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Lourdes López: Una pasión por el ballet que ha roto barreras por más de medio siglo

Cada vez que se lucía en el escenario, los movimientos sublimes de esta bailarina de ballet expresaban tanta libertad que ninguno de sus espectadores podría imaginarse que sus pies habían estado atados a botas ortopédicas durante su niñez.

Tras una fértil y galardonada carrera en escena, Lourdes López ha impulsado la proyección de cientos de bailarines del Miami City Ballet como directora artística de la compañía, la primera mujer en ocupar este cargo.

La artista cubanoamericana se las ha ingeniado para continuar escalando por más de medio siglo. Sin embargo, su enfoque no está en sus logros, sino en ayudar al prójimo. Desde Miami, ciudad que la vio crecer, logró derribar divisiones políticas para salvar a una bailarina ucraniana durante el conflicto bélico que enfrenta el país europeo.

Lourdes Lopez, la directora artística cubanoamericana del Miami City Ballet y exbailarina principal del New City Ballet, es fotografiada en el Miami City Ballet el miércoles 29 de junio de 2022 en Miami Beach, Florida.
Lourdes Lopez, la directora artística cubanoamericana del Miami City Ballet y exbailarina principal del New City Ballet, es fotografiada en el Miami City Ballet el miércoles 29 de junio de 2022 en Miami Beach, Florida.

Rompió barreras desde sus primeros pasos

Durante sus primeros años de vida, los pasos de Lourdes López fueron guiados por unas botas ortopédicas que le ayudaban a caminar.

Su familia había emigrado de Cuba cuando tenía apenas dos años. A pesar de no tener recursos económicos, a sus cinco años, su mamá decidió inscribirla en clases de ballet para que tuviera una mayor actividad física, siguiendo indicaciones de su médico.

Tres años más tarde, cuando ni las botas ortopédicas ni las clases de baile eran indispensables, su papá tuvo una “conversación de adultos” con ella.

La llamó a la cocina y le dijo: “Te han quitado las botas y estas clases de ballet son un gasto para nosotros, no son baratas. ¿Es esto algo que quieres continuar o las cancelamos?”

Todavía tenía un mundo de cosas por aprender, pero de lo que López ya estaba segura era de su innata pasión por el ballet. “Recuerdo haber dicho: ‘no, realmente quiero continuar. No puedo explicarlo, pero hay algo del ballet que me encanta’ ”, compartió a el Nuevo Herald.

Lourdes Lopez en “Divertimento No. 15” de George Balanchine (1979).
Lourdes Lopez en “Divertimento No. 15” de George Balanchine (1979).

Comienzos en la industria de la danza

“Fue maravilloso crecer en Miami”, recuerda la bailarina a sus 64 años. Según la describe, la ciudad era más pequeña y tranquila, pero todavía no había compañía de ballet en la que pudiera bailar profesionalmente.

Su vida cambió a los 11 años cuando recibió una beca completa para asistir a School of American Ballet, la academia oficial del New York City Ballet. “Creo que eso fue lo que hizo que mis padres pensaran ‘No solo le gusta, Lourdes debe tener algún talento’ ”.

Lourdes Lopez como el pájaro de fuego en “Firebird” de Balanchine/Robbins, que en 1995 Jennifer Dunning (The New York Times) calificó de “mágico”.
Lourdes Lopez como el pájaro de fuego en “Firebird” de Balanchine/Robbins, que en 1995 Jennifer Dunning (The New York Times) calificó de “mágico”.

A los 14 años, se mudó a la ciudad de Nueva York para dedicarse de lleno a estudiar en la institución que la becó. A pesar de ser un salto arriesgado para una joven, el apoyo de sus padres estuvo presente durante todo el tiempo.

“Increíblemente mis padres permitieron que me mudara a la ciudad junto a una de mis hermanas, que tenía 19 años, para asistir a tiempo completo a la School of American Ballet”.

Fue en la Gran Manzana donde se percató de que las personas se podían ganar la vida bailando. Cuando tenía 16 años, se comenzó a desarrollar como bailarina profesional al unirse al cuerpo de baile del New York City Ballet.

En el 1981 fue ascendida a solista y tres años más tarde, se convirtió en bailarina principal de la compañía, ganando elogios de críticos de la danza por su magistral desempeño en obras creadas y dirigidas por prestigiosas figuras de la industria como George Balanchine y Jerome Robbins.

La directora artística de Miami City Ballet, Lourdes Lopez, fue alumna del famoso coreógrafo George Balanchine.
La directora artística de Miami City Ballet, Lourdes Lopez, fue alumna del famoso coreógrafo George Balanchine.

Es uno de los logros profesionales que más la enorgullece. “Hay algo que nunca se menciona y de lo que estoy muy orgullosa. Es haber sido la primera y única bailarina principal latina —hasta hoy— del New York City Ballet. Latina y cubana”, dijo en una entrevista con el experimentado crítico de danza Orlando Taquechel.

Luego de una exitosa carrera en los escenarios, López se retiró a los 39 años. Pero no fue una despedida del ballet, sino un hasta luego.

Durante unos años López fungió como reportera cultural para la estación de televisión neoyorquina WNBC donde escribió y produjo segmentos sobre arte. También se desarrolló como profesora en la Ballet Academy East y en Barnard College, ambos en Nueva York.

En el 2011 fue galardona con el prestigioso Premio Jerome Robbins por sus años en la danza.

Luego de vivir cuatro décadas en Nueva York, regresó a Miami en el 2012 tras recibir una oferta para dirigir a la compañía local de ballet.

“El ballet de alguna manera me encontró de nuevo”, confesó.

De vuelta a casa

Las expectativas de la audiencia del Miami City Ballet estaban altas ante su llegada debido al gran éxito de su predecesor, Edward Villella, pero la característica dirección artística de López rápidamente cobró notoriedad.

“Año tras año, López ha acercado a la compañía al modelo que propuso en sus comienzos y eso es un logro enorme. Creo que si había alguna incertidumbre de su capacidad para dirigir la compañía, mantenerla al nivel que tenía, llevarla al siguiente y actualizarla, no debe haber duda en este momento”, comentó Taquechel a el Nuevo Herald.

Lourdes López con bailarines del Miami City Ballet en un ensayo de “Joyas” de George Balanchine.
Lourdes López con bailarines del Miami City Ballet en un ensayo de “Joyas” de George Balanchine.

López dejó claro desde un principio que su enfoque estaría en realizar dinámicas modernas dentro de la compañía y una década después, ese continúa siendo su objetivo.

“Ella ha ido explorando las posibilidades de la compañía como un todo. Le ha dado una cara nueva al Miami City Ballet y la respuesta del público ha sido positiva”, asegura Taquechel al explicar que López ha logrado desarrollar obras que se comunican emocionalmente con los espectadores.

La experiencia de López como bailarina ayudó a que su transición al rol de directora fuera sutil y no afectara negativamente a los bailarines, por los cuales también fue bien recibida.

“Ella es exigente con el equipo, pero al mismo tiempo nos da la oportunidad de comunicarnos con ella. Si en algún momento siento alguna molestia o alguna herida, me siento con la libertad de decirle”, compartió con el Nuevo Herald la aclamada bailarina principal Katia Carranza.

Katia Carranza y Lourdes Lopez ensayan el “Concierto Barroco” de Balanchine.
Katia Carranza y Lourdes Lopez ensayan el “Concierto Barroco” de Balanchine.

En el 2012, su primer año dirigiendo la compañía, López recibió un reconocimiento por parte de la American Immigration Law Foundation que busca enaltecer a los cubanoamericanos por sus contribuciones a la sociedad estadounidense.

Sus honores en la compañía incluyen el Premio Dance Magazine en el 2018. En el 2019 fue galardonada con el Premio a la Trayectoria “Toda Una Vida” del Ballet Hispánico. Durante el Festival Internacional de Ballet de Miami del 2021, recibió el premio “Una Vida para la Danza”.

Luz de esperanza en tiempos oscuros

A pesar de sus logros y reconocimientos, su enfoque permanece en el bienestar de sus bailarines y en el público de Miami.

“No pienso ‘Oh, soy la primera mujer o la primera latina en este puesto’, otros piensan eso. Yo quiero lo mejor para la compañía y para la ciudad. Entonces me pregunto, ‘¿qué puedo hacer para asegurarme de que eso suceda?’ Así empiezo mi día”, dijo López.

En el 2020, durante la crisis económica ocasionada por la pandemia, la directora artística se comprometió a mantener a los bailarines empleados, ensayando y creando nuevas obras. Gracias a ello la compañía pudo presentar “El Cascanueces” al aire libre en el Downtown Doral Park.

Durante las 14 funciones completamente vendidas, cada día 500 personas —practicando distanciamiento social— se dieron cita para disfrutar de la obra que dio un respiro de distracción a la comunidad.

El hermoso cuadro final de “Cascanueces en el Parque” hizo que el público estallara en aplausos.
El hermoso cuadro final de “Cascanueces en el Parque” hizo que el público estallara en aplausos.

“El Cascanueces es una obra familiar. Para mucho niños, haber presenciado el espectáculo en medio de la pandemia debió tener una gran importancia. Probablemente muy pocos de los que lo vieron van a convertirse en bailarines, pero sí lo van a recordar por siempre”, comentó Taquechel.

Durante ese año, los estudiantes de la compañía recibieron clases a través de Zoom y se mantuvieron en forma.

“Ese tipo de pensamiento creativo en tiempos de crisis y apego a tus valores es un gran testimonio del tipo de líder que es Lourdes López”, dijo Jeffrey Davis, presidente del Patronato de Miami City Ballet.

Sobrepasando divisiones políticas y barreras internacionales

López también ha logrado crear puentes artísticos para un bien mayor.

Cuando Rusia invadió a Ucrania, se dio a la tarea de encontrar formas de ayudar a los afectados por el conflicto e inició la solicitud de visado para Yuliia Moskalenko, una bailarina ucraniana de 28 años que integraba el Ballet Nacional de Ucrania.

Lourdes Lopez posa junto a la bailarina ucraniana Yuliia Moskalenko en una visita a Londres, Inglaterra.
Lourdes Lopez posa junto a la bailarina ucraniana Yuliia Moskalenko en una visita a Londres, Inglaterra.

López navegó entre mares de barreras partidistas izando la bandera de la paz para obtener el apoyo de demócratas y republicanos.

En un mundo de divisiones políticas, logró que ambos partidos se unieran al proceso de reclutar a Moskalenko para el Miami City Ballet.

Desde los Países Bajos, la artista ucraniana se expresó afortunada de recibir la oportunidad de unirse a la compañía de Miami. “Esta oportunidad surgió de la nada. Tenía que aprovecharla”, dijo en declaraciones a The New York Times.

Los esfuerzos de López durante el arduo proceso legal que demoró más de tres meses fueron “extraordinarios”, según los describe Davis.

“Una de las cosas que me pareció increíble fue que ella tuvo que buscar el apoyo del senador republicano Marco Rubio y de la representante por el Partido Demócrata Deborah Wasserman Schultz”, explicó. “Lourdes no lo abordó como un tema político sino con un sentido de compasión”.

“Una de las razones por las que lo hicimos es para demostrar que se puede hacer. Abres un camino, lo muestras al mundo y otros te siguen”, aseguró López.

Carranza, la bailarina mexicana, confirma que López es “una gran inspiración para todos” y asegura que mediante su ejemplo ha abierto “muchísimas puertas para hacernos saber que los sueños se pueden lograr. Que con trabajo y esfuerzo uno puede llegar a lograr sus metas”.

Consciente de la responsabilidad que esto conlleva, López continúa disfrutando cada paso de su camino en la industria: “Estoy haciendo lo que amo y he estado haciendo lo que amo hacer desde que tenía ocho años. No mucha gente puede decir eso”.

Lourdes López, directora artística cubanoamericana del Miami City Ballet y exbailarina principal del New City Ballet, sostiene una fotografía de sus dos hijas, Adriel Saporta, a la izquierda, y Calliste Skouras, en su oficina dentro del Miami City Ballet.
Lourdes López, directora artística cubanoamericana del Miami City Ballet y exbailarina principal del New City Ballet, sostiene una fotografía de sus dos hijas, Adriel Saporta, a la izquierda, y Calliste Skouras, en su oficina dentro del Miami City Ballet.