Johnson refuerza su control sobre el Gobierno de Reino Unido, dimite el ministro de Economía

Por Elizabeth Piper y Kylie MacLellan

LONDRES, 13 feb (Reuters) - El ministro de Economía de Reino Unido, Sajid Javid, renunció el jueves de forma inesperada, poniendo de manifiesto el deseo del primer ministro Boris Johnson de afianzar su control sobre el Gobierno al deshacerse de un ministro que se negó a seguir puntualmente sus dictados.

Queriendo minimizar cualquier interrupción en la reorganización de su gabinete, Johnson nombró rápidamente para el cargo al segundo de Javid, Rishi Sunak, un leal partidario del primer ministro que a menudo ha comparecido ante las cámaras para defender la política del Ejecutivo.

El equipo de Johnson ha coreografiado cuidadosamente la remodelación, presentándola como una oportunidad para fomentar nuevos talentos, especialmente entre las mujeres, y al mismo tiempo recompensar a sus partidarios más leales para hacer realidad su visión de Reino Unido después del Brexit.

Pero la renuncia del ministro de Economía debido a una disputa sobre los asesores de Javid, que algunos comentaristas dijeron que podría haber sido provocada por el equipo de Johnson, añadió el mensaje de que el primer ministro no tolerará la disidencia en su Gobierno.

"Ha rechazado al cargo de canciller del Tesoro (ministro de Economía)", dijo una fuente cercana a Javid.

La fuente dijo que Johnson le había comunicado a Javid que tendría que despedir a sus asesores y sustituirlos por otros procedentes de la oficina del primer ministro en Downing Street. "El canciller dijo que ningún ministro que se precie aceptaría esos términos".

No se esperaba que Johnson cambiase los puestos más importantes de su Gobierno, pero muchos interpretaron los cambios en el orden inferior de la escala de gobierno como una señal de que quiere reforzar su control del poder.

Su despido del ministro para Irlanda del Norte, Julian Smith, quien hace tan sólo un mes había ayudado a negociar la restauración la asamblea electa de la región, provocó críticas de los políticos ambos lados de la frontera con Irlanda.

Smith, que había estado a cargo de la disciplina parlamentaria de la predecesora de Johnson, Theresa May, fue el primer ministro en perder su puesto tras la reestructuración del Gobierno británico. Posteriormente se le han la ministra de Negocios, Andrea Leadsom, y la ministra de Medioambiente, Theresa Villiers.

CAOS

El ultraleal Alok Sharma, exministro de Desarrollo Internacional, fue nombrado nuevo ministro de Negocios y también jefe de la cumbre sobre el cambio climático COP26, cuando los líderes mundiales se reúnan en Escocia en noviembre.

Pero fue el movimiento de Javid el que desfiguró el aspecto de "business as usual" que Johnson había querido darle a la operación.

Los ayudantes de Johnson habían restado importancia con anterioridad a las sugerencias de que habría cambios importantes en el Gobierno, basadas en el deseo hecho público del asesor principal de Johnson, Dominic Cummings, de ver una reorganización radical en el ejecutivo.

A última hora de la noche de ayer, una fuente de su oficina dijo que el primer ministro quería que la "reorganización sentara las bases del Gobierno ahora y en el futuro" y que promoviera nuevos talentos, en particular a las mujeres.

Era evidente que la lealtad era esencial para Johnson a fin de poder cumplir con su agenda y con las promesas que hizo en el período previo a las elecciones del 12 de diciembre, en las que obtuvo una gran mayoría.

Pero los políticos de la oposición dijeron que la reorganización era un desastre.

"Este es un récord histórico. Un Gobierno en caos pocas semanas después de las elecciones", dijo John McDonnell, portavoz económico del principal partido de la oposición, el Partido Laborista.

"Está claro que Dominic Cummings ha ganado la batalla para tomar el control absoluto del Tesoro y ha instalado a su títere como Canciller".

(Información adicional de William James; editado por Gareth Jones y Stephen Addison; traducido por Darío Fernández en la redacción de Gdansk)