Yahoo Noticias Misión COLMENA no llegará a la Luna, pero México logra una marca espacial importante
¡Última actualziación! La empresa Astrobotic dio a conocer que la nave Peregrine, que lleva a la Misión COLMENA, no tiene ninguna posibilidad de aterrizar en la Luna, sin embargo, México consiguió un logro espacial al acercarse al 80% de distancia entre la Tierra-Luna.
Desde el lunes 8 de enero, luego de algunas horas tras su lanzamiento al espacio, se informó de algunas anomalías.
Así es como la misión Peregrine no podrá completar su histórica misión de ser el regreso de Estados Unidos al suelo lunar en cinco décadas.
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“Ninguna posibilidad de alunizaje”
Antes del medio día del 09 de enero, la empresa Astrobotric, que fabricó la nave Peregrine, informó a través de un comunicado que el módulo lunar no tiene “ninguna posibilidad” de un alunizaje suave.
Anteriormente se había anunciado que la nave estaba teniendo una “pérdida de combustible crítica”.
“No hay, desgraciadamente, ninguna posibilidad de aterrizaje suave sobre la Luna”, declaró Astrobotic en una declaración publicada en X/Twitter.
Colmena impone una marca para México en el espacio
Como anunció el Instituto de Ciencias Nucleares de la UNAM, la misión Colmena está a 310 mil km de la Tierra, lo que significa que completó un 80% de la distancia entre la Tierra y la Luna.
Con esta misión, México se unió al prestigioso club de países en el mundo que han llegado tan lejos en el espacio.
Seguirán recolectando “datos valiosos”
Sin embargo, Astrobotic no ve esta situación con Peregrine como un fracaso. En el mismo comunicado explicaron que siguen recibiendo “datos valiosos” de la nave y que servirán para un futuro intento de alunizaje.
A pesar de este fracaso, “tenemos todavía bastante combustible para continuar operando el vehículo como una nave”, indicó la empresa. “Estimamos que el combustible se acabará en unas 40 horas”.
El módulo lunar, bautizado Peregrine, fue desarrollado por Astrobotic con el apoyo financiero de la NASA.
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¿Qué pasó con la nave Peregrine?
El cohete Vulcan Centaur, de United Launch Alliance (ULA), despegó de la estación espacial de Cabo Cañaveral a las 01:18 (hora de la CDMX) de la madrugada del 8 de enero.
En su interior, transportaba el módulo lunar Peregrine del fabricante estadounidense Astrobotic, que logró una separación exitosa una hora después del lanzamiento.
Sin embargo, para las 08:37, Astrobotic publicó un comunicado donde se mencionaba que “se produjo una anomalía que impide que Astrobotic alcance una orientación estable hacia el sol”.
AFP explica que esa acción era muy importante, pues así sus paneles solares habrían alcanzado la máxima generación de energía para los sistemas.
Aunque los ingenieros encontraron una manera de lograr la dirección correcta gracias a una “maniobra improvisada”, horas más tarde, a las 20:16 en CDMX, Astrobotic informó que Peregrine sufrió una “pérdida crítica” de combustible.
A la nave le quedaban aproximadamente 40 horas de combustible antes de que entrara en una “caída incontrolable”.
“En este momento, el objetivo es acercar a Peregrine lo más posible a la distancia lunar antes de que pierda la capacidad de mantener su posición apuntando al Sol y, posteriormente, pierda potencia”, se lee en el comunicado publicado por Astrobotic.
En el plan original, el alunizaje de Peregrine en la Luna se realizaría hasta el 23 de febrero, en una región de latitud media llamada Sinus Viscositatis, o Bahía de la Pegajosidad, el 23 de febrero.
Pero ahora eso ya quedó en el pasado.
La NASA trabaja con Astrobotic para determinar el impacto de las cinco investigaciones científicas de la agencia a bordo de la nave espacial Peregrine Mission One.
