Mujer que encerró a su hijo en una caja queda en libertad condicional

Una madre del estado de Florida (EE. UU.) quien fue acusada de encerrar a su hijo en una caja, se declaró culpable de varios cargos de negligencia infantil y no cumplirá con ninguna pena de prisión.

Tracy Ferriter (48) y su esposo, Timothy Ferriter, presuntamente retuvieron al adolescente, quien en ese momento tenía 14 años, en una caja de menos de tres metros cuadrados, sin ventanas, en la cochera de su casa en Jupiter, Florida. También había una cama, un balde, y una cámara, y al joven solo se le permitía salir para ir a la escuela.

En una audiencia celebrada el lunes, Tracy Ferriter se declaró culpable entre lágrimas de los cargos de abuso de menores con agravantes, retención ilegal, y negligencia infantil; también dijo que su hijo sufre de trastorno reactivo del apego, el cual puede causar frecuentes arrebatos de violencia.

Ferriter dijo al tribunal: “Estábamos viviendo una vida muy diferente a la que se retrata en los medios de comunicación. Hay muchas cosas que nadie sabía. Éramos una familia amorosa, y yo amo a mis hijos. Solo intentamos manejar la situación de la mejor manera posible”.

Tracy Ferriter y su esposo Timothy fueron arrestados por la policía de Jupiter en febrero de 2022, poco después de que su hijo huyera de la casa.

Timothy Ferriter fue condenado por los mismos delitos en octubre de 2023 y recibió una sentencia de cinco años de prisión. Su abogado declaró ante el tribunal en ese momento que la pareja había adoptado a su hijo en un orfanato de Vietnam cuando era pequeño, y que desde ese momento habían tenido dificultades con sus problemas de comportamiento.

La defensa de Tracy Ferriter, por su parte, argumentó que los Ferriter no eran maltratadores. Solo habían tomado una mala decisión en cuanto a cómo disciplinar a su hijo adolescente.

El juez del Tribunal de Circuito Howard Coates sentenció a la mujer a 10 años de libertad condicional y le ordenó cumplir 300 horas de servicio comunitario. Ferriter también deberá someterse a una evaluación de salud mental, y tomar clases de control de la ira y de crianza de los hijos; y tiene prohibido ponerse en contacto con su esposo y con su hijo.

“Su caso era completamente diferente al presentado durante el juicio de su esposo”, dijo el lunes el abogado defensor Marc Shiner.

Y concluyó: “Aunque las probabilidades de una exoneración eran altas, ella quiso terminar con esto para que sus hijos pudieran estar en paz”.

Traducción de Sara Pignatiello