fuerza, determinación, amor y respeto. Deberíamos mostrarle lo mismo a cambio.
