Maduro extiende campaña de intimidación con nuevo arresto de activista

El activista venezolano Carlos Julio Rojas, conocido por defender los derechos de los ciudadanos en el sector norte de Caracas, fue arrestado en la tarde del lunes por la policía de inteligencia del régimen venezolano, acusado de participar en una conspiración para asesinar al gobernante Nicolás Maduro.

El arresto es el último eslabón en una cadena de detenciones ejecutadas en Venezuela contra activistas, militares, periodistas y dirigentes políticos de la oposición que lo opositores han denunciado como una campaña de intimidación que busca asustar a los electores de cara a las elecciones presidenciales previstas para el 28 de julio.

Rojas, dirigente comunitario que en el pasado ha denunciado los abusos de las agrupaciones paramilitares allegadas al régimen, es acusado de actuar como instigador y operador logístico en una conspiración organizada para matar a Maduro, anunció el fiscal chavista Tarek William Saab a través de su cuenta de X.

“El Ministerio Público @MinpublicoVEN #informa de la detención el día de #hoy de Carlos Julio Rojas, quien tenía orden de aprehensión por estar vinculado y señalado directamente como #instigador y #operador logístico en el intento de #magnicidio contra el Jefe de Estado Nicolas Maduro, acaecido en la plaza Diego Ibarra el pasado 25 de Marzo: día de su inscripción como candidato a la Presidencia de la República”, escribió Saab en la red social.

Agregó que los detalles del caso serán brindados en una rueda de prensa convocada para el mediodía del martes.

Decenas de activistas, opositores y militares han sido arrestados en las últimas semanas por agentes de los servicios de inteligencia pese a los compromisos de liberar a los presos políticos asumidos por el régimen venezolano en el acuerdo de transición democrática gestado por la administración Biden y firmado con la oposición en Barbados.

La campaña ha incrementado el miedo dentro de la sociedad venezolana en momentos en que Maduro se apresta a competir en unas elecciones en las que excluyó a la principal dirigente de la oposición, María Corina Machado.

Según organizaciones no gubernamentales, el régimen actualmente mantiene arrestados a más de 300 presos políticos.