Con su mejor jugador fuera y envueltos en una mala racha, el Heat busca soluciones para salir a flote en la gira
Un duro trabajo le espera al Heat (3-5) para cortar una racha de tres derrotas consecutivas.
Le viene un rival que pasa por un buen momento, los Timberwolves de Minnesota (6-3), el domingo (7 p.m. TV: Sun. Radio WQAM 560, WAQI 710, con José Pañeda y Joe Pujala) en el Target Center, en Minneapolis.
El entrenador del conjunto de Miami Erik Spoelstra sabe que las cosas no marchan como quisiera.
Es cierto que el Heat viene de perder frente a equipos con verdaderos “monstruos” que hicieron la diferencia como Kevin Durant y Nikola Jokic en sus dos primeros partidos de su gira de seis.
“Tenemos que ser mucho mejores”, exclamó Spoelstra tras la derrota 135-122 contra los Nuggets, la noche del viernes en Denver. “Nos viene una dura serie de encuentros”.
Pese a las tres derrotas seguidas el estratega de los surfloridanos no se siente descorazonado y, todo lo contrario, expresa su deseo de impulsar a sus pupilos para ratificar la tradición ganadora de la franquicia.
“Esta es la parte que uno tiene que amar”, prosiguió Spoelstra.
“Cómo podemos afrontar el desafío, cómo podemos unirnos y cómo podemos empujar juntos para hacernos merecedores al triunfo”.
Para colmo, en los primeros minutos del partido en Denver, el astro Jimmy Butler se torció el tobillo y fue descartado para el encuentro contra los Timberwolves.
Si bien Butler estará fuera, uno que pudiera regresar y debutar el domingo en la temporada es Kevin Love, quien no está en el informe de lesiones.
El centro suplente de Miami se perdió los primeros cinco juegos por razones personales y los tres restantes para volver a recuperar su forma.
También pudiera volver Jaime Jáquez Jr., ausente en los últimos tres choques por una enfermedad estomacal. Su estatus es cuestionable.
Los jugadores de Heat tienen claro que deben mejorar y superar todos los escollos que se presentan en el camino para no quedar rezagados.
Es cierto que el partido contra los Nuggets era una prueba superexigente. Bastará decir que en sus ocho visitas anteriores a Denver, el Heat había perdido y que en la noche del viernes Jokic estuvo monumental con un triple doble.
El serbio anotó 30 puntos, dio 14 asistencias y tomó 11 rebotes.
Con el aporte de sus compañeros Jamal Murray (28 puntos) y Michel Porter Jr. y Christian Braun, con 21 cada uno, sumaron 100 unidades y con ello pavimentaron la victoria de los Nuggets.
Tyler Herro con 24 unidades se convirtió en el mayor anotador de Miami por tercer partido al hilo, pero todos ellos terminaron en derrota.
El equipo surfloridano aportó velocidad y esfuerzo.
Duncan Robinson encestó seis triples y sumó 20 cartones al igual que Bam Adebayo; Terry Rozier y Haywood Highsmith consiguiern 15 puntos cada uno; y Nikola Jovic 11 y Josh Richardson 10.
Aquello no bastó, sin embargo, al Heat para superar la potencia de los Nuggets ni para ganar.
“El grupo tiene que reencontrarse con el triunfo”, afirmó Robinson.
“Contra Denver tuvimos algunos buenos momentos defensivos. Debemos aprender a ganar. Contamos con los jugadores que lo han hecho antes. Aunque eso no se va a producir de manera automática”.
En efecto, cuando hay derrotas se empieza a rascar el fondo de la olla para buscar soluciones.
¿Qué le pasa al Heat en el tercer cuarto? El equipo de Miami espera solucionarlo en esta larga gira
Y así ocurre con Spoelstra, quien el segundo tiempo el viernes utilizó mucho más a Highsmith que a Jovic y también dio más oportunidades a Rozier y Richardson.
La idea del estratega del Heat era clara: oponer velocidad a la potencia de Denver, y en algún momento del encuentro aprovechando unos tres minutos de descanso que le dieron a Jokic los surfloridanos anotaron 10 puntos sin respuesta y se pusieron muy cerca en la pizarra.
El problema fue que volvió el serbio al tabloncillo y con misiles de triples los Nuggets vulneraron el fortín que había establecido el Heat y así pudieron consolidar un triunfo por 13 puntos de diferencia.
“Hay que mantenernos unidos”, replicó Adebayo como solución para superar esta racha adversa.
“En estos casos el equipo se resquebraja, cada uno trata de encontrar soluciones por su cuenta con la idea de hallar la receta del éxito. En nuestro caso debemos estar unidos para bien o mal. Nuestro núcleo siempre ha enfrentado adversidades’’.