Juez federal aplaza prohibición de Florida sobre la atención médica de afirmación de género para algunos menores

Gente sosteniendo carteles durante una reunión conjunta de la Junta de Medicina de la Florida y la Junta de Medicina Osteopática de la Florida el viernes 4 de noviembre de 2022, en Lake Buena Vista, la Florida, para establecer nuevas directrices que limiten la atención de afirmación de género.

Un juez federal ordenó el martes a la Florida que deje de aplicar sus prohibiciones sobre la atención de afirmación de género para jóvenes transgénero para algunos padres que impugnaron las reglas.

La sentencia se deriva de una demanda presentada inicialmente contra las juntas médicas estatales y el secretario de Salubridad Joseph Ladapo por un grupo de padres de la Florida y sus hijos transgénero. Los demandantes modificaron la demanda en mayo para solicitar una medida cautelar sobre el proyecto de ley que el gobernador Ron DeSantis promulgó como ley, incluyendo las restricciones de las juntas médicas en el estatuto.

En virtud de la medida cautelar, tres de los siete padres que impugnaron la prohibición pueden acceder a la atención médica para sus hijos transgénero, mientras que la refutación legal general continúa. En la orden judicial, el juez federal de distrito Robert Hinkle afirmó que es probable que los padres ganen el caso.

Los demandantes alegaron que las prohibiciones, que entraron en vigor en marzo y mayo, infringen la cláusula de igualdad de protección de la 14ta Enmienda porque singularizaban a los niños transgénero, impidiéndoles obtener la atención médica necesaria. Según la demanda, las prohibiciones también negaban a los padres el derecho a tomar decisiones médicas por sus hijos.

Las restricciones de las juntas de Medicina y Medicina Osteopática de la Florida prohibieron a los médicos recetar bloqueadores de la pubertad, terapias hormonales y operaciones para tratar a nuevos pacientes menores de 18 años con disforia de género. Los niños que ya tomaban estos medicamentos estaban amparados por la ley y podían seguir recibiendo atención médica.

El proyecto de ley que firmó DeSantis, el SB254, prohibía el tratamiento de menores con disforia de género y obligaba a las juntas a establecer normas de emergencia para que los niños que ya recibían atención pudieran seguir haciéndolo.

La clave

En una orden de 44 páginas por la que se dicta una medida cautelar contra las prohibiciones, Hinkle dijo que había que señalar la clave del asunto: que “la identidad de género es real”. Dijo que la “sugerencia tácita que corre justo bajo la superficie” que llevó a la adopción de las prohibiciones es que la identidad transgénero no es real y criticó a algunos de los expertos del estado por respaldar eso.

“Cualquiera que proponga el estatuto y las normas impugnadas debería hablar o callar: ¿reconoce que hay personas con identidad de género real opuestas a su género de nacimiento, o no?”, escribió Hinkle. “No deberían tolerarse los mensajes políticos en clave”.

Hinkle también afirmó que el estatuto y las normas toman “la misma decisión para todo el mundo, sin tener en cuenta las circunstancias individuales de ningún paciente”, en lugar de permitir que los pacientes y sus médicos evalúen los riesgos y beneficios del tratamiento médico.

En su fallo, rechazó la alegación del estado que las organizaciones profesionales que apoyan el tratamiento médico de la disforia de género son parciales.

“El estatuto y las normas fueron un ejercicio de política, no de buena medicina”.

Mencionó que la experiencia común confirma que hay intolerancia hacia las personas transgénero, haciendo referencia a cuando el representante Webster Barnaby, republicano de Deltona, llamó en abril a los miembros transgénero del público en una reunión de comité “mutantes” y “demonios”.

Los portavoces de DeSantis y del Departamento de Salud de la Florida no respondieron de inmediato a las solicitudes de declaraciones.

Los grupos que presentaron el caso, Southern Legal Counsel, GLBTQ Legal Advocates & Defenders, el National Center for Lesbian Rights y la Human Rights Campaign, emitieron una declaración conjunta.

“El fallo de hoy es una poderosa afirmación de la humanidad de las personas transgénero, de la eficacia de una atención médica bien establecida y basada en la ciencia y de los derechos de los padres a tomar decisiones con conocimiento sobre la atención médica de sus hijos”, afirmaron los grupos. “El tribunal reconoció el profundo daño que el estado de la Florida está causando al obligar a los padres a ver sufrir a sus hijos en lugar de proporcionarles una atención segura y eficaz que les permita prosperar. Estamos increíblemente aliviados de que estos padres de la Florida puedan seguir recibiendo asistencia médica para sus hijos mientras procedemos a impugnar estas prohibiciones y, finalmente, verlas totalmente anuladas”.

El Departamento de Salud presionó a las juntas médicas

Las juntas médicas iniciaron el proceso de elaboración de normas el pasado mes de agosto, después que el Departamento de Salud del estado, dirigido por Ladapo, los exhortó a ello. El organismo argumentó que no existían pruebas que la atención que afirmaba la identidad de género fuera eficaz.

Las prohibiciones contradecían las directrices ampliamente aceptadas y vigentes publicadas por la Academia de Pediatría de Estados Unidos, la Sociedad de Endocrinología, organización médica mundial, y la World Professional Association for Transgender Health, grupo internacional dedicado al tratamiento de la disforia de género.

Los demandantes anónimos, que usan seudónimos, son siete madres y sus hijos transexuales, de entre 8 y 14 años, de los condados Alachua, Duval, Lee, Miami-Dade, Orange y St. Johns.

En los documentos judiciales, la madre del Condado St. Johns dijo que su esposo está destacado en la Florida como oficial superior de la Marina. Las restricciones los colocan en “una posición insostenible”, dijo, porque no pueden trasladarse a otro estado “donde los derechos de los padres sean realmente respetados y defendidos”.

Su hija transgénero de 11 años no puede empezar a tomar bloqueadores de la pubertad debido a la prohibición.

“Nos preocupamos a diario por lo que le ocurrirá a nuestra hija, sana, feliz y próspera, si la obligan a pasar por lo que ella ha descrito como su peor pesadilla: convertirse en algo que no es”, declaró la madre. “’Tortura’ es la única palabra que he identificado para describir adecuadamente los sentimientos de terror que experimenta un padre en una situación como esta”.

La madre del Condado Lee dijo en los documentos judiciales que programó una cita en marzo en el Hospital Infantil Johns Hopkins para su hijo transgénero de 8 años. Esa mañana llamó para confirmar la visita. Le dijeron que la clínica de St. Petersburg no atendía a nuevos pacientes debido a las reglas de la junta.

“Esta información nos sorprendió a mi esposo y a mí”, dijo. “No sabíamos que era posible que se impidiera a los médicos evaluar y prescribir tratamientos médicos que pudieran necesitar nuestros hijos”.

En virtud de la medida cautelar, ambos padres pueden solicitar atención médica para sus hijos.

DeSantis, quien recientemente anunció su campaña para presidente, ha aprovechado los temas de género y los proyectos de ley que firmó que limitan la autonomía de los jóvenes LGBTQ+ frente a multitudes socialmente conservadoras.