Miles de personas denuncian en Georgia unos resultados electorales "amañados"
Miles de georgianos se concentraron el lunes por la noche frente al Parlamento para protestar contra lo que, según la presidenta, fueron unas elecciones parlamentarias "amañadas" con la ayuda de Rusia.
La presidenta de Georgia, Salomé Zourabichvili, un cargo principalmente protocolario, dijo a la multitud, que ondeaban banderas georgianas y de la Unión Europea, que defendería el camino del país hacia Europa frente a las acciones del gobernante Sueño Georgiano.
"No tenemos alternativa, y nada más queremos dejar este país para las próximas generaciones", dijo. No dio detalles concretos sobre la implicación de Rusia en el robo de votos.
El mitin puso de relieve las tensiones en Georgia, situada entre Rusia y Turquía y donde el partido del Gobierno, Sueño Georgiano se ha vuelto cada vez más autoritario e inclinado hacia Moscú. La manifestación terminó pacíficamente tras varias horas y no hay hasta el momento nuevas convocatorias.
Los partidos de la oposición rechazan al Gobierno
Giorgi Vashadze, líder de la coalición Movimiento Nacional Unido, declaró que la oposición no participará en ninguna negociación con el Gobierno e impulsará unas nuevas elecciones bajo supervisión internacional.
Estados Unidos y la Unión Europea han instado a que se investigue a fondo el resultado de las elecciones del sábado.
Funcionarios estadounidenses también han pedido a Georgia que derogue la legislación autoritaria, subsane las deficiencias electorales y acerque a Georgia a Europa.
El portavoz del Departamento de Estado, Matthew Miller, afirmó que las elecciones georgianas estuvieron "condicionadas por las políticas del partido gobernante, incluido el uso indebido de recursos públicos, la compra de votos y la intimidación de los votantes".
"Necesitamos contar con el firme apoyo de nuestros socios europeos, de nuestros socios estadounidenses", declaró Zourabichvili, añadiendo que a "una Europa poderosa" le interesa estar presente en el Cáucaso y que la región sea estable.
Según la Comisión Electoral Central, Sueño Georgiano obtuvo la mayoría absoluta, el 54,8% de los votos con casi todas las papeletas escrutadas.
El partido -creado por el exprimer ministro Bidzina Ivanishvili, un oscuro multimillonario que hizo su fortuna en Rusia- ha adoptado leyes similares a las utilizadas por el Kremlin para reprimir la libertad de expresión y los derechos del colectivo LGBTQ+.
Rusia niega haber interferido en las elecciones
El Kremlin ha rechazado las acusaciones de injerencia, y su portavoz, Dmitry Peskov, ha afirmado en cambio que fue Occidente quien intentó influir en la votación. Preguntado por el llamamiento de Zourabichvili a los georgianos para que se unieran a las protestas, Peskov lo describió como un intento de desestabilizar el país.
La portavoz del Parlamento, Shalva Papuashvili, miembro del partido del Gobierno Sueño Georgiano, también acusó a la presidenta de crear "un escenario golpista" que va "contra el orden constitucional y las elecciones democráticas".
Unas elecciones marcadas por la división
La UE suspendió indefinidamente el proceso de solicitud de adhesión de Georgia debido a una "ley de influencia extranjera" de estilo ruso aprobada en junio. Muchos georgianos consideraron la votación del sábado como un referéndum crucial sobre la oportunidad de ingresar en la UE.
La campaña electoral en esta nación de 3,7 millones de habitantes, fronteriza con Rusia, estuvo marcada por una encarnizada lucha por los votos y acusaciones de campaña de desprestigio. Los observadores europeos afirmaron que las elecciones se desarrollaron en un ambiente "divisivo" marcado por la intimidación y los casos de compra de votos, doble voto y violencia física.
Durante la campaña, Sueño Georgiano utilizó "una retórica antioccidental y hostil, promovió la desinformación rusa, las manipulaciones y las teorías conspirativas", explicó el eurodiputado español del Partido Popular Antonio López-Istúriz, jefe de la delegación de observación del Parlamento Europeo. Los observadores electorales señalaron que los casos de intimidación y otras violaciones fueron especialmente notables en las zonas rurales.
Sueño Georgiano obtuvo su mayor porcentaje de votos -casi el 90%- en la región de Javakheti, en el sur de Georgia. En la capital no obtuvo más del 44% en ningún distrito.
Visita sorpresa de Orbán a Georgia
El primer ministro húngaro Victor Orbán, que fue el primer dirigente extranjero en felicitar a Sueño Georgiano, llegó este lunes en una visita de dos días a Georgia.
Orbán es el socio más estrecho del presidente ruso Vladímir Putin dentro de la UE y el dirigente europeo más longevo. Actualmente ocupa la presidencia rotatoria de la UE, que a menudo es el megáfono global del bloque y que Orbán ha utilizado de forma que quedan de manifiesto las divisiones internas.
Su visita a Georgia será considerada polémica por la UE, que ha pedido a las autoridades georgianas "que cumplan con su deber de investigar de forma rápida, transparente e independiente" el presunto fraude electoral. La presidenta georgiana Zourabichvili ha dicho que Orbán es un "amigo especial" del Sueño Georgiano y ha tachado su visita de "jugada política".