Yahoo Noticias Los partidos más fríos en la historia de la NFL: cómo el clima afecta y cambia los partidos de los playoffs
En el futbol americano, como en ningún otro deporte profesional, el clima puede convertirse en un factor determinante durante un partido. Nunca es más cierto esto que en los playoffs cuando, por la época del año, las temperaturas gélidas, nieve y viento pueden hacer su aparición.
Para la ronda de comodines de este año, el duelo entre Miami Dolphins y Kansas City Chiefs podría ser uno de los más fríos de la historia, con una sensación térmica esperada de hasta 27 grados centígrados bajo cero.
Drama por el clima y en el campo
Algunos de los partidos más memorables y espectaculares en la historia de los playoffs de la NFL se han disputado en condiciones complicadas. Estos son algunos de los más recordados.
Juego de Campeonato de la NFL de 1967: Dallas Cowboys vs Green Bay Packers
Conocido en el folclor de la NFL como el “Tazón del Hielo”, Cowboys y Packers se enfrentaron con el título de la Liga y un lugar en lo que se conocería a la postre como el Super Bowl 2 en la balanza. El termómetro alcanzó los 44 grados bajo cero.
El frío era tal que el sistema de calefacción en el campo se reventó, lo que convirtió al emparrillado en una enorme pista de hielo. Al iniciar el partido, el silbato del árbitro principal se quedó pegado a su labio, por lo que el resto el juego fue marcado con la voz en lugar de silbatazos.
El encuentro fue un clásico, en el que los Packers se impusieron 21-17 gracias a una carrera personal de Bart Starr en el último minuto, dando a Vince Lombardi su último campeonato de la NFL.
Juego de Campeonato de la AFC de 1981: San Diego Chargers vs Cincinnati Bengals
Otro juego con un nombre especial. El “Tazón del Congelador” es considerado el partido más frío de la historia, con una sensación térmica de 51 grados centígrados bajo cero. Curiosamente, Forrest Gregg, head coach de los Bengals, fue parte de los Packers que jugaron en el “Tazón del Hielo”.
En el campo no hubo tanto drama, y Cincinnati dominó de principio a fin con marcador de 27-7 para llegar a su primer Super Bowl. Los Chargers, por cierto, venían de imponerse como visitante a los Miami Dolphins, en un partido disputado a 31 grados centígrados apenas una semana antes en los playoffs divisionales.
Juego de Comodines NFC de 2015: Seattle Seahawks vs Minnesota Vikings
Disputado en el TFC Bank Stadium de la Universidad de Minnesota por la construcción del nuevo estadio de los Vikings, con una sensación térmica de 31 grados bajo cero. Los Seahawks remontaron una desventaja de 9 puntos en el último cuarto, y Blair Walsh falló el lo que sería el gol de campo del triunfo.
Juego de Campeonato de la NFC 2007: New York Giants vs Green Bay Packers
En lo que sería el último partido de Brett Favre con los Packers, los Giants de Coughlin se impusieron por 23-20 en tiempo extra. Los Packers empataron el partido en el último cuarto con un gol de campo, pero no encontrarían un final feliz en esos playoffs.
No. 54: 2007 NFC Championship Game - Giants vs. Packers "The Chilling Championship" (Jan. 20, 2008) #NFL100 @Giants
📺: NFL 100 Greatest Games on @NFLNetwork pic.twitter.com/FZzlOMKuOD— NFL (@NFL) September 28, 2019
El último pase de Favre vistiendo los colores del Pack fue interceptado por Corey Webster y Lawrence Tynes anotaría el gol de campo de la victoria con sensación térmica de 31 grados bajo cero. Dos semanas más tarde, los Giants se coronarían tras sorprender a los hasta entonces invictos New England Patriots.
Juego Divisional NFC de 1988: Philadelphia Eagles vs Chicago Bears
En esta ocasión no fue tanto la temperatura, sino la bruma, la cual le daría el nombre del “Tazón de la Niebla” al partido. Chicago se impuso en la víspera de año nuevo a los Eagles por 20-12 en el mejor partido que nadie vio. La visibilidad estaba tan comprometida que los entrenadores y jugadores en la banca no alcanzaban a ver lo que sucedía a la mitad del campo.
Las inclemencias del frío
Sobra decir que jugar en el frío complica todo. Con las bajas temperaturas, se pierde el agarre sobre el balón, el cual se siente más frío y pesado. Para los pateadores, es como impactar una piedra.
Para correr también el campo se vuelve más resbaloso, y si hay nieve o lluvia, la tracción disminuye más. También los jugadores resienten más el contacto, agregando un factor a tomar en cuenta en choques de alto impacto.
Estadísticamente, la efectividad de pasadores y pateadores disminuye en 2 por ciento, de acuerdo con el portal Weatherstem.com. Las patadas de despeje, por su parte, disminuyen 3 yardas en promedio.
¿Qué hacen los jugadores contra el frío?
Ajustarse a este tipo de clima inclemente no es fácil, sin embargo, existen algunos factores que ayudan. Los equipos cuentan con bancas con calefacción y calentadores de aire, lo que ayuda a que los jugadores que salen del campo puedan mantener su cuerpo a buena temperatura y disminuir el riesgo de lesiones musculares.
Tom Brady solía usar ropa para buceo por debajo del uniforme. Otros jugadores se untan vaselina en áreas descubiertas, como brazos y cara. La jalea de petróleo también es usada en los brazos. Doctores también recomiendan bebidas calientes para rehidratarse.
Las partes más importantes a proteger son manos y pies, pues se pueden congelar con mayor facilidad. Las bancas tienen compartimentos para calentar los pies. Además, los jugadores pueden llevar calentadores de manos en el uniforme. Otro método ha sido moler chiles y colocar el polvo en los zapatos.
