Norah Jones cantará en Cuba, en viaje ‘educativo’ con paseos en almendrón y cena en paladar

Norah Jones promociona en sus redes sociales un viaje a Cuba para febrero del 2024, que incluye dos conciertos, clases con alumnos de escuelas de arte y una estancia turística de cuatro días en el Hotel Grand Aston, ubicado en el malecón habanero y con vistas a la bahía.

La cantautora estadounidense dijo que estaba “entusiasmada” de ir por primera vez a Cuba como parte de Vive en La Habana, al que calificó como un “intercambio cultural y educacional” en el que espera “aprender más de la herencia cultural del país a la vez que compartirá su música en la isla”.

Jones compartió el sitio online para hacer reservaciones para el viaje, norahinhavana.com, en el que se ofrecen paquetes con precios desde $3,499 a $8,599, con un descuento del 10 por ciento si se hacen las reservaciones antes del 27 de noviembre. El viaje sería del 15 al 18 de febrero del 2024.

La intérprete y compositora, ganadora de nueve premios Grammy, ofrecerá conciertos el 17 y 18 de febrero en el legendario Teatro Martí, ubicado en la capital cubana, muy cerca del Paseo del Prado, y del hotel Saratoga, donde ocurrió una explosión en mayo del 2022, en la que murieron 22 personas. También habrá la oportunidad de asistir a una sesión de preguntas y respuestas con la artista en el mismo teatro y de recibir un afiche firmando por ella.

Jones, de 44 años, una apreciada artista que cultiva una fusión de jazz, pop y folk, es la hija del legendario intérprete de cítara indio Ravi Shankar (1920-2012), conocido además de, por sus propios méritos, por sus colaboraciones con George Harrison, y su influencia en The Beatles.

Norah Jones, un viaje turístico educacional a Cuba

El viaje de Jones a Cuba tiene características de un paseo turístico, aunque se escuda en el intercambio cultural, como establece un sitio web que promociona el viaje, coordinado por la productora Dreamcatcher Events, que organizó el concierto del artista Rufus Wainwright en Cuba en el 2017.

“Aunque los viajes individuales para ciudadanos estadounidenses a Cuba actualmente están descontinuados, Dreamcatcher Events tiene licencia y autorización completa tanto del gobierno de Estados Unidos (Departamento del Tesoro, Oficina de Control de Activos Extranjeros) como del Ministerio de Cultura de la República de Cuba para producir NORAH JONES: VIVE EN LA HABANA, asegurando que el evento cumpla con todas las normas necesarias”, deja establecido la página online Grafeful Web, que ofrece calendarios y reseñas de festivales de música.

Norah Jones: Vive En La Habana incluye un recorrido en viejos autos americanos que tanto se identifican con el turismo en la isla, los “almendrones”, en este caso un convertible, como específica el post de Dreamcatcher Events en su perfil de Instagram.

También los viajeros podrán disfrutar de un tour por La Habana Vieja y de comidas en restaurantes, como Cocinero, Atelier, Il Carbon y La Guarida, el paladar que que visitaron Beyoncé y Jay-Z durante su viaje de aniversario de boda a Cuba en el 2013.

Se incluyen las masterclass con alumnos de la Universidad de las Artes de Cuba –antiguo Instituto Superior de Arte (ISA)– y conciertos de artistas cubanos como Alain Pérez y el grupo Síntesis, en La Casa de la Música y la Fábrica de Arte Cubano. Esta institución de la fiesta habanera ha estado afectada por los apagones –recortes de electricidad– que aquejan al resto del país, según el reciente pedido de la Fábrica a quienes la visitan, que dijo llevaran una fuente de energía propia para evitar que cerraran el lugar.

Viajes de artistas, ¿un nuevo deshielo?

Norah Jones: Vive En La Habana se asemeja en su naturaleza al evento que convocó a artistas y seguidores del género urbano a un cayo de Cuba, el Santa Maria Music Fest, en agosto. Aunque se trata de géneros musicales diferentes y de un tipo de público distinto, ambos acontecimientos tienen un precio muy elevado en dólares, muy difícil de pagar por los cubanos de la isla, que se enfrentan a la inflación y a la cotización del dólar, que supera los 252 en pesos cubanos (CUP).

Llegan también en un momento en que muchas aerolíneas han suspendido vuelos a Cuba y que las autoridades de la isla y los hoteleros más importantes, como la cadena española Meliá, reconocen que reciben menos turismo del esperado.

La ocupación de los hoteles de Meliá en Cuba en el trimestre que culminó en septiembre fue de un 41%, indicó el más reciente informe de la empresa española.

El Hotel Grand Aston, en que se alojarán los convocados al viaje para ver a Jones, es administrado por Archipelago, una compañía del sudeste asiático.

Algunos activistas y opositores cubanos critican el viaje de Jones como parte de un nuevo deshielo y del “intercambio cultural”, que se se fue fraguando durante años y culminó con viajes de celebridades y artistas a Cuba como Rihanna o los Rolling Stones, durante el acercamiento entre Cuba y Estados Unidos en el gobierno de Obama.

“Al parecer el ‘deshielo’ del ‘intercambio cultural’ está regresando a la Cuba de los más de mil presos políticos, la represión diaria y la miseria de su población producto de un régimen que no quiere ceder en sus privilegios”, dijo en la plataforma X el activista José Raúl Gallego, que presentó un listado de hoteles en el que el Grand Aston aparece como parte de la corporación estatal Gaviota, de los militares cubanos.

De alguna manera se repite la situación del Santa Maria Music Fest en el que los asistentes se alojaron en hoteles propiedad de Gaviota, que pertenece a GAESA, según denunciaron entonces otros activistas.

“Tres de los cuatro hoteles que aparecen en el anuncio del #SantaMariaCubaFest están sancionados por EEUU”, dijo el activista Norges Rodríguez a propósito del polémico Santa Maria Music Fest.

Saily González Velazquez, una emprendedora que sufrió un acto de repudio en noviembre del 2021, cuando el régimen cubano impidió una marcha cívica convocada por el grupo Archipiélago, también pidió solidaridad de Jones con los presos políticos.

“Sería conveniente que @NorahJones use su influencia para pedir la libertad de los artistas presos por la dictadura, ya que está promoviendo ‘intercambios culturales y educacionales’. La libertad de los artistas y de los más de 1,000 presos políticos en Cuba”, dijo González Velazquez, en la plataforma X.