El nuevo tanque de guerra de EEUU que dispara ‘municiones inteligentes’

Las fuerzas armadas de Estados Unidos cuentan con una nueva arma, de capacidades innovadoras, que le concederá una posición de enorme fortaleza en el campo de batalla. Se trata de la nueva versión del icónico tanque de combate Abrams, denominada M-1A2SEPV3 o simplemente V3, que substituye a la M-1A2SEPV2 que entró en servicio en 2007.

La versión V3 ha sido presentada por el Ejército como una mera actualización mejorada de la versión V3, pero analistas han considerado que varias de sus nuevas especificaciones y capacidades le conceden una ventaja y poder singulares, en gran medida diferentes a las que estaban disponibles hasta ahora.

De acuerdo a Motherboard, el Abrams V3 cuesta unos 20 millones de dólares cada uno y el Ejército ha pedido al Congreso le autorice los fondos para ordenar en 2018 la construcción de 56 de ellos a la firma General Dynamics Land Systems.

El tanque Abrams es una de las armas icónicas del ejército de EEUU y con su versión 3 cuenta ahora con mayor poder y propulsión, blindaje más fuerte, sistemas electrónicos mejorados y capacidad de disparar ‘municiones inteligentes’. (AP)
El tanque Abrams es una de las armas icónicas del ejército de EEUU y con su versión 3 cuenta ahora con mayor poder y propulsión, blindaje más fuerte, sistemas electrónicos mejorados y capacidad de disparar ‘municiones inteligentes’. (AP)

Aunque no se sabe aún lo que se aprobará, el presupuesto militar es el rubro al que la actual administración ha dado prioridad, incluso con recortes en otras áreas para incrementar sus ingresos, por lo que esos fondos parecen, al menos en principio, asequibles.

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Así, en ese escenario el Ejército contará con los nuevos tanques V3 con una importante novedad. Cuentan con un poderoso cañón de 120 milímetros capaz de disparar “municiones inteligentes” que se reconfiguran en función del objetivo contra el que son disparadas. Son mucho más costosas que las municiones normales, pero le dan al tanque ventajas adicionales que pueden resultar críticas para lograr la victoria en acción.

Se trata, de acuerdo a Motherboard, del primer tanque de combate con esa capacidad, que en general consiste en que los sistemas del vehículo son capaces de reconocer el objetivo contra el que el cañón está siendo apuntado, de modo de que la “munición inteligente” se ajusta a sí misma para desatar el poder destructivo requerido, por ejemplo, si se dispara contra un helicóptero o una posición fortificada.

Antes se requería que la tripulación manualmente colocara o ajustara el tipo de munición específica al objetivo a destruir. Ahora, un solo tipo de munición es usado, y ésta se reconfigura en tiempo real. Usar un solo tipo de munición da agilidad y seguridad a la tripulación del tanque y con ello lo vuelve más dominante y efectivo en el campo de batalla.

La carrera en el campo de los tanques es intensa, con nuevos modelos de Rusia en proceso de entrar en operación para encarar al Abrams de EEUU. (Popular Mechanics)
La carrera en el campo de los tanques es intensa, con nuevos modelos de Rusia en proceso de entrar en operación para encarar al Abrams de EEUU. (Popular Mechanics)

Además de esa funcionalidad, que da mayor rapidez y eficacia al ataque, el V3 cuenta con sistemas de propulsión más potentes, un blindaje más fuerte y mejores sistemas electrónicos. Por ello, por el momento el Abrams V3 sería superior a tanques rivales, aunque Rusia y China, por ejemplo, avanzan a pasos enormes. Según Motherboard, el tanque ruso Armata, aún en etapa de desarrollo, tiene una torreta de alta automatización, que superaría a aquellas dirigidas por operadores humanos, y algunos modelos rusos y un nuevo tanque chino al parecer tienen capacidad de lanzar cohetes, lo que incrementa su capacidad de fuego.

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Los primeros prototipos del V3, de acuerdo a Scout, comenzarán a ser entregados al Ejército a finales de octubre y el objetivo es que, en algún momento, el nuevo modelo reemplace toda su flota de tanques V2, unas 1,500 unidades.

Y la versión V4 ya está en proceso de diseño, para entrar en servicio a partir de 2025, con incluso mayor protección, mejores sensores y armas de mayor poder destructivo. Siete prototipos del V4 a un costo de 311 millones serán entregados en la próxima década.

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