Libélulas, cucarachas, cigarras: simplemente hermosas

Jessica Ware, entomóloga y conservadora asociada de la División de Zoología de Invertebrados, en el Museo Estadounidense de Historia Natural de Nueva York, el 22 de marzo de 2023. (Hiroko Masuike/The New York Times)
Jessica Ware, entomóloga y conservadora asociada de la División de Zoología de Invertebrados, en el Museo Estadounidense de Historia Natural de Nueva York, el 22 de marzo de 2023. (Hiroko Masuike/The New York Times)

NUEVA YORK — Jessica Ware, curadora asociada del Museo Estadounidense de Historia Natural, canta odas a los escarabajos. Cree que las cucarachas no se merecen la mala reputación que tienen. Las cigarras son simple y sencillamente hermosas, y se siente orgullosa de que las que llegan cada 17 años son únicas de Norteamérica.

Pero —aunque esté mal que una entomóloga tenga favoritos— es la libélula la que de verdad hace latir su corazón. En su vestido, tiene un broche de libélula. En su brazo, tiene un tatuaje de libélula.

“Son como los leones del cielo”, dijo. “Interceptan a sus presas como los leones. No vuelan a donde está la mosca ahora; vuelan a todo va a estar la mosca y ahí la arremeten. Son depredadores sorprendentes”.

Ware, de 45 años, quien trabaja en la Division de Zoología de Invertebrados, es la embajadora perfecta de los insectos. Hace que las personas que nunca han pensado en ellos —salvo como algo que causa molestia— comprenda por qué son fascinantes e importantes.

Ware no es solo una defensora de los insectos; como mujer negra queer y primera persona negra que ocupa un puesto de conservadora titular en el museo, quiere atraer a más personas de color a la entomología.

“Yo diría que, en todos los empleos que he tenido en el mundo de la ciencia, siempre he sido la única mujer negra”, afirmó. “En el posgrado, la única mujer negra; cuando hice mi posdoc aquí, era la única mujer negra”.

Especímenes de insectos en la División de Zoología de Invertebrados, en el Museo Estadounidense de Historia Natural de Nueva York, el 22 de marzo de 2023. (Hiroko Masuike/The New York Times)
Especímenes de insectos en la División de Zoología de Invertebrados, en el Museo Estadounidense de Historia Natural de Nueva York, el 22 de marzo de 2023. (Hiroko Masuike/The New York Times)

Con el fin de atraer a más personas de color a la entomología, ayudó a fundar un colectivo, Entomólogos de Color, para defender y proporcionar recursos a las personas no blancas que quieren dedicarse a la entomología y apoyarlas una vez que tienen trabajo.

Pero volviendo a los bichos, o en realidad a los insectos, ya que los bichos son específicamente insectos que tienen la boca en forma de popote. Para Ware, es un momento especialmente emocionante, ya que el museo se prepara para inaugurar esta primavera su Centro Richard Gilder de Ciencia, Educación e Innovación de 431 millones de dólares, en el Upper West Side de Nueva York. Ware ha formado parte del pequeño equipo encargado de elegir lo que irá al nuevo insectario, la primera galería permanente del museo dedicada a los insectos desde los años setenta.

Seleccionar cuáles de los aproximadamente 350 especímenes representativos de los más de 20 millones de especímenes de insectos almacenados en el museo debían exponerse en el insectario fue una elección brutal para los tres curadores y sus ayudantes.

Ware era la encargada de elegir los insectos que atraviesan una metamorfosis incompleta, que incluye solo los estadios de huevo, ninfa y adulto; los insectos como la mariposa atraviesan una metamorfosis completa (huevo, larva, pupa y adulto). Los saltamontes, las cigarras, las cucarachas y, sí, las libélulas, son todos ejemplos de metamorfosis incompleta, también llamada no holometabolosis.

“Fue muy duro, porque teníamos que elegir a todos los no holometábolos que estarán en este insectario gigante para siempre. ¡Dios mío!”, dijo, recordando las angustiosas decisiones que tuvo que tomar. “Recuerdo que miraba todos los cajones y pensaba: ‘¿Qué voy a elegir?’. Pero realmente queríamos mostrar la gran diversidad y también cosas que suscitaran asombro, así que mi objetivo era intentar exhibir cosas que hicieran que la gente viera a los insectos de otra manera”.

Es un momento importante por otra razón: muchos científicos temen que estamos en medio de un apocalipsis de insectos, ya que se han registrado descensos drásticos en todo el mundo y en distintos tipos de insectos. Los cuales constituyen el 80 por ciento de la vida animal y son fundamentales para la vida de la mayoría de los animales, incluidos los humanos.

A los entomólogos a menudo les molesta que su importante labor quede relegada a un segundo plano por la difícil situación de los mamíferos con los que nos identificamos más. Pero cada vez se presta más atención a esta cuestión, ya que numerosos factores, como el cambio climático, la deforestación, la agricultura y la contaminación, están destruyendo tanto la abundancia como la diversidad de los insectos.

Por ejemplo, la tala de árboles socava los ecosistemas donde viven muchos insectos. Se enfrentan a la extinción porque no pueden adaptarse con suficiente rapidez a temperaturas más cálidas, y el caos medioambiental causado por fenómenos meteorológicos extremos podría ser fatal.

“En general, parece que las cifras sugieren un ritmo de declive que hasta ahora no habíamos visto en la historia de la Tierra”, señaló Ware. El año pasado ella formó parte de un grupo de investigadores becados por la Fundación Nacional de la Ciencia para estudiar el declive de los insectos a escala mundial.

Y esto es algo que ha visto de primera mano en un lugar muy querido desde su infancia. Ware, nacida en Montreal y criada en Toronto, pasaba los veranos con sus abuelos en el norte de Ontario. Ella y su gemela solían visitar el lago Muskoka, pescar y pasear en canoas y observar el vuelo de las libélulas.

Ahora, hay muchas menos.

Dice que esos lagos despertaron su fascinación por los insectos. Sus abuelos no tenían abundante formación académica, “pero les encantaba la naturaleza y hacer preguntas”, contó. “Mi abuela me decía constantemente: ‘¿Por qué crees que es una serpiente verde? ¿Por qué crees que hay dos libélulas amarillas? ¿Por qué crees que está pasando esto?’. Creo que eso fue lo que nos puso en el camino de ser inquisitivas”.

c.2023 The New York Times Company