¿Qué es la neutralidad de la red? No se refiere al contenido, sino al acceso a la web

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El titular de la Unidad de Inteligencia Financiera (UIF), Pablo Gómez, mencionó en la conferencia mañanera al hablar de la investigación al medio Latinus que hay campañas en internet que van contra la “neutralidad de la red” y lo que establece la Constitución al respecto, en el artículo 7.

“(La red) es neutral; no puede ser apropiada, en parte, ni mucho menos totalmente, por un grupo, un mecanismo de apropiación”, dijo Gómez, luego de que en la sección Quién es Quién en las Mentiras se denunciaran supuestas operaciones en redes en contra del gobierno de Andrés Manuel López Obrador. 

Pablo Gómez se refirió a la neutralidad de la red
Pablo Gómez durante la conferencia mañanera del 3 de julio se refirió a la neutralidad de la red. Cuartoscuro / Andrea Murcia

 

Sin embargo, especialistas nos explicaron que la neutralidad de la red, más que referirse al contenido que publican cuentas o medios digitales, se enfoca en que los usuarios puedan acceder libremente a cualquier contenido, aplicación o servicio de su elección.

Según lo que refiere el Instituto Federal de Telecomunicaciones, la neutralidad busca que los proveedores del servicio de acceso a internet traten el tráfico generado por sus usuarios en las mismas condiciones, sin importar su contenido, origen o destino y respetando la privacidad de las personas.

Es decir, se enfoca en garantizar la igualdad de condiciones técnicas como la velocidad de acceso y disponibilidad de los contenidos, sin restricción por parte de los proveedores de servicios.

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La neutralidad de la red está relacionada con el derecho a la libre expresión, así como otras garantías como la libertad de reunión y el libre esparcimiento, explicó a El Sabueso Paul Aguilar, coordinador de seguridad digital de la organización SocialTIC. 

Y si bien la neutralidad de la red no se menciona explícitamente en el artículo 7 de la Constitución, sí se establecen condiciones para su protección, al prohibir cualquier restricción a los medios técnicos o tecnologías de la información para difundir cualquier idea, información u opinión.

“De ninguna manera el que alguien lance una campaña, aunque estemos de acuerdo o en desacuerdo, con recursos legítimos, como la gente organizándose orgánicamente para hacer una campaña, o incluso ilegítimos, que alguien opere una red de bots, eso no tiene nada qué ver con la neutralidad de la red”, mencionó en entrevista Luis Fernando García, director de la Red en Defensa de los Derechos Digitales (R3D).

¿Qué sí va en contra de la neutralidad de la red?

Si bien el dicho de Gómez fue impreciso respecto a la neutralidad de la red, en México sí se producen algunos fenómenos que atentan contra este principio. Cuando los proveedores de servicios de internet favorecen o privilegian a ciertas aplicaciones o empresas de servicios digitales.

Un ejemplo son los paquetes de servicios de datos que ofrecen las compañías de telefonía, en los que sólo ciertas aplicaciones de mensajería o de entregas o viajes son gratuitas. Ello va en detrimento de sus competidores.

En el caso de los medios de información, se atentaría contra la neutralidad si, por ejemplo, el proveedor de internet o la plataforma ofreciera acceso gratuito a los contenidos de algún medio de comunicación y en cambio bloqueara otros contenidos.

“Si Telmex o Izzi estuvieran bloqueando el sitio de internet del gobierno federal y dando como parte de sus paquetes gratuitos Latinus, eso sí sería una violación de la neutralidad de la red, pero por parte del proveedor de acceso a Internet”, detalló García.

La neutralidad de la red también puede verse comprometida con la publicidad o las campañas pagadas, o incluso con los bots, consideró Josué Lugo, investigador especialista en estrategia digital e innovación de la UNAM. Ello porque, agregó, no en todos los casos se sabe distinguir cuándo se trata de un contenido pagado.

Por otro lado, destacó que las plataformas tienen medidas de control o restricción de contenido, pero son en pro de los derechos y  la libertad de expresión. Esto ocurre cuando se considera que el material difundido es discriminatorio, incita a la violencia o al odio, y esto no va contra la neutralidad de la red.