Marko, el influencer humorístico venezolano hará historia en el estadio Kaseya Center

Cuando su trabajo parece que no pudiera llegar más alto, que no podría ser más exitoso, con un número millonario y ascendente de seguidores que lo veneran en todas las plataformas, el influencer venezolano Marko sigue creciendo. Ahora anuncia que se presentará en una catedral del mundo del espectáculo latino: el estadio Kaseya Center, de Miami, el 1 de diciembre. Allí hará su nuevo espectáculo de stand up comedy: “El poder de un chisme”.

En una conversación serena con el Nuevo Herald, en la oficina de su publicista, en Doral, el artista venezolano manifiesta un justificado orgullo. “Me motiva ser el primer comediante latino en dar el paso de enfrentarse a la Arena de Miami (el Kaseya), me gusta el hecho de ser arma de inspiración para que los latinos entendamos hasta dónde está llegando nuestro mercado”, afirma, y como prueba de que no exagera lo de su influencia enseguida cuenta, sin dar nombres, que a raíz de su presentación “ahora hay otros comediantes hispanos que están pidiendo cotización al Kaseya para hacer un show allí también”.

Hay que apuntar que el humorista también tendrá una gran cita el 27 de enero en el “Choliseo” José Miguel Agrelot, de Puerto Rico. El equipo de trabajo de Marko asegura que, por lo pronto, la venta de boletos para el evento del Kaseya (ex American Airlines Arena) está casi agotada. “Miami es una de las plazas más difíciles para vender tickets de espectáculos, en general, pero es indudable que hay un humor latino que vive un buen momento, lo cual no solo se ve en Estados Unidos sino en el mundo, al que hemos podido llegar gracias a las redes sociales”, analiza, y con nobleza en el plural menciona a un colega y compatriota que también está en las nubes gracias al humor: George Harris.

No cabe duda de que Marko, cuyo origen es la actuación en teatro y televisión, le debe todo a las redes porque son las que lo han impulsado. Siendo un veinteañero, la década pasada llegaba a Miami con la humildad de recursos de la mayoría de los flamantes inmigrantes e hizo labores como repartir comida rápida o pintar casas. Los videos breves de comedia lo catapultaron. Primero fue en Instagram, luego Youtube y ahora vive una primavera en Tik Tok. Entre las tres plataformas cuenta con aproximadamente 28 millones de seguidores.

Sobre la función del 1 de diciembre adelanta que tendrá dos horas de duración. “Lo novedoso para un stand up tradicional es que utilizaré dos escenarios; en una estaré yo sin caracterizarme y en la otra apareceré disfrazado de mi personaje principal, ‘La bendecida’”, adelanta. “La bendecida” es una chica un poco alocada que arranca carcajadas en los videos de Marko. El influencer admite que en su entorno profesional predominan los varones, pero niega que sea machista.

“Para mí es imposible girar en el machismo porque soy apasionado por la mujer… me crié solo con mi mamá y escuchaba las conversaciones con sus amigas, por lo cual toda mi comedia, mi manera de expresarme es pro mujer al ciento por ciento; es lo que vi y escuché desde pequeño, sé lo que las mujeres hablan sobre los hombres”, enfatiza. En su círculo familiar Marko sigue rodeado de mujeres, por su mamá, Cinthia; su esposa, la también influencer Yulbert Zambrano; y sus dos hijas, Amor y Roma.

El actor resalta que en los shows de “El poder de un chisme” también se contará con la presencia de cantantes famosos. En el Kaseya habrá tres, que interpretarán un tema cada uno, en distintos momentos de la velada. Uno de los tres números, aclara, es un dúo. Pero no suelta más prenda al respecto. “Por razones contractuales no podemos revelar sus nombres hasta un día antes de la función”, explica.

El corazón del espectáculo, no obstante, será su monólogo sobre el chisme, o sea, sobre las habladurías, las murmuraciones. “Yo muestro las propiedades positivas del chisme, y me van a ver debatiendo por qué la gente debe tener el chisme en sus vidas, y cómo el chisme, anímicamente, te da motivos para vivir”, teorizó recientemente de manera jocosa.

También realza el poder del humor. “Debería ser obligatorio; debería haber una ley para que la gente sonría al menos dos veces por día porque el humor nos cambia, nos hace destensar”, dice. “El alma se va embasurando con las noticias negativas”, agrega.

“Yo siempre estoy aquí para robarle una sonrisa a la gente; es una bendición que Dios me dio y mientras tenga salud lo voy a hacer”, asevera.

A este verdadero rey del humor, para la despedida le pedimos un consejo para quienes actualmente atraviesan un mal momento, en cualquier ámbito. “No se puede evitar el dolor sino que debemos enfrentarlo porque el mundo sigue andando y no podemos detenernos; se camina, se secan las lágrimas y se sigue”, manifiesta.

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