Miles de europeos dan la bienvenida a la Navidad asistiendo a misas celebradas en todo el continente

El Papa Francisco dio por inaugurado el Año Santo 2025 este martes. Se trata de una celebración de la Iglesia católica en el Vaticano. Desde su silla de ruedas, el pontífice golpeó varias veces la Puerta Santa de la Basílica de San Pedro antes de que se abriera.

La ceremonia en el Vaticano inauguró la tradición conocida como Jubileo, que se celebra una vez cada cuarto de siglo. El Jubileo pretende ser un periodo de reflexión, reconciliación y renovación. Suele estar marcado por una gran variedad de actos culturales y religiosos, como misas y conciertos, y su objetivo es inspirar a los fieles católicos a peregrinar, arrepentirse y perdonar los pecados de los demás. El Jefe de la Iglesia Católica dedicó este jubileo al tema de la esperanza.

"Hermanas y hermanos, éste es el Jubileo. Es el tiempo de la esperanza, en el que se nos invita a redescubrir la alegría del encuentro con el Señor. El Jubileo nos llama a la renovación espiritual y nos compromete a la transformación de nuestro mundo, para que este año se convierta realmente en un tiempo de júbilo", dijo el Papa Francisco al dirigirse a los asistentes a la misa en la Basílica de San Pedro.

El Pontífice pidió a los fieles que devuelvan la esperanza al mundo. Destacando la importancia de hacerlo, dijo: "Estamos llamados a llevar esperanza a los cansados que no tienen fuerzas para seguir adelante, a los solitarios oprimidos por la amargura del fracaso y a todos los que tienen el corazón roto."

"Llevad esperanza allí, sembrad esperanza allí. El Jubileo ha comenzado ahora para que todos reciban la esperanza". Francisco subrayará este mensaje de esperanza cuando abra el jueves una Puerta Santa en la prisión romana de Rebibbia. La iniciativa pretende infundir esperanza de un futuro mejor en los corazones de los reclusos del centro penitenciario.

La catedral de Notre Dame de París celebra su primera misa de Nochebuena desde el incendio de 2019

Cinco años después de que un devastador incendio casi destruyera la querida catedral del siglo XII de la ciudad, Notre Dame vuelve a acoger misas de Nochebuena. La estructura gótica, que tardó dos siglos en construirse, estuvo cerrada al culto durante cinco años, sometida a intensos trabajos de restauración. El 7 de diciembre reabrió sus puertas a visitantes y fieles.

En Nochebuena se celebraron cuatro misas diferentes en la catedral. A las dos primeras asistieron miles de personas, muchas de ellas fieles y otras para admirar la riqueza de la restauración.

La misa principal tuvo lugar a medianoche y estuvo presidida por el arzobispo de París, Laurent Ulrich, que también dirigió la ceremonia de reapertura hace unas semanas junto al presidente francés, Emmanuel Macron.

"El año pasado os hablé vestido de obra, en nuestra catedral aún en construcción. Y ahora, estamos de vuelta en Notre Dame, que acaba de abrirse al culto y a los visitantes. Nuestros corazones están de fiesta. Hemos vuelto a casa", dijo Ulrich en un mensaje antes de la ceremonia de medianoche.

Notre Dame no es sólo un lugar emblemático para los parisinos, sino para todo el mundo. Turistas de todo el mundo han reservado su viaje para poder asistir a la misa de la catedral.

"Absolutamente asombrado, es increíble. Es absolutamente hermoso. Es una experiencia única en la vida participar en esto esta noche. Ha sido toda una experiencia. Muy conmovedor", dijo Lori Fleet, una turista estadounidense que visitaba a su familia en la capital francesa.

Tras el incendio de 2019, casi 1.000 millones de dólares (961,2 millones de euros) llegaron de todo el mundo para apoyar su restauración, un tributo al atractivo y aprecio mundial de este Patrimonio de la Humanidad acreditado por la UNESCO.

Grecia da la bienvenida a la Navidad

Miles de atenienses se congregaron ante el Ayuntamiento de Atenas en la capital en Nochebuena para pedir un deseo y soltar farolillos de papel en el cielo nocturno.

La cita anual tiene lugar en la céntrica y popular plaza de Kotzia, y este año estuvo presidida por Haris Doukas, alcalde de Atenas. "Es una noche de deseos. Reunimos a miles de personas y miles de deseos. Las linternas recorren ahora el cielo de Atenas. Estamos muy contentos. Atenas lo celebra, se convierte en un acontecimiento enorme y muy hermoso", dijo Doukas.