ATENAS.– Europa comenzó a sentir esta semana una implacable ola de calor, con la advertencia de que las temperaturas podrían alcanzar máximos históricos la semana próxima, lo que hace temer un impacto dramático en la salud humana, los cultivos y los animales.

La Agencia Espacial Europea (ESA), cuyos satélites vigilan las temperaturas terrestres y marinas, vaticinó que julio será un mes con temperaturas récord, producto de la ola de calor que se generó en África y que la Sociedad Meteorológica de Italia bautizó como “Cerbero”.

“Italia, España, Francia, Alemania y Polonia se enfrentan a una importante ola de calor, con temperaturas que se espera que alcancen los 48°C en las islas de Sicilia y Cerdeña, potencialmente las temperaturas más altas jamás registradas en Europa”, señaló la ESA.

El impacto del calor extremo del verano se puso de relieve en un estudio realizado esta semana, según el cual 61.000 personas podrían haber muerto en las sofocantes olas de calor del verano pasado en Europa.

El sur del continente ya siente el impacto. Varios países anunciaron o implementaron en estos días medidas de emergencia como cambios de personal, alertas en los teléfonos celulares y mayores patrullas de bomberos en los bosques cuando las temperaturas en la Europa mediterránea escalan sin freno.

Gobiernos y empresas se ven presionados para tomar más iniciativas para proteger a los trabajadores expuestos al sol abrasador en la ola de calor, que recibe su nombre del perro de tres cabezas del inframundo en la mitología griega. “El calor es un asesino silencioso. La principal preocupación es que la vida de las personas está en peligro”, dijo la climatóloga Hannah Cloke, profesora de la Universidad de Reading.

En Italia se teme por el impacto sobre quienes trabajan al aire libre, después de que un hombre de 44 años que pintaba marcas viales en la ciudad de Lodi se desplomara y muriera esta semana.

Las autoridades italianas emitieron un aviso de alerta roja máxima para diez ciudades durante los próximos dos días, entre ellas Roma, Florencia, Bolonia y Perugia.

La televisión italiana advirtió a los habitantes de las ciudades que cuidaran sus mascotas y mantuvieran contacto permanente con parientes ancianos.

En Grecia, donde esperan máximas de hasta 44°C entre hoy y mañana, decidieron cerrar anticipadamente la Acrópolis de Atenas, el monumento más visitado del país, para evitar que los turistas se expongan a las horas más calurosas del día.

“Hoy, 14 de julio, la última entrada al sitio de la Acrópolis tendrá lugar a las 12 hora local antes de su reapertura a las 17″, las indicó un comunicado del servicio arqueológico de la ciudad de Atenas. Los sitios cercanos a la Acrópolis, como el Ágora, permanecerán abiertos.

Peligro en el aire

El gobierno griego ordenó para los próximos días la suspensión del trabajo entre las 12 y las 17 en las zonas donde el riesgo por calor es muy alto, y también pidió trabajo a distancia para los empleados del sector privado con problemas de salud. Además se abrieron al público salas con aire acondicionado.

En los Balcanes, los bañistas de la ciudad croata de Nin se untaron en el barro medicinal de la zona para protegerse del sol, mientras 56 bomberos con 20 vehículos y tres aviones luchaban por contener un incendio de matorrales cerca de la ciudad adriática de Sibenik.

En Macedonia del Norte, el calor provocó un pico en las llamadas de emergencia a la asistencia médica. Y en Chipre, las autoridades advirtieron a la gente que evitaran ir a los bosques debido al peligro de incendios, mientras que Turquía enfrentaba simultáneamente incendios e inundaciones. “Mientras hay calor e incendios en un lado del país, hay inundaciones y diluvios en el otro”, dijo el viceministro de Agricultura, Veysel Tiryaki. “En nuestro país, como en todo el mundo, el cambio climático causa problemas”.

Según Cloke, la actual ola de calor se debe a la llegada de aire caliente procedente del Sahara, que luego se acumula en algunas zonas de Europa. Imágenes tomadas por los satélites Sentinel 3 de la ESA midieron el martes la temperatura de la superficie terrestre a más de 60°C en la región española de Extremadura.

Las previsiones meteorológicas y los registros oficiales se basan en la temperatura del aire, que es significativamente inferior a la lectura de la superficie terrestre. El récord europeo de temperatura de 48,8°C se registró en Sicilia en agosto de 2021 y esa cifra podría superarse.

“La próxima semana habrá una ola de calor aún más fuerte que esta, algunos valores en el centro sur serán realmente espeluznantes”, dijo Luca Lombroso, meteorólogo del grupo Ampro en Italia. “Entre el martes y el miércoles en Roma y Florencia superaremos probablemente los 40 grados, que también se alcanzarán en el norte”, añadió.

Los animales también están sufriendo las consecuencias. Coldiretti, el grupo de presión de los ganaderos italianos, afirmó que la producción de leche bajó alrededor del 10% porque las vacas comen menos con el calor, beben grandes cantidades de agua y producen menos leche.

Si bien el sur de Europa ha sido hasta ahora la zona más castigada, las temperaturas no dan tregua en ningún lado. La Organización Meteorológica Mundial dijo que las temperaturas globales de principios de julio eran de las más altas desde que se llevan registros.

Agencias Reuters y AP