La religión rara vez es parte de las conversaciones en la terapia intensiva

Por Kathryn Doyle (Reuters Health) - Un estudio revela que los médicos y otros profesionales de la salud conversan sobre la religión o la espiritualidad en menos del 20 por ciento de las reuniones con familiares de pacientes internados en una unidad de terapia intensiva (UTI). Para muchos pacientes y sus familias, la religión y la espiritualidad son muy importantes en el final de la vida y comprenderlo sería "importante para brindar atención respetuosa del individuo", dijo el autor principal, doctor Douglas B. White, de la Facultad de Medicina de la University of Pittsburgh. Su equipo utilizó grabaciones para analizar 249 reuniones entre profesionales de la salud y los responsables designados para tomar decisiones en nombre de pacientes internados en las UTI de seis hospitales en el período 2009-2012. Tres cuartos de los representantes de los pacientes calificaron la religión o la espiritualidad como algo importante o muy importante en sus vidas. La religión o la espiritualidad surgieron en 40 de las 249 conversaciones. Más de la mitad de las veces, los representantes de los pacientes, y no el médico, propuso hablar del tema, según publica el equipo en JAMA Internal Medicine. A menudo mencionaban sus creencias, prácticas o comunidades, que el médico es un instrumento divino para curar o que la muerte es el inicio de una nueva vida. Los médicos solían redireccionar la conversación a temas clínicos, derivaban a los representantes de los pacientes a otros profesionales del hospital o expresaban empatía, pero muy rara vez hacían más preguntas sobre la religión del paciente o conversaban sobre sus propias creencias. "Sin importar si el paciente tiene capacidad de tomar decisiones, los médicos deberían tratar de determinar si las creencias religiosas y espirituales influyen en el tipo de atención que consideren que respeta al paciente como individuo", dijo White. "Además, muchos familiares de los pacientes críticos encuentran paz en sus creencias, por lo que sería útil que los médicos lo sepan para contenerlos mejor", añadió. White señaló que los médicos no abordarían estas cuestiones aun cuando lo propongan los familiares. Opinó que cuando un paciente manifiesta una preocupación espiritual, los profesionales de la salud podrían simplemente empezar a hacerle preguntas y escuchar con atención. Que el médico comparta sus creencias religiosas dependerá de cada situación y en esas conversaciones, según explicó, no existen las respuestas correctas o incorrectas. La doctora Tracy A. Balboni y su equipo, del Instituto de Oncología Dana-Farber, en Boston, escriben en un editorial sobre el estudio: "Nuestros pacientes y sus familias, que enfrentan enfermedades graves, suelen convivir con la soledad espiritual en el entorno hospitalario". "Los profesionales de la salud a cargo no tienen en cuenta las creencias para el bienestar de los pacientes y las decisiones clínicas. La pregunta sigue abierta: ¿los que cuidamos a las personas que se están por morir y a sus familias aprenderemos cómo estar presentes y escuchar?", finalizaron. FUENTE: JAMA Internal Medicine, 31 de agosto del 2015