Oleoducto reanuda operaciones tras amenazas de deslizamientos en Ecuador

QUITO (AP) — El Oleoducto de Crudos Pesados, uno de los dos más grandes de Ecuador, reanudó el miércoles sus operaciones tras 16 días de paralización debido a la amenaza de deslizamientos en el terreno montañoso por donde pasa en la Amazonía.

En un comunicado esa empresa privada aseguró que se pudo restablecer el transporte de petróleo luego de la construcción de dos variantes, por un total de 2,8 kilómetros, en la zona de erosión del río Quijos tras las intensas lluvias registradas en el país en las últimas semanas.

Añadió que la variante fue construida por un equipo técnico de unas 400 personas y el apoyo de más de 20 compañías.

Desde mediados de junio la empresa declaró la fuerza mayor para protegerse legalmente de eventuales demandas y suspendió las operaciones por la erosión en las laderas aledañas al río Coca y sus afluentes, por donde pasa además el oleoducto Transecuatoriano, que se mantuvo operativo pero bajo estrecha vigilancia.

Debido a esa situación la producción de petróleo de Ecuador se redujo de 486.219 barriles diarios el 17 de junio, cuando el oleoducto suspendió sus actividades, a 382.048 barriles el pasado lunes.

Los dos oleoductos son los más grandes del país y cubren una extensión alrededor de 500 kilómetros llevando el crudo desde los campos de producción de la Amazonia, pasando por las alturas de la zona andina hasta llegar a orillas del océano Pacífico.

A fines de 2021 Ecuador suspendió las exportaciones petroleras debido a deslizamientos que afectaron el oleoducto estatal y el de crudos pesados, que también resultó dañado en febrero de 2022 por la caída de una roca de gran tamaño. En febrero del año pasado ambos ductos se destruyeron por el colapso de un puente junto al cual pasaban.

El fuerte temporal invernal que afectó a la zona oriental y de los Andes dejó un saldo 19 personas fallecidas y 28 heridas y 3.343 afectados, según cifras de la Secretaría de Riesgos. Las intensas lluvias también han provocado deslaves, desbordamientos de ríos, rupturas de puentes y otras afectaciones a la estructura pública y privada en buena parte del país.