Luis Arráez impone gran marca y Jorge Soler exhibe poder para unos Marlins que cortan el vuelo de los Azulejos

La fórmula se repite y funciona. Luis Arráez pega hit y Jorge Soler conecta un cuadrangular. Ver al cubano y al venezolano anotando en una misma secuencia resulta un ingrediante básico para estos Marlins que viven uno de sus mejores momentos de esta temporada y de los últimos tiempos de su existencia.

Esta escena volvió a verse en el loanDepot park el lunes por la noche cuando Soler pegó su jonrón número 21 de la contienda antes de que Arráez disparara el primero de sus cinco imparables para que los peces vencieran 11-0 a los Azulejos en el regreso a casa después de una larga y beneficiosa gira.

Todo parece funcionar a la perfección por estos días para Miami que se colocó a 11 juegos por encima de la marca de .500 y va demostrando que este período de bonanza pudiera ser más un reflejo de la realidad que un espejismo pasajero como tantos en el pasado.

“Diría que este es uno de los mejores juegos en lo que va de temporada para nosotros’‘, comentó el manager Skip Schumaker. “Buen pitcheo, aunque no teníamos un abridor regular, una ofensiva donde todos contribuyeron. Buena defensa. El cuerpo de coaches viene realizando un sólido trabajando, preparando a los peloteros para venir a ganar cada día’‘.

Quizá el simbolismo va más allá del palo del vuelta entera y los sencillos del hombre que todos dan en llamar la “regadera’‘, porque demuestra lo que puede suceder con un Soler saludable y el aporte de un recién llegado que vino a cambiar la dinámica ofensiva.

Arráez su convirtió en el primer jugador de la historia en la organización que suma tres desafíos con al menos cinco imparables para rebasar la marca anterior en poder de Juan Pierre, quien por cierto se encontraba de visita en el estadio como parte de los 12,276 aficionados presentes.

“Ni me entero de lo que estoy logrando, pero creo que es una recompensa de Dios por todo el trabajo duro que estoy haciendo’‘, explicó Arráez. “Fue un buen juego porque ganamos y eso es lo más importante. Vengo todos los días a ganar, los hits son un resultado de esa mentalidad’‘.

Como dato histórico, el segunda base es el cuarto pelotero desde 1900 que pega cinco hits en tres juegos durante el mismo mes, como lo hicieron Dave Winfield en junio del 1984, Ty Cobb en julio del 1922 y George Sisler en agosto del 1921

El venezolano lidera las Mayores con un promedio de bateo de .400 y un porcentaje de embasado de .441, además de ocupar el primer puesto con 102 hits en su búsqueda de convertirse en el primer jugador de las Grandes Ligas en batear .400 o más desde Ted Williams (.410) en 1941.

Soler impulsó tres de las cinco anotaciones para llegar a 45, y ahora el cubano es el tercero mejor en jonrones, sólo por detrás de Shohei Ohtani y Pete Alonso, además de ser el décimo jugador de los Marlins que batea 20 cuadrangulares o más antes de la pausa del Juego de las Estrellas.

La última vez que un jugador de los Marlins alcanzó la marca de 20 jonrones o más en la primera mitad fue en 2017, cuando Justin Bour (20), Marcell Ozuna (23) y Giancarlo Stanton (26) lograron la hazaña. De sus 20 jonrones, 10 han dado la ventaja en juegos a a los peces.

Tan bien van las cosas para Miami por estos días que el club no contó con uno de sus abridores habituales y le dio la pelota al relevista Bryan Hoeing, quien procedió a lanzar cuatro entradas limpias con apenas tres imparables antes de dar paso a sus colegas del bullpen.

Toronto, que encajó su tercera derrota al hilo y no puede ganar terreno en el Este de la Americana, no pudo hacer nada de nada ante los pitchers de Miami que sí recibían un apoyo rotundo de una ofensiva que sonó 19 imparables para imponer otra marca de temporada.