Muere un niño alérgico a los lácteos después de que un compañero le lanzase un queso

Karanbir Cheema, de 13 años, falleció el pasado año después de diez días inconsciente en un hospital de Londres tras sufrir una reacción alérgica mientras estaba en el colegio. Esta semana su caso fue escuchado en la corte y se determinó que el desencadenante de la tragedia fue el queso que un compañero le metió por la camiseta. Cheema era alérgico al trigo, al gluten, a los lácteos, a los huevos y a los frutos secos. Además, como indican en la crónica judicial de The Telegraph, era asmático y tenía piel atópica.

Un niño británico de 13 años falleció como consecuencia de la reacción alérgica que le provocó el trozo de queso que un compañero le metió en la camiseta. (Foto: Getty Images)
Un niño británico de 13 años falleció como consecuencia de la reacción alérgica que le provocó el trozo de queso que un compañero le metió en la camiseta. (Foto: Getty Images)

Ayer estaba llamado a declarar uno de los paramédicos que atendió a Cheema en las instalaciones del colegio. El primero en llegar al William Perkin Church of England High School, en Greenford, en la zona Oeste de Londres, fue Kierin Oppatt. Según su testimonio, en el que ha repasado todo lo acontecido el 28 de junio de 2017, la llamada a Emergencias quedó registrada como un caso de reacción alérgica a las 11:40.

Siete minutos después, Oppatt estaba en el lugar junto con a otro paramédico. Lo que se encontró fue al niño tirado en el suelo, jadeando, con problemas serios para respirar. Ante el tribunal de St. Pancras contó que el paciente estaba inconsciente y que al ver que su cuadro clínico era más complicado que lo que se suponía por el aviso tuvo que pedir apoyo.

“El personal de la escuela nos dijo que tal vez alguien había perseguido al paciente con queso y procedió a tirarlo por su camiseta”, recordó. No tenía cobertura en el lugar en el que estaban y salió a hacer la llamada. Al volver su compañero le informó de que Cheema había dejado de respirar. Entonces procedieron a iniciar los ejercicios de reanimación, le dieron adrenalina y utilizaron el desfibrilador para mantenerle con vida mientras llegaban el resto de profesionales médicos.

La ambulancia llegó y el niño fue trasladado al Hospital Great Ormond Street donde murió diez días más tarde sin haber llegado a recuperar la consciencia después de la reacción alérgica que le provocó el queso.

La madre de Karan, Rina Cheema, que estuvo presente en el tribunal escuchando a los testigos, recordaba a la salida del mismo a su hijo como un niño brillante que podía haber sido cualquier cosa que quisiese y que conocía muy bien su condición como alérgico.

El mismo día que ocurrió todo fue detenido un compañero de Karan de su misma edad, 13 años, contra el que no se han presentado cargos. Según The Telegraph, el menor ya no cursa sus estudios en el centro.