Muestra obra " Voilà, Paris" a la primera vedette

CIUDAD DE MÉXICO, febrero 19 (EL UNIVERSAL).- La directora Fanny Sarfati ha convertido es misión de vida el traer del olvido a aquellas mujeres que hicieron algo trascendente a lo largo de la historia, con el fin de acercarlas a las nuevas generaciones, que descubran en ellas una motivación para cambiar su realidad.

"Estas niñas y jovencitas que están empezando a caminar en este planeta deben tener esta herramienta mental que les diga 'sí puedes' y 'sí hay que hacerse lugar a codazos', pues así se hace, o desde el femenino que es mucho más sutil, sensible y mucho mejor. No tratar de entrar con una energía masculina para empoderarse", comenta en entrevista.

Una de esas historias de fuerza femenina es la de Josephine Baker, una bailarina, cantante y actriz que nació en Saint Louis, Missuri, el 3 de junio de 1906 y era conocida como la "Venus de bronce". Su historia fue retratada por la escritora mexicana Gilda Salinas en la obra "Voilà, Paris", que estrena el 24 de febrero en Un Teatro.

"Hoy en día poca gente sabe quién es Josephine Baker, porque la historia a veces borra a muchos personajes, mayoritariamente si son mujeres, pero ella era una mujer empoderada, algo que a principios del siglo XX no era fácil, porque además era increíblemente libre".

La directora explica que Josephine, además de ser artista, fue una mujer muy valiente en su época. Por ejemplo, en la Segunda Guerra Mundial ayudó y fue parte integral de la resistencia francesa: escondió a judíos para salvarlos, recibió la Legión de Honor de manos del entonces presidente Charles de Gaulle y vivió en carne propia, tiempo atrás, la esclavitud en su país, Estados Unidos, por eso se cambió de nacionalidad, al considerar racista a su nación.

Trabajo multidisciplinario

Para contar en un monólogo la historia de quien es considerada la primera vedette, Fanny Sarfati explica que ha tenido que hacer un trabajo detallado con la actriz Sandra Galeano, quien debe interpretar otros personajes además de la protagonista, como son sus hijos, sus esposo e incluso a Josephine en sus diversas etapas de vida.

La actriz vive en México pero es de origen uruguayo, ha destacado por su destreza en mimo, baile y docencia.

"Sandra es muy talentosa, además es mimo clásico, lo cual ayuda mucho en el diseño de Josephine Baker, porque a pesar de no tener una formación formal tenía mucho de mimo en su estilo, además de que Sandra se parece mucho a esta artista de principios del siglo XX, lo que en este caso es maravilloso, porque te lleva directamente al personaje".

Fanny recuerda que este montaje vio su origen en el ciclo de monólogos Horas contadas, que consistía en representaciones de 15 minutos, donde precisamente se encontraron ella y Sandra Galeano, cuando la dirigió en el unipersonal de Josephine Baker; al verle potencial a esta historia la pusieron en manos de Gilda Salinas que creó "Voilà, Paris."