La obra "Peek Chuun" está acompañada de chaneques y fantasía

CIUDAD DE MÉXICO, noviembre 18 (EL UNIVERSAL).- Danzones y marimba. Eso es lo utilizado en la obra "Peek Chuun", una adaptación de Peer Gynt de Ibsen, cuya música corrió a cargo de Daniel Hidalgo, compositor en cintas como "Amores perros" y "Cuidado con lo que deseas".

La puesta en escena, que se presenta en el Foro Sor Juana Inés de la Cruz del Centro Cultural Universitario de la UNAM, tiene elementos fantásticos que permitió la adhesión de entes como los chaneques, figuras mágicas del sur de México.

Diego Álvarez es el director del montaje cuya temporada concluye el próximo día 28.

"Fue llevar la música a la Península de Yucatán, usamos marimbas tocadas con arcos de guitarras y cosas muy de por ahí, hay danzones. No es que yo compusiera, sino que funcioné como traductor de alguna manera", cuenta Hidalgo.

"Originalmente es la historia de un personaje fantástico que le da la vuelta al mundo en 100 años y todo sucede en un mundo muy fantástico de la cultura noruega, hay duendes y elfos, y lo que hizo Diego fue una tropicalización más en el mundo de la cultura maya", agrega.

"Peek Chun" fue la encargada de cerrar el Festival Cultura UNAM de hace una semanas y ahora se presenta de jueves a domingo en corta temporada.

Hidalgo recuerda que las partituras originales de Edvard Grieg jamás se publicaron, pero se sabe que cada escena tenía un tema distinto. El más famoso fue "En la gruta del rey de la montaña", que en este caso se realizó con banda mixe.

"Hay versiones donde hay 28 escenas y otras de 35, no se sabe exactamente cuáles de ellos se estrenaron. Lo que hicimos fue escoger menos de 10 temas y adaptarlos. Hay marimbas que en algunos casos ejecutamos con arco de violín que vibra de manera particular y parecen casi un órgano", detalla.

"Lo que tiene el personaje es que nunca sabes si está en su fantasía o si está en su realidad y eso está desde el texto original. Cuando Diego y yo nos clavamos en ver la partitura fue ver que siempre tiene esa dualidad de lo fantasioso y realista", apunta.

Hidalgo indica que debido a que los ventiladores de las luces robóticas y los proyectores del teatro son ruidosos (superan los 50 decibeles) se generaron ambientes auditivos continuos. Como el teatro cuenta con dos pisos, se realizó una mezcla sonora para cada espacio, por ejemplo, mientras en la parte superior suena el viento y, abajo, el río y los grillos, la música sale por seis bocinas.

"Muchos de los ambientes y efectos están hechos con las voces de los actores. Grabadas, procesadas y editadas en mi estudio", destaca el especialista musical.