El próximo líder de la Cámara de Representantes podría ser alguno de estos tres legisladores republicanos

Tras la destitución de Kevin McCarthy, varios líderes están en la contienda por ser el nuevo presidente de la Cámara Baja. Estos son los candidatos más fuertes, hasta ahora.

Cuando solo habían transcurrido pocas horas desde la destitución del representante Kevin McCarthy como presidente de la Cámara de Representantes, la competencia entre los políticos republicanos que aspiran a sucederlo ya había comenzado.

El segundo líder republicano de la Cámara de Representantes, el representante por Luisiana Steve Scalise, ha empezado a hacer contactos telefónicos para conseguir apoyos para el puesto, al igual que un conocido conservador, el representante por Ohio Jim Jordan, quien preside el Comité Judicial.

Kevin Hern, quien es representante por Oklahoma y presidente del Comité de Estudio Republicano, también ha hecho llamadas para manifestar su interés por el cargo.

Otros nombres han salido a relucir, incluido el representante Patrick T. McHenry, experto en las políticas conservadoras de Carolina del Norte que se desempeña como portavoz interino, a quien algunos republicanos están tratando de reclutar. Y algunos legisladores de extrema derecha han prometido nominar al expresidente Donald Trump, puesto que no es necesario que quien presida la Cámara de Representantes forme parte de esa institución como un miembro electo.

A continuación, presentamos a los principales aspirantes, hasta el momento:

Steve Scalise, representante por Luisiana

Como líder de la mayoría de la Cámara, Scalise, de 57 años, es el favorito entre muchos republicanos para suceder a McCarthy.

Scalise, exlíder del Comité de Estudio Republicano, es considerado como un líder más conservador que McCarthy, con quien tuvo una relación algo distante. Y ya está buscando el apoyo de un poderoso congresista. Tom Emmer, representante por Minnesota y oficial disciplinario republicano, ha respaldado a Scalise y espera ocupar el segundo puesto de la mayoría, según personas familiarizadas con el tema.

Pero Scalise, quien ha trabajado en el Congreso desde 2008, enfrenta algunos desafíos. Le diagnosticaron cáncer de sangre durante el verano y ahora está recibiendo un tratamiento intenso, lo que lo ha obligado a utilizar una mascarilla para poder asistir a la Cámara durante las votaciones y en las conferencias de prensa. Y en 2017, durante un entrenamiento para un partido de béisbol del Congreso, un extremista anti-Trump efectuó unos disparos e hirió a Scalise de manera grave. El legislador todavía cojea debido a las heridas que sufrió en ese incidente.

En 2014, tuvo que disculparse públicamente por haber participado en una reunión de nacionalistas blancos celebrada en 2002, diciendo que no habría asistido si hubiera estado mejor informado sobre el grupo. Una reportera política radicada en Luisiana dijo más tarde que Scalise se había descrito “como David Duke, pero sin el equipaje”, refiriéndose al exmiembro del Ku Klux Klan y supremacista blanco que también era un político de Luisiana.

Sin embargo, Scalise cuenta con el respaldo de algunos legisladores republicanos tradicionales. Horas después del derrocamiento de McCarthy, el representante por Texas Tony Gonzales publicó una declaración a favor de Scalise en redes sociales.

“En este momento… Steve es el hombre correcto para liderar nuestro país”, escribió.

Jim Jordan, representante por Ohio

Jordan, de 59 años, es visto como uno de los legisladores más conservadores del Congreso. Ha sido un gran crítico de los presidentes anteriores y es cofundador del ultraconservador House Freedom Caucus, además es el mentor de muchos de los representantes más jóvenes y ruidosos.

Pero Jordan, quien ha estado en el Congreso desde 2007, también ha ascendido en las filas del liderazgo en los últimos años, convirtiéndose en aliado de McCarthy y siendo nombrado presidente del Comité Judicial.

Jordan es un aliado cercano de Trump, con quien habla con frecuencia. Ha sido su principal defensor en el Capitolio, y ha utilizado su comité para tratar de intervenir en los numerosos casos legales del exmandatario.

Jordan, quien fue campeón de lucha libre en su juventud, también ha sido acusado de no actuar ante las denuncias de abusos sexuales cometidos hace décadas por un médico de la Universidad Estatal de Ohio. Jordan ha negado esos señalamientos.

Los legisladores de derecha anunciaron rápidamente su apoyo a Jordan.

El representante Thomas Massie, un republicano de Kentucky con influencias libertarias, calificó a Jordan como su “primera opción”. Matt Gaetz, el representante por Florida que dirigió la campaña para derrocar a McCarthy, escribió en la plataforma de redes sociales X: “¡Mi mentor, Jim Jordan, sería genial!”.

El miércoles en la mañana, Jordan asistió a un almuerzo con una delegación de varios miembros del Partido Republicano de Texas, donde les habló de su candidatura.

“Creo que puedo unir a la base conservadora, al partido y a la conferencia”, dijo. “Por eso me estoy postulando”.

Kevin Hern, representante por Oklahoma

Hern, de 61 años, ha legislado en el Congreso desde 2018 y es el presidente del conservador Comité de Estudio Republicano.

Es un próspero empresario que comenzó su carrera dirigiendo varias franquicias de McDonald’s.

Después del derrocamiento de McCarthy, comenzó a hacer llamadas para evaluar el apoyo de su candidatura y habló al respecto en la cadena Newsmax. Dijo que el pueblo estadounidense “quiere resultados reales, y creo que podría lograrlos si la gente quiere ponerme en ese cargo”.

Sin embargo, podría enfrentar una dura campaña contra contendientes más conocidos como Scalise y Jordan.

Hern no confirmó definitivamente que se postulará el miércoles, pero dijo que “la gente me ha estado preguntando por alguien con un rostro distinto, alguien que tenga un conjunto de experiencias diferente” que los demás aspirantes que ya contienden por el cargo.

“Así que vamos a hablar sobre eso y veremos cómo evoluciona”, dijo.

Luke Broadwater cubre el Congreso. Fue el reportero principal de una serie de artículos de investigación en The Baltimore Sun que ganaron un Premio Pulitzer y un Premio George Polk en 2020. Más de Luke Broadwater

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