La ola de calor obliga a cerrar la Acrópolis de Atenas y los incendios azotan Croacia

Por Deborah Kyvrikosaios

ATENAS, 14 jul (Reuters) - Grecia cerró el viernes la antigua Acrópolis durante las horas más calurosas del día para proteger a los turistas, mientras los habitantes de Croacia realizaban labores de limpieza tras un incendio, durante una feroz ola de calor que azota el sur de Europa.

En Italia se teme por los próximos días, ya que se prevé que el calor se intensifique y que las temperaturas superen los 45 °C la próxima semana en el centro y el sur del país.

Los meteorólogos italianos llaman a la próxima fase de la ola de calor "Caronte", en referencia al barquero de las almas de los muertos en la mitología griega. Es el sucesor de Cerbero, el perro de tres cabezas del inframundo.

La Agencia Espacial Europea (ESA, por sus siglas en inglés), cuyos satélites vigilan las temperaturas terrestres y marinas, ha advertido que Italia, España, Francia, Alemania y Polonia se enfrentan a condiciones extremas.

Las temperaturas podrían batir el récord actual de Europa: 48,8 grados centígrados registrados en Sicilia en agosto de 2021.

El impacto del calor extremo del verano se ha puesto de relieve en un estudio realizado esta semana, según el cual hasta 61.000 personas podrían haber muerto a causa del calor sofocante en toda Europa el verano pasado.

Joan Ballester, catedrático del Instituto de Salud Global de Barcelona, afirma que Francia aprendió de la mortífera ola de calor de 2003 lecciones que países como Italia, Grecia, España y Portugal podrían seguir.

"Hay medidas que son relativamente baratas, como por ejemplo, coordinar a las entidades públicas haciendo también un censo de las poblaciones vulnerables", dijo Ballester, coautor del estudio de esta semana.

"Pero hay medidas mucho más caras, como por ejemplo el rediseño de las ciudades para mejorar las condiciones de vivienda", dijo a Reuters.

(Reportes de Deborah Kyvrikosaios, Angeliki Koutantou, Antonio Bronic, Malgorzata Wojtuni, Horaci Garcia, Guillermo Martinez y Catherine Macdonald; redacción de Keith Weir; edición de Andrew Heavens; editado en español por Flora Gómez)