Una misión argentina lleva ayuda humanitaria a Sudán, la guerra olvidada en África

Enrique Piñeyro al mando de su Boeing 787, en el vuelo de Solidaire
Enrique Piñeyro al mando de su Boeing 787, en el vuelo de Solidaire - Créditos: @Anibal Greco

MADRID.- Mientras la atención mundial se concentra en el desarrollo de las guerras en Medio Oriente y Ucrania, el filántropo y piloto argentino Enrique Piñeyro decidió enfocarse en lo que llama “las guerras olvidadas”. Con total financiamiento de su fundación Solidaire, puso a disposición de Cruz Roja Internacional su avión Boeing 787 y este domingo llegó a Madrid para cargar 12 toneladas de ayuda humanitaria que el próximo martes llevará a Sudán, un país del nordeste africano que atraviesa una guerra que está matando a decenas de miles de personas, ya desplazó a más de 10 millones, y amenaza con devorar a 13 millones más por la hambruna.

“El mundo apenas le presta atención a este conflicto”, se lamentó Piñeyro durante el vuelo hasta Madrid en diálogo con LA NACION, mientras estaba al frente de su moderno Dreamliner que en 2021 compró a la empresa Aeroméxico, no para su disfrute personal sino para dedicar enteramente a causas humanitarias. En el “Contador” de misiones del sitio web de Solidaire recuerda que ya puso a salvo con su avión más de 3000 refugiados de países en guerra, y trasladó casi 200 toneladas de ayuda.

Desplazados por el conflico en Sudán.  El jefe de la OMS alertó que el conflicto está
Desplazados por el conflico en Sudán. El jefe de la OMS alertó que el conflicto está "devastando el sistema de salud" sudanés - Créditos: @OMS

Todos los gastos de la misión, incluso la compra de la ayuda realizada por la Cruz Roja Internacional y que está llevando a Sudán, corrieron por cuenta de Solidaire, que en la presentación de su página aclara expresamente que se trata de una “ong de acción directa” fundada por Piñeyro y su esposa Carla Calabrese -dueña del teatro Maipo-, y que “no acepta donaciones públicas ni privadas y se sustenta con fondos propios”, o sea, todo sale del bolsillo del matrimonio.

“Yo creo en un capitalismo disruptivo: convertir objetos de lujo en herramientas de transformación social”, explicó Piñeyro, un heredero de la fortuna de la familia Rocca -una de las más ricas de la Argentina-, que decidió desarrollar varias vocaciones al mismo tiempo. Además de ser filántropo, Piñeyro es médico, piloto de aviones, emprendedor gastronómico -dueño del exclusivo restaurante Anchoíta, en Chacarita- director de cine y actor. De hecho, el sábado a la noche, poco antes de subirse a su avión en Ezeiza, presentó a sala llena en el Teatro Coliseo su espectáculo de stand up “Volar es humano, aterrizar es divino”, que ya lleva 11 años en escena.

“La idea de ayudar en Sudán surgió luego de colaborar con la Cruz Roja en las inundaciones de Porto Alegre en mayo pasado. Fue allí que el presidente de la Cruz Roja Internacional nos preguntó si estábamos dispuestos a ayudar en ‘crisis olvidadas’ como pueden ser Eritrea, Etiopía, Yemen o Sudán”, explicó a LA NACION durante el vuelo.

“Originalmente estábamos armando un cargamento de ayuda para Gaza, pero increíblemente está cerrado el paso de Rafah, en el sur de la Franja. Es la primera guerra en la que se cierran incluso los pasos humanitarios, con lo que bajamos un paso más en la deshumanización de los conflictos bélicos. Ya hicimos llegar dos envíos a Gaza, pero el tercero no lo dejaron pasar, y entonces surgió la idea de colaborar en Sudán”, señaló Piñeyro.

El avión llegó así durante la tarde de este domingo a Madrid y durante la jornada del lunes se cargarán frazadas, redes para mosquitos (para una región azotada por el dengue y chikungunya), carpas, utensilios de cocina y bidones para cargar agua, un total de 45 pallets, 61 m3 de mercadería, 12 toneladas.

Soldados sudaneses de la unidad de Fuerzas de Apoyo Rápido, un grupo paramilitar,  dirigido por el general Mohammed Hamdan Dagalo, que recibió entrenamiento del Grupo Wagner del ruso Yevgueni Prigozhin. (AP Foto/Hussein Malla, Archivo)
Soldados sudaneses de la unidad de Fuerzas de Apoyo Rápido, un grupo paramilitar, dirigido por el general Mohammed Hamdan Dagalo, que recibió entrenamiento del Grupo Wagner del ruso Yevgueni Prigozhin. (AP Foto/Hussein Malla, Archivo) - Créditos: @Hussein Malla

Unicef considera que Sudán es el 15º país en el mundo en el que la infancia está expuesta a más riesgos debido al impacto del cambio climático, y una de las necesidades vitales es la falta de agua en un país ubicado junto al Mar Rojo. Si bien el territorio está atravesado por el río Nilo, su geografía se divide entre zonas desérticas y áridas. “Estamos llevando 780 bidones de agua porque la población debe caminar normalmente decenas de kilómetros para aprovisionarse de agua y muchas veces carecen de recipientes”, dijo Piñeyro.

De todas maneras, el gesto humanitario del argentino no está exento de riesgos logísticos. Su avión viajará con el cargamento el martes a Jeddah, Arabia Saudita, y allí deberá esperar la autorización para cruzar el Mar Rojo y dejar la ayuda en Puerto Sudán, la principal ciudad costera de Sudán. Las autoridades sudanesas ya le advirtieron que deberá entregar todo a Cruz Roja en el aeropuerto y no tendrá permitido salir de la base aérea, e inmediatamente deberá regresar a Arabia Saudita.

La cruel guerra civil en Sudán estalló en abril del año pasado entre las Fuerzas Armadas de Sudán y las Fuerzas de Apoyo Rápido, una milicia rebelde que en su momento tuvo entrenamiento del Grupo Wagner del ruso Yevgueni Prigozhin. El conflicto lleva ya varias décadas de luchas por tensiones raciales y étnicas, y disputas por la tierra y el agua.

“Nuestra preocupación son los millones de personas afectadas por el conflicto. A ellos les queremos hacer llegar nuestra ayuda”, afirmó el argentino.