Lombana, el antisistema contra la corrupción que busca dar la sorpresa electoral en Panamá
Ciudad de Panamá, 30 abr (EFE).- El candidato antisistema, Ricardo Lombana, busca dar la sorpresa en las elecciones generales del 5 de mayo con su firme discurso anticorrupción, porque si en los pasados comicios de 2019 obtuvo un inesperado tercer puesto cuando era todo un desconocido, ahora desde su equipo de campaña están seguros de que también superará las encuestas para convertirse en el próximo presidente de Panamá.
"Con mucho esfuerzo, estamos a las puertas del triunfo", afirmó este martes Lombana -nacido en 1973- durante su cierre de campaña en Ciudad de Panamá, ya que después de una movilización del voto "boca a boca", ahora son "muchísimos más que en 2019" en una elección que "marcará un antes y un después en la historia de Panamá".
Lombana, del Movimiento Otro Camino (Moca), repitió su postura "implacable contra la corrupción", pidiendo un pacto para "recuperar Panamá", un país saqueado, y prometió recuperar para la población alrededor de 4.000 millones de dólares (3.750 millones de euros) que pierden por esos actos corruptos, mala gestión o una "pésima recaudación de impuestos".
"Soñemos con un Panamá en el que la dignidad de los panameños sea respetada, soñemos todos con un Panamá en el que no sea tu apellido, ni el contacto político el que defina tu valor como persona y como ser humano, para eso vengo", dijo emulando a Martin Luther King, cuya imagen le acompaña a veces durante las entrevistas.
Este abogado de profesión con experiencia en el mundo del periodismo y la diplomacia había explicado a EFE en una entrevista previa que espera "que una política pública férrea anticorrupción" permita recuperar "fondos importantes que hoy no existen o que están en los bolsillos de algunas personas y no al servicio del pueblo", por lo que propone una Asamblea Constituyente precedida por una consulta pública para apoyar sus cambios.
Lombana, dice, predica con el ejemplo, despojándose del fuero penal electoral porque no tiene "nada que esconder" y mantiene su decisión de no haber pactado con ninguno de sus opositores, algunos manchados de corrupción, algo que cobra mayor actualidad después de que el lunes el candidato Melitón Arrocha, a la cola de las encuestas, pidiera el voto para el expresidente Martín Torrijos, del Partido Popular (PP) y mejor posicionado.
De entre los ocho candidatos, los sondeos ponen en general en primera posición a José Raul Mulino, candidato inesperado por el partido Realizando Metas (RM) tras sustituir in extremis al expresidente Ricardo Martinelli, inhabilitado tras ser condenado a más de diez años de prisión por corrupción, y que se encuentra asilado en la Embajada de Nicaragua en Panamá.
Después están Rómulo Roux, del liberal Cambio Democrático (CD), Torrijos y el propio Lombana, a veces con una mayor diferencia entre ellos, otras con empate técnico.
Pero para Lombana esta es una lucha entre él, que "representa la fuerza de la juventud", y Mulino, que "representa el robo".
Un independiente histórico
Lombana dijo este martes que repetirán el logró "histórico" de 2019, convirtiendo un movimiento anticorrupción que supo aglutinar el deseo de cambio, en un partido político que ha ido creciendo hasta los comicios del próximo domingo.
Según explica su partido, la experiencia política de Lombana comenzó en 2017, "cuando preocupado por el rumbo que tomaba el país en materia de corrupción, injusticia y falta de oportunidades, decide conformar, junto con un grupo de ciudadanos afines, el Movimiento Otro Camino para lograr la candidatura" por la libre postulación.
Dentro de este perfil antisistema, distorsiona escuchar a Lombana enarbolar la bandera del presidente salvadoreño, Nayib Bukele, que se saltó la Constitución de su país para ser reelegido presidente el pasado febrero, o que como consecuencia de su llamada "guerra contra las pandillas", que redujo la violencia en El Salvador a mínimos históricos disparando su popularidad, se hayan producido miles de detenciones arbitrarias.
Preguntado por EFE, Lombana aclaró que cuando él cita a Bukele no está "pensando ni en la reelección, ni en la Constitución", sino "en un presidente que atendió las necesidades básicas de una población olvidada por 40 años. Eso es inobjetable".
También lo ha nombrado, dice, "porque además de atender necesidades básicas olvidadas de una población, enfrentó al 'establishment' político y económico de su país y puso a raya a quienes siempre habían visto su país como un tablero de monopolio”, algo a lo que él mismo se está "enfrentando".
"Vamos a limpiar las calles de bandas y pandillas" y también a la élite corrupta, esas "pandillas de saco y corbata", subrayó este martes ante sus seguidores, que reclaman un cambio.
(c) Agencia EFE