Militares imputados por secuestro, asignados en zonas de Tlaxcala

TLAXCALA, Tlax., diciembre 19 (EL UNIVERSAL).- Los cuatro militares que detuvo la Procuraduría de Tlaxcala, el pasado tres de diciembre, por el secuestro de una familia en el municipio de Tlaxco, estaban asignados a la 23 Zona Militar de Panotla, en esta entidad, y al Quinto Batallón del Servicio Especial de la Policía Militar, en Puebla.

No estaban de paso por Tlaxcala por razones de adiestramiento, como lo aseguró en su momento la gobernadora Lorena Cuéllar Cisneros.

Así lo revela información a la que tuvo acceso EL UNIVERSAL, que demuestra que tres de ellos prestaban servicios en la 23 Zona Militar, con sede en Panotla, Tlaxcala; y el cuarto estaba asignado en el Quinto Batallón del Servicio Especial de la Policía Militar, considerado el complejo militar más importante del país, ubicado en Oriental, Puebla.

Se trata de sargento segundo, José Evaristo "N", quien al momento de su detención gozaba de franquicia tradicional, después de desmontar actividades en el área de fuerza de reacción; asimismo, el soldado cabo, Israel "N", quien también estaba en franquicia tras desmontar sus servicios como guardia de prevención.

En tanto, el cabo Orlando N., se encontraba en uso de "franquicia extraordinaria" tras acudir al curso Humvee, en el 44 Batallón de Infantería de Ixtlahuacan, Veracruz. Estos tres elementos de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) laboraban en la 23 Zona Militar de Tlaxcala.

El pasado ocho de diciembre, la gobernadora Lorena Cuéllar, aseguró en entrevista que ninguno de los cuatro militares formaba parte de las filas de la 23 Zona Militar de Tlaxcala, sino que habían llegado a la entidad para tomar un adiestramiento por instrucción de la Sedena.

"No eran personas que estaban a cargo de la zona militar, de la 23 zona militar, vienen a hacer como tipo prácticas. Y como lo comenté, sea quien sea, quien haya cometido un delito tiene que caer, caiga quien caiga", afirmó.

La información que posee EL UNIVERSAL revela lo contrario; tres operaban en el campo militar de Tlaxcala, mientras que el cabo Pedro "N", pertenecía al Quinto Batallón del Servicio Especial de la Policía Militar, conocido como La Célula, en Puebla.

Al momento de su detención, Pedro "N", gozaba de una "franquicia extraordinaria" por asistir al curso Humvee, en el 44 Batallón de Infantería de Ixtlahuacan, Veracruz. Una franquicia extraordinaria en la milicia significa un beneficio de descanso extra que concede la Sedena a todos sus elementos después de asistir a cursos especiales y prolongados de adiestramiento.

Los cuatro militares en activo secuestraron a una mujer y a sus dos hijos menores de edad, así como al tío de los niños, según lo informó en su momento la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE).

Cuando fueron capturados en "flagrancia delictiva", pretendían cobrar el rescate por la liberación de uno de los niños secuestrados, y circulaban a bordo de una camioneta Tiguan, de Volkswagen, propiedad de las víctimas; y un vehículo Aveo, de la marca Chevrolet, propiedad de los plagiarios.

El pasado 12 de diciembre, el juez de control vinculó a proceso a los cuatros militares al encontrar elementos suficientes para probar que cometieron el delito de secuestro, y también ordenó prisión preventiva para continuar el proceso legal por la actividad delictiva que se les imputa.