Cómo una mamá poliamorosa tuvo una gran aventura sexual y descubrió su identidad

Molly Roden Winter en Brooklyn en diciembre de 2023. (Michael Tyrone Delaney/The New York Times)
Molly Roden Winter en Brooklyn en diciembre de 2023. (Michael Tyrone Delaney/The New York Times)

Para cualquier persona propensa a sentir pena ajena, hay un pasaje en el debut literario de Molly Roden Winter, “More: A Memoir of Open Marriage”, que debería incluir una advertencia.

Winter se encuentra en su casa en la ciudad de Nueva York. Acaba de tener relaciones sexuales con su novio mientras sus dos hijos duermen en el piso de arriba. Su esposo, Stewart, accedió a su encuentro, pero, como Winter se siente culpable, se dirige desnuda a la cocina para enviarle un mensaje de texto: No te preocupes, escribe, “no se compara contigo como amante”; pero en lugar de enviárselo a su esposo, por error se lo envía a su novio, quien sale a toda prisa y más tarde termina con ella. Winter, devastada, le ruega a su esposo que regrese a casa y la consuele.

“Me siguen dando náuseas cuando pienso en eso”, afirmó Winter de 51 años, quien bebía un té en la sala de su iluminada y amplia casa en Park Slope, Brooklyn. “Imagínate lo peor, la cosa más horrible que podría suceder”.

Está lejos de ser la única escena tormentosa e increíblemente sincera en “More”, que documenta la habitual turbulenta experiencia de matrimonio abierto de Winter: el resentimiento y los celos que sentía hacia las novias de su esposo, los destellos de culpa y vergüenza, y el reto de hacer malabares con sus obligaciones de esposa y madre en su búsqueda de la realización sexual y romántica.

Winter está plenamente consciente de que las personas podrían juzgarla por la conducta que describe en “More”, pero también dijo que se sentía obligada a escribir sobre su experiencia, en parte porque sentía que, con frecuencia, se pinta la no monogamia como algo que ocurre en la periferia, no como un estilo de vida que buscan las madres casadas.

“Sentí que no había historias al respecto en la cultura popular y me sentí un tanto censurada”, narró Winter. “A menudo tengo la impresión de que se espera que las madres no sean seres sexuales”.

Molly Roden Winter en Brooklyn en diciembre de 2023. (Michael Tyrone Delaney/The New York Times)
Molly Roden Winter en Brooklyn en diciembre de 2023. (Michael Tyrone Delaney/The New York Times)

“More”, que publicó Doubleday el 16 de enero, llega en un momento en el que el poliamor empieza a salir de los márgenes y a introducirse en la cultura dominante. Cerca de una tercera parte de los estadounidenses entrevistados en una encuesta de YouGov en febrero de 2023 afirmó que prefería tener un tipo de relación no monógama.

Junto con las novelas literarias, los programas de televisión y las películas que retratan parejas de tres, polículos y otras modificaciones de relaciones abiertas, hay un conjunto de obras literarias de no ficción que explora la ética y los obstáculos logísticos del poliamor. Entre los títulos recientes se encuentran libros autobiográficos como el de la periodista Rachel Krantz de 2022: “Open: An Uncensored Memoir of Love, Liberation, and Non-Monogamy”, “The Polyamory Paradox” y “Polyamory Devotional”, que tiene 365 reflexiones diarias sobre el poliamor.

Jessica Fern, psicoterapeuta que asesora a parejas en relaciones abiertas, aseveró que la historia de Winter suma un aspecto más al creciente catálogo de literatura de no ficción acerca del poliamor.

“Su historia, que trata sobre lo que significa para una madre tener una carga erótica, es una historia que aún no veo”, señaló Fern, autora de “Polysecure” y “Polywise”.

Fern se dio cuenta de que es probable que haya muy pocos libros acerca de mamás con matrimonios abiertos porque sencillamente están demasiado ocupadas: “Cuando eres padre y eres poliamoroso ¿quién tiene tiempo de escribir?”.

Winter acepta que el poliamor llega a ser extenuante… sobre todo cuando tienes que equilibrarlo con el matrimonio, el cuidado de los hijos y el trabajo de ser profesora de literatura en secundaria.

“No dormía gran cosa”, comentó.

Tener un matrimonio abierto no se trataba solo de hacer lo que quisieras (con quien quisieras), dijo Winter. Tuvo que deshacerse del sexismo internalizado y su tendencia a anteponer las necesidades de los demás sobre las propias, ideas que tuvo que trabajar en terapia. Lo que comenzó como una búsqueda de chispa sexual, terminó siendo un descubrimiento inesperado de su propia identidad.

“Pensaba que la no monogamia iba a girar en torno al sexo”, afirmó. “Pensaba que iba a vivir una gran aventura sexual y que iba a ser muy emocionante. Y lo fue, hasta que dejó de serlo”.

Para que quede claro: “More” también trata del sexo. Winter relata sus experimentos con tapones en el ano, el “fisting” y el sexo anal, y cataloga meticulosamente sus relaciones extramatrimoniales (que van desde breves encuentros en sórdidas habitaciones de hotel hasta relaciones románticas que duran años). Cambió su nombre y el de su esposo, así como el de las parejas de ambos, para proteger su privacidad, pero a menudo deja poco más a la imaginación.

Winter creció en Evanston, Illinois, y tenía poco más de 20 años cuando conoció a Stewart Winter, el hombre con el que se casó. Él la hacía reír y le apasionaba su trabajo componiendo música para programas de televisión y películas.

En 2008, llevaban casi una década casados y tenían dos hijos pequeños cuando Molly Winter conoció a otra persona. Frustrada tras un día agotador cuidando de sus hijos mientras él trabajaba hasta tarde, una noche salió a pasear. Una amiga la invitó a salir a beber y en el bar entabló una coqueta conversación con un hombre.

Cuando se lo contó a su esposo, para su sorpresa, él no se molestó. Al contrario, la instó a acostarse con su nuevo conocido y a contarle los detalles.

Cuando Winter empezó a salir, su esposo no tardó en empezar a ver a otras mujeres. Aunque ella estaba de acuerdo en que era lo justo, los celos la consumían y de vez en cuando pedía volver a cerrar su matrimonio.

Stewart Winter confirmó que el matrimonio abierto le resultó más fácil a él al principio.

“Es probable que Molly fuera más exigente que yo en ese momento”, dijo, comparando su experiencia de salir con mujeres con estar “en un bufet de ensaladas”.

En los primeros años, muchas de las hazañas sexuales de ella resultaron insatisfactorias. En aquella época, la mayoría de los sitios de citas en internet no estaban dirigidos a personas poliamorosas, así que a veces recurría a salir con hombres que engañaban a sus esposas y novias. “No fue mi mejor momento”, aseveró Winter.

Con el tiempo, Molly Winter renunció a los hombres infieles y empezó a salir con personas que también mantenían relaciones abiertas, un grupo demográfico más fácil de encontrar cuando los servicios de citas en internet añadieron la no monogamia a sus menús. Incluso entonces, las opciones eran limitadas.

“Había tan poca gente que me seguía saliendo Stewart como sugerencia de pareja”, dijo.

Pasaron varios años antes de que Winter se sintiera cómoda revelando los detalles de su matrimonio abierto a un círculo más amplio de amigos y familiares.

Cuando le contó a su madre sus aventuras en la no monogamia, se enteró de que sus padres, casados desde hace casi 60 años, también tenían un matrimonio abierto.

Por su parte, Stewart Winter está entusiasmado con el libro autobiográfico, pero le preocupa que la gente piense que manipuló a su esposa para que abrieran su matrimonio.

“A decir verdad, todas mis dudas se deben a que soy egoísta y me pregunto cómo me hará quedar esto”, afirmó.

“More” termina en 2018, cuando el novio de Molly Winter, cuya esposa se había divorciado recientemente de él, terminó con la relación después de que ella rechazó su ultimátum para poner fin a su propio matrimonio. A Winter se le rompió el corazón, pero lo superó y desde entonces ha tenido otros romances serios.

Cada vez está más segura de que su matrimonio de 24 años se ha beneficiado de sus relaciones externas. Está pensando en publicar otro libro sobre su matrimonio abierto, que explorará en parte las sorprendentes conexiones que ha establecido con las “otras mujeres” de su vida, incluidas las novias de Stewart y las esposas de los hombres con los que sale.

Por el momento, Winter se prepara para el impacto que inevitablemente tendrá el libro en ella y en quienes la rodean, pero parece impertérrita.

“He pasado mucho tiempo tranquilizando a los demás”, afirmó. “Esto no me parece algo que deba temer”.

c.2024 The New York Times Company