Los móviles ‘queman’ los espermatozoides, según revela un estudio
Los móviles y su relación con la fertilidad masculina es un tema que ha sido ampliamente explorado en los últimos años. Y aunque existen varios estudios que han demostrado que tener un smartphone cerca de la ingle daña la calidad y la cantidad del esperma , ningún organismo oficial ha obligado a los fabricantes a advertir del peligro a los usuarios.
El último trabajo que analiza este aspecto ha sido realizado por investigadores de la Technion University de Haifa (Israel). En él, se ha analizado durante 12 meses los hábitos de uso de móviles de 100 hombres que acudían a una clínica de fertilidad para conocer la calidad de su esperma.
De todos los sujetos estudiados, el 47% llevaba el móvil en el bolsillo del pantalón todos los días. Ese grupo era el que tenía menos cantidad de espermatozoides que los que guardaban su smartphone en otro lugar. Los autores del trabajo aseguran que los problemas de fertilidad hallados en ese 47% solo están presentes en el 11% de la población general masculina, lo que les lleva a inferir que la causa directa de esta situación es el móvil.
“Consideramos que los teléfonos elevan la temperatura de la zona con la actividad electromagnética y esto hace que los espermatozoides no sobrevivan”, explica la profesora Martha Dirnfeld, una de las investigadoras, en las conclusiones del trabajo.
Pero no solo es importante que el móvil no esté en el bolsillo para que no afecte a la fertilidad masculina. Los científicos israelíes también han descubierto que los hombres que hablan por teléfono en la cama mientras éste se está cargando o que simplemente duermen cerca de él mientras está encendido también tienen peor calidad de esperma que los que descansan con el smartphone a más distancia.
En declaraciones concedidas a The Telegraph, el experto en reproducción Gedis Grudzinskas recomienda a los hombres “dejar de ser adictos a los móviles y pensar en su bienestar. ¿Es necesario llevar el teléfono en el pijama o dormir con él encendido al lado de la cama?” El mismo experto señala que las mujeres no se ven afectadas por esta situación porque no llevan el móvil pagado a su cuerpo, sino que lo guardan en el bolso.
Para Grudzinskas lo más recomendable es dejar el teléfono encima de una mesa si no lo estamos usando o guardarlo en el bolsillo del abrigo o de la chaqueta. Así no existe un contacto directo con la zona pélvica y no provoca daños que pueden afectar seriamente a la reproducción.