Lo que habría detrás la masacre de una familia en Ohio

La masacre de 8 personas de una misma familia en el Condado Pike, Ohio, ejecutadas de modo planeado y metódico de acuerdo a las autoridades, mantiene una honda carga de misterio e incertidumbres en torno a los motivos y los autores del crimen.

Pero poco a poco van surgiendo detalles. Como informó el periódico Chillicote Gazette, la policía halló al inspeccionar las casas donde se registraron los asesinatos evidencia de tres operaciones de cultivo de marihuana, aunque no se ha afirmado que la terrible matanza haya sido originada en asuntos vinculados a drogas.

Por lo pronto se han revelado los nombres de los fallecidos, todos integrantes de la familia Rhoden: Dana Rhoden, de 37 años; Gary Rhoden, de 38; Kenneth Rhoden, de 44; Christopher Rhoden Sr., de 40; Christopher Rhoden Jr., de 16; Hannah Gilley; de 20; Clarence Rhoden, de 20: y Hanna Rhoden, de 19.

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Una de las propiedades en donde se cometieron los asesinatos de ocho miembros de la familia Rhoden en el Condado Pike, Ohio. (AP)

Además, fueron hallados tres niños pequeños que sobrevivieron a las ejecuciones y no fueron lastimados, uno de 4 días de nacido, uno de seis meses y otro de tres años.

Grabaciones de llamadas al número de emergencia 911, que han sido dadas a conocer, han permitido realizar un asomo al horror de la escena del crimen.

En una de ellas se escucha una mujer, que por lo que comentó sería cuñada de dos de los fallecidos, hablar con la operadora del sistema 911. Entre sollozos y con el aliento cortado, la mujer dice “pienso que mi cuñado está muerto…. Hay sangre por toda la casa… Mi cuñado está en el dormitorio…”. Con desesperación la mujer identificó a los fallecidos como Christopher y Gary Rhoden, aunque en el primer caso no clarificó si se refería al padre o al hijo.

La mujer comenta que cuando llegó la casa estaba cerrada, pero como conocía dónde había una llave pudo entrar, y entonces descubrió los cuerpos. Esa vivienda fue una de las tres en donde fueron halladas las víctimas.

Inicialmente, cuando la policía llegó a las escenas del crimen, se informó que habían sido siete las víctimas. Pero una nueva llamada al 911, realizada por Donald Stone, indicó al operador que había hallado a su “primo con una herida de bala” y que se trataba del mismo caso que estaba siendo reportado en las noticias. El hombre clarificó que su primo era Kenneth Rhoden y que estaba muerto. Al parecer, como relató el periódico Columbus Dispatch, cuando Stone se enteró de los asesinatos de los primero siete miembros de la familia Rhoden fue a la casa de su primo para ver si estaba bien, y entonces encontró el cuerpo y llamó al 911.

Originalmente se había supuesto que podría haberse tratado de suicidios, o que el autor del tiroteo podría estar entre los fallecidos, pero la policía habría descartado esas posibilidades y considera que la matanza fue planeada específicamente para atacar a la familia, y que los asesinatos fueron realizados de modo metódico y con la intención de obstruir o complicar la investigación posterior.

Con todo, aún no se ha nombrado o detenido a ningún sospechoso, y aunque las autoridades han dicho que los vecinos del área, una comunidad rural al sur de Ohio a unas 110 millas de Cincinnati, no corren actualmente peligro, la población estaría en fuerte tensión.

Ante ello, de acuerdo a la televisora Fox News, las autoridades han dicho a la comunidad que quien sienta estar en peligro debe considerar “estar armado”, sobre todo en el caso de otros miembros de la familia Rhoden. La policía ha indicado que hasta el momento cerca de 100 investigadores han participado en la pesquisa, se han hecho más de 50 entrevistas y se están examinando 18 piezas de evidencia de ADN.

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Una ofrenda con fotos de quienes serían algunas de las víctimas de la masacre en el Condado Pike, en Ohio. (Fox News)

No hay, con todo, ninguna revelación sobre sospechosos o móviles del crimen, y las autoridades han dicho que la investigación podría ser larga. Miembros de la familia Rhoden se reunieron en una iglesia de la zona y, en medio de su luto, agradecieron el apoyo de la comunidad y de las autoridades.

Las incertidumbres y misterios sobre este terrible caso son muchas y es posible que la investigación tarde antes de dar con los responsables. Pero en aras de ayudar a que se sepa la verdad, algunos han decidido ir un poco más allá. Por ejemplo, el empresario de restaurantes Jeff Ruby ha ofrecido una recompensa de 25,000 dólares a quien ofrezca información que permita el arresto de los asesinos de la familia Rhoden, como reportó la televisora local WKYT.

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