Miguel Gomes, mejor director en Cannes, nos da las claves de su última película 'Grand Tour'

Miguel Gomes, mejor director en Cannes, nos da las claves de su última película 'Grand Tour'

Es el mayor galardón que ha recibido nunca una película portuguesa en Cannes: si la inclusión de 'Grand Tour', de Miguel Gomes, en la selección oficial de la Palma de Oro ya era un gran logro, el premio al mejor director es la guinda del pastel y la coronación de la carrera de este realizador de 52 años, un habitual de los principales festivales durante la última década y media con películas como 'Tabú' (2012) y la trilogía de 'Las mil y una noches' (2015).

"Ganar es un premio aún mayor"

"Se sienten muchas cosas al mismo tiempo", dice el director a 'Euronews'. "Es raro que una película portuguesa esté nominada, ganar es un premio aún mayor".

Miguel Gomes creció viendo cine portugués y se identifica plenamente con él: "El cine portugués tiene su historia, desde los años 60, y eso le da una identidad que a veces se discute en el interior, porque se dice que el cine portugués es difícil".

"Desde pequeño, me acostumbré a ver cine portugués y a pensar 'es posible hacer esto en Portugal'. Eso fue muy impactante y decisivo para mí. Tal vez esté diciendo algo herético, pero siento un mayor sentimiento de pertenencia al cine portugués que al propio país".

'Grand Tour' es el resultado de un largo viaje

'Grand Tour', que el cineasta considera "una clásica película de aventuras", es el resultado de dos procesos distintos pero complementarios: por un lado, el rodaje que Gomes, junto a un equipo muy reducido, realizó durante un largo viaje por Asia en los primeros meses de 2020, antes de que la pandemia les obligara a posponer sus planes (la parte en China se filmó en 2022, una vez levantadas las restricciones).

Tengo un mayor sentimiento de pertenencia al cine portugués que al propio país

El viaje comenzó "sin que hubiera siquiera un guión para la película", dice. En cambio, el rodaje tuvo lugar en 2023 con los actores en el estudio, donde ya estaba todo previsto y trabajaba un equipo de más de 100 personas: "El estudio es el espacio cinematográfico por excelencia", afirma.

De la combinación de estos dos conceptos nace la película: "Hay dos posibilidades en el cine", afirma. "Registrar el mundo tal y como lo conocemos, poner una cámara en un lugar determinado y grabar lo que tenemos delante o, por otro lado, inventar el mundo: inventar una puesta de sol o un amanecer en un espacio sin ventanas, en un estudio".

La historia transcurre en Asia en 1918, "pero esta película es mucho más que la historia, porque fue un gran reto filmarla", explica Gomes.

Todo comienza con un hombre, funcionario británico en Birmania, que espera a su prometida en el muelle. Presa del pánico, decide huir a Singapur, donde recibe un telegrama de su prometida diciéndole que está al llegar.

Huye de nuevo y atraviesa varios países, siempre con ella tras su pista. La segunda parte de la película cuenta la historia desde el punto de vista de la mujer. El resultado es una película en la que destaca el contraste (deliberado) entre la película de época y las imágenes del Asia actual.

Próximo proyecto: rodar 'The Hinterlands'

'Grand Tour' no se estrenará en los principales mercados hasta después del verano. Por el momento, el éxito de crítica y el premio obtenido en Cannes podrían servir a Gomes para financiar su anhelado proyecto de llevar a la gran pantalla 'Los sertones', de Euclides da Cunha, un libro muy difícil de trasladar al cine, ya que es a la vez una crónica de guerra y un tratado de botánica.

Publicado por primera vez en 1902, el libro está ambientado en el estado de Bahía (Brasil) a finales del siglo XIX y retrata el conflicto entre el Ejército brasileño y los seguidores del profeta António Conselheiro, que se oponían a la instauración de la República.

Se trata de un proyecto en el que Miguel Gomes lleva trabajando desde antes de embarcarse en 'Grand Tour' y que se ha visto aplazado por varias vicisitudes: En primer lugar, por la llegada de Jair Bolsonaro al poder, ya que su Gobierno ha paralizado casi por completo la financiación del cine. En segundo lugar, por la pandemia de Covid. Superados ambos problemas y reanudadas las conversaciones de financiación, la película parece por fin en vías de realizarse.