La foto que ayudó a una niña con espina bífida a descubrir la belleza de su cicatriz

A sus 6 años de edad, Emily no había visto nunca la cicatriz que tiene en su espalda, como resultado de una cirugía a que fue sometida cuando era bebita.

La niña tiene espina bífida, una condición que la ha dejado paralizada desde las rodillas hacia abajo. Pero ahora, gracias al proyecto de la fotógrafa Grace Elizabeth, Emily no solo ha podido satisfacer su curiosidad, sino también ver la huella que su llegada al mundo dejó en su madre, Jenny,

Jenny había aceptado participar en ‘The Gold Dust Project‘, cuyo objetivo es celebrar la belleza de las cicatrices y estrías que les quedan a las mujeres cuando se convierten en madres.

Grace Elizabeth Photography/Vía HuffPost UK
Grace Elizabeth Photography/Vía HuffPost UK

Grace contó que pese a la corta edad de Emilia, la niña entendió lo que estaba tratando de hacer con el proyecto y supo que su cicatriz la convertía en un sujeto ideal.

“Emilia giró sobre su trasero cuando llegué para tomar fotos (ella había estado preguntando ansiosamente a su madre ‘¿cuándo vendrá la fotógrafa?’) Y estaba tan emocionada con el proyecto, ya que nunca antes había visto su cicatriz adecuadamente, debido a su ubicación incómoda”, relató la fotógrafa.

“Entonces, le eché un poco de pintura dorada, y tomé esta foto para mostrarle cómo era. Su reacción fue increíble, y fue uno de los sentimientos más increíbles, verla tan orgullosa de su cicatriz y mostrarla”, agregó.

“De hecho, estoy tan orgullosa de haber escuchado que a Jenny le ha costado conseguir que se bañe para lavarse la cicatriz”.

Grace Elizabeth Photography/Vía HuffPost UK
Grace Elizabeth Photography/Vía HuffPost UK

Las sesiones de fotografía de los cuerpos posparto comenzaron hace dos años, después de haber completado su disertación para su título de fotografía sobre la objetivación de las mujeres.

“Siempre he sido un amante de la aceptación de nuestros cuerpos, aunque puedo admitir que, a los 22 años, todavía lucho con los míos”, explicó. “Hubiera hecho cualquier cosa por tener una hermana mayor o un icono femenino para hacerme comprender que lo ‘normal’ no es lo que se describe en las revistas de moda o en las publicaciones de Instagram”.

Y asegura que ha podido comprobar cómo todas las mujeres, después de parir, tienen problemas con su imagen corporal.

Grace Elizabeth Photography/Vía HuffPost UK
Grace Elizabeth Photography/Vía HuffPost UK

“Ya sea un comentario fugaz como ‘¿puedes sacar mi papada con el photoshop?’ o ‘¡oh, terminé con tantas barriguitas desde que estaba embarazada, mejor las cubro!’, la realidad es que esas frases realmente se quedaron en mi mente y estaba claro que también se quedaron atrapadas en las mentes de las mujeres que había fotografiado”, relató.

“Me sorprendió ver que muchas de estas mujeres habían tenido experiencias difíciles con sus embarazos o tenían connotaciones negativas con respecto a sus cicatrices y estrías, y sin embargo, a pesar de eso, apoyaban la idea de llamar la atención sobre esas cosas y celebrarlas”, añadió.

Grace Elizabeth Photography/Vía HuffPost UK
Grace Elizabeth Photography/Vía HuffPost UK

De todas las fotografiadas, sin embargo, la historia de Emilia fue probablemente la que más la conmovió.

“¡Ver su reacción fue increíble! Estaba tan orgullosa de su pequeña cicatriz, y tuvo que mostrársela a su familia”, finalizó.