Israel inviste a su nuevo jefe del Ejército en un clima de tensión

Jerusalén, 16 ene (EFE).- Herzi Halevi se convirtió este lunes en el nuevo jefe del Estado Mayor de las Fuerzas de Defensa de Israel, en medio de un pico de violencia en Cisjordania ocupada y en un momento en que el Ejército enfrenta presiones políticas del nuevo Gobierno, el más derechista de la historia de Israel.

"Vivimos gracias a las Fuerzas de Defensa de Israel. Sin ellas, no hay existencia", dijo el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, previo a la ceremonia de investidura, según informó su oficina en un comunicado.

Halevi, que sucede a Aviv Kochavi, dijo que se enfocará en mantener al Ejército "libre de cualquier otra consideración que no sea la seguridad”.

El nuevo Gobierno de Netanyahu enfrenta numerosas críticas después de que algunos de sus miembros más extremistas, como Bezalel Smotrich o Itamar Ben Gvir, abogaran por relajar las normas para abrir fuego contra palestinos y garantizar la inmunidad absoluta de los soldados y policías en el uso de la fuerza.

El ultranacionalista Smotrich, sin preparación militar y partidario de la mano dura con los palestinos y de la anexión de Cisjordania, es ministro de Finanzas pero además ostenta un cargo con rango de ministro dentro del Ministerio de Defensa.

Este cargo fue creado exclusivamente para él mediante una enmienda de una Ley Básica israelí y le permitirá dictar la política civil y la construcción y expansión de asentamientos en los territorios ocupados, algo que ha generado molestia entre miembros del Ejército.

Por otro lado, el extremista Ben Gvir, ministro de Seguridad Nacional, condenado en el pasado por incitación al racismo y apoyo a organización terrorista, cuenta con poderes reforzados sobre la Policía tanto en Israel como en Cisjordania, donde vive como colono.

"Para cada soldado y oficial hay un comandante por encima de todos, el jefe de Estado Mayor, el mando más alto del Ejército, subordinado al Ministro de Defensa", dijo hoy el nuevo titular de Defensa, Yoav Galant, durante la ceremonia de investidura de Halevi.

"Me aseguraré de que la presión externa -política, legal y de otro tipo- se detenga en mí y no llegue a las puertas de las Fuerzas de Defensa de Israel", añadió.

Halevi, que recientemente ha ejercido el puesto de jefe adjunto del Estado Mayor, asume su nuevo cargo en un momento en que el conflicto israelí-palestino vive un pico de tensión, que ha dejado 14 palestinos muertos -entre ellos cuatro menores- solo en lo que va de 2023.

La espiral de violencia prevalece en la zona desde que Israel lanzó en marzo pasado su operación "Romper la ola" tras una serie de ataques mortales por parte de palestinos y árabes israelíes.

Esa operación consiste en redadas cotidianas, casi siempre de noche y sobre todo en el área de Yenín y Nablus -bastiones de milicias palestinas-, que derivan en enfrentamientos armados y se saldan frecuentemente con muertes, muchas veces de civiles, y con arrestos de palestinos sospechosos de terrorismo.

El 2022 fue el año más letal en la zona desde 2006, con 170 palestinos muertos y 2.672 detenidos -según cifras oficiales- mientras del lado israelí 29 personas murieron en ataques.

(c) Agencia EFE