La letra del “Himno a Sarmiento” completa, para celebrar el Día del Maestro
En el mes de septiembre, en las escuelas se empiezan a preparar para el Día del Maestro. Se trata de una jornada por la cual se homenajea a Domingo Faustino Sarmiento. Aunque durante el 11 de septiembre las aulas se mantienen cerradas, en las instituciones educativas se realizan actos para su conmemoración. En ese contexto se pueden escuchar las estrofas del “Himno a Sarmiento”, el cual fue escrito por Leopoldo Corretjer en 1904. En ese sentido, varios se pueden preguntar cuál es la letra completa.
El himno a Sarmiento completo
Fue la lucha, tu vida y tu elemento
La fatiga, tu descanso y calma
La niñez, tu ilusión y tu contento
La que al darle el saber, le diste el alma
Fue la lucha, tu vida y tu elemento
La fatiga, tu descanso y calma
La niñez, tu ilusión y tu contento
La que al darle el saber, le diste el alma
Con la luz de tu ingenio iluminaste
La razón en la noche de ignorancia
Por ver grande a tu patria, tú luchaste
Con la espada, con la pluma y la palabra
En su pecho, la niñez de amor un templo
Te ha levantado y en él sigues viviendo
Y al latir, su corazón va repitiendo
Honor y gratitud al gran Sarmiento
Honor y gratitud y gratitud
Gloria y loor, honra sin par
Para el grande, entre los grandes
Padre del aula, Sarmiento inmortal
Gloria y loor, honra sin par
Para el grande, entre los grandes
Padre del aula, Sarmiento inmortal
Gloria y loor, honra sin par
Por qué el Día del Maestro se asocia a Sarmiento
El Día del Maestro se inspira en Domingo Faustino Sarmiento, escritor, docente, militar, gobernador de San Juan, presidente y uno de los políticos más referenciados del siglo XIX en la Argentina, que desde los lugares que le tocó ocupar buscó favorecer el desarrollo de la educación pública, laica y gratuita, tanto para varones como para mujeres.
Como señalan desde la Universidad Nacional de Buenos Aires, durante su presidencia (1868-1874) se construyeron “más de 800 escuelas, y la cantidad de alumnos pasó de 30.000 a 100.000, en un país de 2 millones de habitantes”. Además, dejó numerosos escritos en los que abordó este tema, como el libro De la educación popular (1849). Además, en 1870 fundó la Comisión Nacional de Bibliotecas Populares (Conabip) y la Biblioteca Nacional de Maestros, dos organismos diseñados para la difusión, investigación y desarrollo académico.
Por este motivo es que se lo llama el “padre del aula”. Muchos de sus modelos sirvieron como inspiración de otros países como Chile, Paraguay y Perú. Es así que la importancia de Sarmiento excedió las fronteras de la patria, y esto se expresa en el hecho de que el Día del Maestro fuera sancionado durante la Primera Conferencia de Ministros y Directores de Educación de las Repúblicas Americanas, celebrada en Panamá en el año 1943. Dos años después, en 1945, esta conmemoración se adoptó en la Argentina por decreto del entonces presidente, Edelmiro Farrell.