"Para algunos, Maddie era solo una drogadicta": conmovedor obituario revela el verdadero rostro de las adicciones

Madelyn Ellen Linsenmeir murió el pasado 7 de octubre a los 30 años, víctima de una sobredosis. En unos años su hijo Ayden, de 4, muy probablemente, no recordará a su madre y su lamentable muerte hubiera pasado como un caso más en las alarmantes cifras de muertes por consumo de drogas en Estados Unidos.

Pero un conmovedor obituario publicado por la familia de la joven da un nuevo significado para una pérdida aparentemente sin sentido.

Madelyn Ellen Linsenmeir, fallecida el pasado 8 de octubre, víctima de sobredosis/Foto de Facebook
Madelyn Ellen Linsenmeir, fallecida el pasado 8 de octubre, víctima de sobredosis/Foto de Facebook

Y es que el mensaje familiar se propaga con vigor por las redes, estimulando a muchos otros a compartir sus propias historias de adicción, mientras agradecen a los padres por no ocultar las luchas de sus hijos.

De acuerdo con el obituario publicado en Burlington Free Press, Linsenmeir probó por primera vez OxyContin -un analgésico opioide muy potente y adictivo- en una fiesta de la escuela secundaria, después que la familia se mudara de Vermont a la Florida. Ella tenía 16 años.

A partir de ese momento, la joven se embarcó en una peligrosa relación con los opioides, que finalmente acabaría con su vida.

“Es imposible capturar a una persona en un obituario y especialmente a alguien cuya vida adulta fue definida en gran medida por la adicción a las drogas”, escribieron sus padres. “Para algunos, Maddie era solo una drogadicta, pero quienes solo veían su adicción, dejaban de verla. ¡Y qué pérdida para ellos!”, lamentan los padres.

“Maddie era hilarante, cálida, intrépida y resiliente. Ella podía y quería hablar con todos y cuando estabas en su compañía no querías dejarla”, dice el mensaje.

“En un sistema que parece haberse endurecido contra los adictos y les está fallando todos los días, se hizo amiga y encantó a los policías, trabajadores sociales, defensores públicos y médicos, quienes la defendieron y creyeron en ella hasta el final”, cuenta el obituario.

En la publicación, la familia relata momentos importantes de la lucha de su hija contra la adicción y cómo después del nacimiento de su hijo “Maddie se esforzó más y más, de manera implacable para mantenerse sobria, más de lo que nunca hemos visto a nadie intentar algo. Pero ella recayó y finalmente perdió la custodia del niño, una pérdida que le resultó insoportable”.

Los últimos dos años fueron particularmente difíciles para la madre soltera, que logró mantenerse lejos de las drogas 12 días durante el verano, un período que “llenó de natación, películas de Disney y cenas familiares, creímos, como siempre lo hicimos, que superaría su enfermedad y tendría la vida que sabíamos que ella merecía “, describe el obituario.

La familia no reveló qué droga tomó la joven antes de su muerte, pero instó a otros que están luchando contra la adicción a “saber que cada aliento es un nuevo comienzo”.

“Sepan que cientos de miles de familias que han sufrido pérdidas por esta enfermedad están orando y alentándolos. Sepan que creemos con todo nuestro corazón que puedes lograrlo y lo lograrás. Nunca es demasiado tarde”, es parte del sentido mensaje de la familia Linsenmeir a otros usuarios de drogas que combaten el vicio.

La familia de Linsenmeir no es la primera que revela la adicción de sus hijos a través de un obituario y cada vez más personas optan por utilizarlos como plataforma para advertir a otros sobre el peligro de consumir drogas.

Por último, en vez de flores, la familia expresó su deseo de que se hicieran donaciones al Centro de Turning Point y de que aquellos que juzgan a otros con problemas de adicción “se eduquen sobre esta enfermedad, porque eso es lo que es. No es una elección o una debilidad”, concluye.

Crisis de opioides

Las cifras hablan por sí solas de la dimensión del problema. Desde 1999, el número de muertes por sobredosis con opioides se ha cuadriplicado en Estados Unidos. Entre 2000 y 2015, se registraron más de 500,000 fallecimientos por sobredosis de drogas, siendo que los opiáceos representan la mayoría de ellas.

Foto: Time
Foto: Time

Más de 63,600 estadounidenses fueron víctimas de sobredosis mortal en 2016, con casi dos tercios de las muertes relacionadas a opioides, vendidos por prescripción o ilícitos.

Según el Centro para el Control y Prevención de Enfermedades de Estados Unidos, los datos confirman que un aumento en las muertes por sobredosis está siendo impulsado por el uso de opioides sintéticos, incluido el fentanilo fabricado clandestinamente.

En octubre de 2017, el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, declaró la epidemia de opioides como una emergencia nacional de salud pública.

En la ocasión, el mandatario insistió que “nadie ha visto nunca lo que está ocurriendo ahora”. “Como estadounidenses, no podemos permitir que esto continúe. Es hora de liberar a nuestras comunidades de este flagelo de la drogadicción”, expresó Trump.