Cinco japoneses salen ilesos de un ataque suicida contra su vehículo en Pakistán

Agentes de policía hacen guardia junto al escenario de un ataque suicida en Karachi, Pakistán, el 19 de abril de 2024. (AP Foto/Fareed Khan)

KARACHI, Pakistán (AP) — Un suicida detonó el viernes un chaleco cargado de explosivos cerca de una camioneta que trasladaba a trabajadores japoneses del sector automotriz, que salieron ilesos del ataque en el que tres transeúntes resultaron heridos en Karachi, una ciudad portuaria de Pakistán, dijo la policía.

La camioneta se dirigía a una zona industrial donde los cinco japoneses trabajaban en Pakistan Suzuki Motors, explicó el jefe de la policía local, Arshad Awan. Los agentes que escoltaban al grupo devolvieron el fuego tras ser atacados y mataron a un cómplice del suicida, cuyos restos fueron encontrados en el lugar del incidente.

“Todos los japoneses que fueron objetivo del ataque están a salvo", agregó.

El presidente de Pakistán, Asif Ali Zardari, y el primer ministro, Shehbaz Sharif, condenaron el atentado. En comunicados separados, elogiaron a las fuerzas policiales por su rápida respuesta y por haber frustrado el ataque. Además, se comprometieron a erradicar el terrorismo y rezaron por la rápida recuperación de los heridos.

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Las imágenes emitidas en medios locales mostraban el vehículo dañado mientras la policía llegaba al lugar tras el ataque. Según Awan, los tres transeúntes heridos estaban estables en un hospital.

La policía escoltaba la camioneta tras recibir reportes sobre posibles ataques a ciudadanos extranjeros que trabajan en Pakistán en distintos proyectos financiados por China y otros, apuntó Tariq Mastoi, un alto cargo policial. La oportuna y rápida respuesta de los guardas y de la policía frustró el ataque y los dos agresores fueron abatidos.

Ningún grupo se atribuyó de inmediato la autoría del atentado, pero las sospechas podrían recaer en un pequeño grupo separatista o en el Talibán paquistaní, que ha intensificado sus ataques contra las fuerzas de seguridad en los últimos años. Los insurgentes han atentado también contra ciudadanos chinos que trabajan en el país en proyectos relacionados con el Corredor Económico China-Pakistán, que incluye multitud de megaproyectos como la construcción de carreteras, centrales eléctricas y agricultura.

En marzo, cinco ciudadanos chinos y su conductor paquistaní perdieron la vida en el noroeste del país cuando un suicida estrelló su auto cargado de explosivos contra el vehículo en el que se dirigían a la represa de Dasu, el mayor proyecto hidroeléctrico de Pakistán, donde trabajaban.

Los japoneses que trabajan en Pakistán no habían sido objetivo de ninguno de estos incidentes.

Karachi es la ciudad más grande de Pakistán y la capital de la provincia sureña de Sindh.