El primer ministro británico Keir Starmer asegura que no tiene previsto hablar con Putin
El primer ministro británico, Keir Starmer, afirmó el domingo que no tiene previsto hablar con el presidente ruso, Vladímir Putin, al tiempo que reafirmaba su apoyo a Ucrania en la cumbre del G20 de esta semana.
Starmer dijo que no hablaría con Putin, como hizo el viernes el canciller alemán, Olaf Scholz, en la primera conversación anunciada públicamente entre Putin y un jefe importante de una potencia occidental en casi dos años.
La llamada, que provocó una fuerte reacción del presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, se habría iniciado desde Alemania, según Putin. Zelenski criticó la toma de contacto por parte de Berlín, alegando que sólo conseguirá que Rusia se sienta menos aislada.
En declaraciones a la prensa antes de la cumbre del G20 en Brasil, Starmer reafirmó su compromiso con Ucrania: "El martes se cumplen 1.000 días de este conflicto. Son 1.000 días de agresión rusa, 1.000 días de enorme impacto y sacrificio en relación con el pueblo ucraniano y recientemente hemos visto la incorporación de tropas norcoreanas que trabajan con los rusos, lo que tiene graves implicaciones", dijo Starmer.
La incertidumbre se cierne sobre Europa tras la elección de Trump
Los comentarios del dirigente británico se producen tras la elección de Donald Trump, que ha cuestionado en repetidas ocasiones la ayuda estadounidense a Kiev y ha sugerido que Washington, el mayor respaldo financiero de Ucrania, podría retirar su apoyo al país devastado por la guerra.
Starmer añadió que él y sus aliados deberían redoblar el apoyo a Ucrania durante el tiempo que sea necesario. El domingo, el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, dio luz verde a que Ucrania utilizara misiles de largo alcance para atacar dentro de la región rusa de Kursk, en un importante cambio de política para Washington.
Putin había advertido previamente a los países occidentales contra tal medida, diciendo que podría representar un conflicto militar directo entre Rusia y la OTAN.