¿Serán las mujeres las encargadas de derrotar el trumpismo? | Opinión

Como todas las tendencias políticas viciadas que nacen de la “mala conciencia”, el trumpismo ha encontrado sus límites de desarrollo. Hoy está en pleno proceso de decaimiento. No será el Partido Demócrata quien lo aniquile, tampoco serán los migrantes latinos quienes lo sepulten. Ese trabajo le corresponde, respectivamente, a millones de mujeres y al Partido Republicano.

El Partido Demócrata ha tratado de mil maneras derrotar al trumpismo, pero nunca lo ha logrado. A sus dirigentes les faltó unión y una estrategia más sólida.

Por otra parte, el Partido Republicano, el cual ha estado radicalizado por una vanguardia intolerante, es quien se ha encargado de mantener con vida al trumpismo. Empero, la figura opaca de esta tendencia política ha estado languideciendo y no siento que se mantenga de pie por otros dos años.

A los latinos y otros migrantes minoritarios, particularmente de aquellos países que el mismo Trump llamó “shit-holes countries” (países de mie…), les ha sobrado ganas de derrotarlo, pero la condición de “indocumentados” no les ha permitido llevar a cabo este objetivo.

Adicionalmente, algunos ciudadanos estadounidenses que encarnan raíces latinas, como Mayra Flores de South Texas y los miles de personas que todavía piensan erróneamente que el socialismo castrista abunda en América Latina, no solo imploran la desgracia de su propia gente, sino también se postran de rodillas a los pies del trumpismo.

¿Entonces, quiénes serán los encargados de derrotarlo? Este grupo aglutina a millones de ciudadanas que toman parte en los partidos políticos tradicionales, como también en el Partido Libertario, en el movimiento Black Lives Matter, en el LGBTI y los tantos grupos de clase media, alta y baja.

Serán las mujeres quienes le darán la última estocada al trumpismo. Como destacó Tom Bonier en un artículo publicado en el New York Times: “Las mujeres están muy ansiosas de votar; nunca vi algo similar”.

Normalmente, las elecciones intermedias tienen el objetivo de poner en tela de juicio el trabajo del actual presidente. En este sentido, el partido opositor a menudo sale ganando al final de la contienda electoral.

Las elecciones de noviembre no serán nada diferentes. Una gran parte del electorado, particularmente hombres que pertenecen al Partido Republicano, estarán utilizando su voto para repudiar las políticas económicas que han dejado a la moneda nacional muy devaluada.

Sin embargo, millones de mujeres estarán depositando su voto en noviembre en contra del trumpismo. Esa será la estocada de muerte. El Partido Republicano no tendrá otra opción que sacar de sus entrañas a ese ente político que lo desvirtuó y le generó muchos problemas con las poblaciones conservadoras moderadas-tradicionales y con los demócratas.

Humberto Caspa, Ph.D. es investigador de Economics On The Move. E-mail: hcletters@yahoo.com.