El ‘Mayo’ Zambada “no vino a EE.UU. voluntariamente”, dice su abogado

(English below)

Ismael ‘el Mayo’ Zambada, el confundador del poderoso Cártel de Sinaloa que está detenido en El Paso, Texas bajo cargos de narcotráfico, llegó a territorio estadounidense en contra de su voluntad, aseguró a EFE este viernes uno de sus abogados.

“Él no vino a EE.UU. voluntariamente; eso no es en absoluto verdadero”, dijo Frank Pérez, quien ejerce la defensa del mexicano en Texas, donde Zambada compareció en la mañana del viernes para una audiencia inicial.

‘El Mayo’, de 76 años de edad y prófugo de la Justicia por décadas, fue capturado por las autoridades estadounidenses al descender de una avioneta en un aeropuerto regional a las afueras de la ciudad fronteriza de El Paso.

Con él viajaba Joaquín Guzmán López, uno de los hijos de su antiguo socio en el Cártel de Sinaloa, Joaquín ‘El Chapo’ Guzmán, quien ahora cumple una condena de cadena perpetua en Nueva York.

Guzmán López, alias, el ‘Güero Moreno’, fue capturado también en la noche del jueves y tiene programada ya una audiencia en Chicago (Illonois)- a más de 2.400 kilómetros de El Paso- para la próxima semana.

Las circunstancias del arresto de uno de los hombres más poderosos del narco mexicano, que había logrado evadir las autoridadespor décadas, están permeadas de incógnitos.

Según filtraciones a algunos medios estadounidenses, Guzmán López trajo a ‘El Mayo’ engañado a EE.UU. para beneficiar a su hermano Ovidio Guzmán, extraditado en septiembre del año pasado.

Y es que, de acuerdo con el Buró Federal de Prisiones, Ovidio salió de la cárcel el pasado martes, aunque la Embajada de Estados Unidos en México aseguró que permanece “bajo custodia”.

El diario The New York Times aseguró además que el propio Zambada llevaba tres años negociando con autoridades estadounidenses su entrega, sin haber llegado todavía a un acuerdo, extremo que corroboran cinco fuentes distintas.

La audiencia inicial en El Paso, en la mañana del viernes, fue la primera vez que ‘El Mayo’, uno de los hombres más buscados por la DEA, se enfrentó cara a cara con la Justicia.

Sentado en una silla de ruedas, Zamabada escuchó a la jueza Anne T. Berton explicarle los siguientes pasos en su caso y los cargos de los que se le acusan, que incluyen narcotráfico y lavado de dinero, según una transcripción obtenida por EFE.

Tras la vista este mañana, la defensa de ‘el Mayo’ presentó un documento adelantando que se declarará no culpable de los más de 30 delitos que se le imputan y el miércoles 31 tendrá lugar la lectura oficial de cargos.

En Washington, desde la Casa Blanca, el presidente Joe Biden se adjudicó ya la captura de Zambada como un logro de su Gobierno contra una de las “organizaciones más mortales del mundo”.

Y por su parte, desde México aseguraron que ni estaban enterados del operativo ni colaboraron con la captura.

El presidente, Andrés Manuel López Obrador, solicitó públicamente información a sus homólogos estadounidenses durante una rueda de prensa matutina.

“El Gobierno de Estados Unidos tiene que dar un informe completo, no es nada más así de declaraciones generales, hay que informar, tiene que haber transparencia”, declaró el mandatario en su conferencia matutina.

La secretaria de Seguridad, Rosa Icela Rodríguez, reveló que además que su Gobierno “no participó” en el operativo y que la Embajada de Estados Unidos se comunicó el jueves cuando ya había ocurrido el arresto de ambos líderes.

‘Mayo’ Zambada “did not come to the U.S. voluntarily,” says his lawyer

Ismael ‘El Mayo’ Zambada, co-founder of the powerful Sinaloa Cartel who is being held in El Paso, Texas on drug trafficking charges, arrived in the United States against his will, one of his lawyers assured EFE on Friday.

“He did not come to the United States voluntarily; that is not true at all,” said Frank Pérez, who is defending the Mexican in Texas, where Zambada appeared on Friday morning for an initial hearing.

‘El Mayo’, 76 years old and a fugitive from justice for decades, was captured by U.S. authorities when he got off a plane at a regional airport on the outskirts of El Paso.

With him was Joaquín Guzmán López, one of the sons of his former partner in the Sinaloa Cartel, Joaquín ‘El Chapo’ Guzmán, who is now serving a life sentence in New York.

Guzmán López, alias “El Güero Moreno,” was also captured on Thursday night and has a hearing scheduled in Chicago, Illinois – more than 2,400 kilometers from El Paso – next week.

The circumstances of the arrest of one of the most powerful men in the Mexican drug trade, who had managed to evade authorities for decades, are permeated with unknowns.

According to leaks to some American media, Guzmán López brought “El Mayo” to the United States under false pretenses to benefit his brother Ovidio Guzmán, who was extradited in September of last year.

And according to the Federal Bureau of Prisons, Ovidio left prison last Tuesday, although the United States Embassy in Mexico assured that he remains “in custody.”

The New York Times also assured that Zambada himself had been negotiating with American authorities for three years to be handed over, without having yet reached an agreement, a fact corroborated by five different sources.

The initial hearing in El Paso on Friday morning was the first time that ‘El Mayo’, one of the DEA’s most wanted men, faced Justice face to face.

Sitting in a wheelchair, Zambada listened to Judge Anne T. Berton explain the next steps in his case and the charges he is accused of, which include drug trafficking and money laundering, according to a transcript obtained by EFE.

After the hearing this morning, ‘El Mayo’s’ defense presented a document announcing that he will plead not guilty to the more than 30 crimes he is accused of and that the official reading of charges will take place on July 31.

In Washington, from the White House, President Joe Biden has already claimed the capture of Zambada as an achievement of his administration against one of the “most deadly organizations in the world.”

And for their part, from México they assured that they were neither aware of the operation nor did they collaborate with the capture.

President Andrés Manuel López Obrador publicly requested information from his American counterparts during a morning press conference.

“The United States Government has to give a complete report, it is not just general statements, there must be information, there must be transparency,” declared the president in his morning press conference.

Secretary of Security Rosa Icela Rodríguez also revealed that her Government “did not participate” in the operation and that the United States Embassy contacted her on Thursday when the arrest of both leaders had already occurred.