La foto que revela cuánto ha cambiado el círculo cercano de Donald Trump en siete meses de gobierno

Con la salida este viernes del polémico estratega de la Casa Blanca Steve Bannon se confirma algo que hace un buen tiempo viene preocupando a la opinión pública: trabajar con Donald Trump resulta jugar con fuego, o simplemente el mandatario ha escogido muy mal a sus funcionarios más cercanos.

Si partimos de una imagen hecha pública por el pasado 28 de enero, justo una semana después de la toma de posesión de Trump en Washington y durante la primera llamada del presidente a su homólogo ruso Vladimir Putin, para luego compararla con el panorama actual, tendremos una idea más completa del total cambio de rostro que ha sufrido el gobierno de Estados Unidos.

En esta foto de archivo del 28 de enero de 2017, el presidente Donald Trump aparece acompañado por el Jefe de Gabinete Reince Priebus (el segundo de la izquierda), el vicepresidente Mike Pence, el asesor de seguridad nacional Michael Flynn, el asesor principal Steve Bannon y el secretario de prensa de la Casa Blanca Sean Spicer, mientras habla por teléfono con el presidente ruso, Vladimir Putin, en la Oficina Oval de la Casa Blanca en Washington. (Foto de AP / Andrew Harnik)

En aquella imagen aparecían, además de Trump, su vicepresidente Mike Pence, su jefe de gabinete, Reince Priebus, el Secretario de Prensa de la Casa Blanca, Sean Spicer, el Asesor de Seguridad Nacional, Michael Flynn, y el estratega jefe, el polémico Bannon, cuyas ideas ultras de agitador de la extrema derecha y su trabajo en Breitbart News, una publicación digital difusora de movimientos supremacistas, lo habían situado en la mira de muchos.

Esta última semana, el nombre de Bannon volvió a ser muy mencionado, a raíz de los incidentes racistas que se produjeron en Charlotesville, Virginia, del repudio generalizado contra el auge de los grupos supremacistas blancos, el Ku Kux Klan y las organizaciones neonazis en el país, y la tibia respuesta que Trump le dio a esta perniciosa escalada.

A Bannon se le ha considerado desde hace siete meses como el ‘embajador’ del movimiento “alt-right” o derecha alternativa en el núcleo duro del poder en Estados Unidos.

Pues al parecer se va cerrando el círculo. De aquella foto tomada en la Sala Oval, el primero que desapareció, menos de un mes después de la toma de posesión del presidente republicano, fue el Teniente General Michael Flynn, luego de que investigaciones de la contrainteligencia del Departamento de Defensa descubrieran que había mantenido vínculos y comunicaciones con funcionarios rusos, sobre todo con el entonces embajador en Washington, Serguéi Kislyak.

Otro de los personajes presentes aquel día alrededor de Trump fue Sean Spicer, su primer Secretario de prensa, quien el pasado 21 de julio anunció su dimisión, luego de seis arduos meses de amenazas a los periodistas que cubren las labores del gobierno y de expresiones fuera de tono.

Su salida voluntaria habría respondido a su inconformidad con el nombramiento de Anthony Scaramucci como nuevo Director de Comunicaciones de la Casa Blanca. ​El mismo Scaramucci no duró ni siquiera diez días en el cargo.

El otro funcionario que estuvo en aquella foto pero que ya no pisa la Casa Blanca es el jefe de gabinete de Trump, Reine Priebus.

Al asumir su cargo, Scaramucci habría ventilado ante la prensa su teoría de que Priebus había bloqueado durante cinco meses su llegada a la Casa Blanca. También acusaba a Priebus de ser el responsable mayor de la preocupante cadena de filtraciones a la prensa de informaciones comprometedoras del gobierno.

Y así han transcurrido estos primeros siete meses de la era Trump: de la imagen en la que seis hombres serios trabajan, solo quedan el inquilino de la Casa Blanca, un magnate neoyorkino llamado Donald John Trump que llegó a ser el presidente número 45 de Estados Unidos, y su vicepresidente Mike Pence.