Los socialdemócratas alemanes eligen a la primera presidenta de su historia

Designated SPD leader Andrea Nahles addresses a one-day party congress of the Social Democratic Party (SPD) in Wiesbaden, Germany, April 22, 2018. REUTERS/Ralph Orlowski

Por Holger Hansen y Michelle Martin

Wiesbaden, ALEMANIA/BERLÍN (Reuters) - Los socialdemócratas alemanes del SPD eligieron a Andrea Nahles el domingo como la primera presidenta de su historia, con la esperanza de que pueda revitalizar al partido más antiguo del país tras la contundente derrota electoral de septiembre.

Alrededor del 66 por ciento de los delegados del SPD en un congreso votaron por Nahles, ex ministra laborista y madre católica de un hijo, que tiene estrechos vínculos estrechos con los sindicatos y que una vez dijo que quería ser ama de casa o canciller de Alemania.

El SPD, actualmente socio junior de la coalición gobernante con los demócrata-cristianos de la canciller Angela Merkel, tenía que encontrar sustituto para Martin Schulz, que dimitió después de que el año pasado el partido de 154 años de historia registrase su peor resultado electoral desde 1933.

Se esperaba que Nahles se alzase con la presidencia, aunque el resultado del domingo es el segundo peor para un líder del SPD en la época posterior a la última gran guerra, con algunos miembros -descontentos por que Nahles apoyase la renovación de la alianza con Merkel- votando probablemente a favor de su oponente, la alcaldesa de Flensburgo de 41 años de edad, Simone Lange.

El SPD sigue de capa caída. Un sondeo de Emnid para el periódico Bild am Sonntag mostró que sólo lo apoyan el 18 por ciento de los votantes, por el 33 por ciento de apoyo que tiene Merkel y no muy por delante de la intención de voto del 13 por ciento que tiene la agrupación ultraderechista Alternativa para Alemania (AfD).

Nahles, de 47 años, debe ahora presidir los esfuerzos del partido para renovarse, ideando nuevas políticas y poniendo nuevas caras en el mando, con el fin de rescatar al SPD del borde del abismo y convertirlo en una fuerza electoral que de nuevo sea tenida en cuenta.