La intriga en ‘La viuda alegre’ ¿es por dinero o por amor?

Dos de los motivos más importantes del drama humano y también de la ficción, el dinero y el amor, animan esta comedia de enredos convertida en opereta: La viuda alegre, del compositor austriaco Franz Léhar.

Estrenada en Viena en Theater an der Wien el 30 de diciembre de 1905, La viuda alegre alcanzó fama internacional de inmediato. Quizás se debiera a su música memorable, o quizás a que sea muy alegre y divertida, y a su ambiente es el de París en la Belle Epoque. Se sigue representando a salas abarrotadas en todas partes y, por supuesto, siempre en Viena, que este año se escenificó ya el 10 de octubre y el 7 de noviembre en el teatro Volksoper Vienna.

Aquí podremos verla gracias a Marti Productions, una exitosa compañía sin ánimo de lucro, fundada y dirigida por la cantante Tania Martí desde hace 18 años. La viuda alegre se presentará el sábado 16 de noche y el domingo 17 de noviembre en la tarde, en el Teatro Manuel Artime.

“En su elenco brillarán la vedette y cantante cubana Maylú, en el papel principal de la viuda ultra millonaria Hanna Glawari, y su antiguo amor juvenil, el conde Danilo, interpretado por el tenor portorriqueño, Jesse James Vargas”, cuenta Tania Martí. “Y la soprano Laura de Mare hace de Valencienne, esposa del embajador en París del Gran Ducado de Pontevedro, el barón Nirko Zeta, interpretado por Jesús Braña, asistido por su secretario, Marcos Casanova. Aunque Valencienne tiene pretensiones amorosas hacia el conde Camille de Rosellón, interpretado por el tenor venezolano Carlos Silva”.

De ahí surge el conflicto que es múltiple y enredado, porque el barón Zeta está desesperado por casar a la viuda Hanna con alguien de Pontevedro, para que no se vaya fuera del pequeño país su gran fortuna heredada. “Por eso trata de juntarla con el conde Danilo, que ahora es un picaflor y está siempre en el famoso cabaret Maxim’s”, apunta Tania. “Por lo que Zeta no se fija mientras tanto en lo que anda su mujer Valencienne, que está coqueteando con el conde francés De Rosillon”. Y es este conde precisamente el que forma el enredo al escribir en un abanico de Valencienne “te quiero”, y contraer una cita amorosa con ella en una casa de verano.

“Pero dejemos que el director de la opereta Manny Albelo nos siga escenificando el argumento, a él no le gusta que yo cuente mucho”, dice Tania, “y usa un subterfugio en el escenario, un juglar que lo aclara todo, añadido al libreto, y actuado por Tania Guzmán, para poder resumir las tres horas y media de los tres actos, a solo dos horas y dos actos”.

Es lo que tan exitosamente desarrolló hace un año con la puesta de la zarzuela cubana Cecilia Valdés en el Miami Dade County Auditorium, al crear un diálogo ficticio entre el autor de la novela, Cirilo Villaverde, con Gonzalo Roig, el compositor de la zarzuela.

La música fluirá bajo la dirección de Marlene Urbay, con su orquesta de cámara, y los extraordinarios intérpretes de este elenco. El número que todos recordamos es “Vilja”, que Maylú entona en el segundo acto. Es aquí también donde ella invita a las bailarinas del “can can” de Maxim’s –el Gio Ballet- para entusiasmar al conde Danilo, del que sigue enamorada en secreto. “Es la fiesta en casa de Hanna que se transforma en el cabaret Maxim’s”, explica la productora.

¿Por qué se ha decidido Tania Martí a montar zarzuelas después de 18 años de espectáculos diversos, como la obra Los cuchillos de Atarés, con Rabassa, o Su Majestad el Danzón, con Luis Serrano, entre las que recuerdo? “Son más de 40 producciones, y todas son como un parto”, expresa Tania, “Fantasía española fue la primera, Las mujeres no saben decir adiós, Seis lindas cubanas, y muchas otras”.

“Hay un público que todavía añora la falta de Pro Arte Grateli y hay que aplaudir a Pili de la Rosa, Marta Pérez, Demetrio y Miguel de Grandy, hijo. Aprendí mucho de esas presentaciones”, asevera. “Siempre pensamos en llevar algo digno al escenario, aunque con una productora pequeña que piensa en grande”.

¿Y La viuda alegre? “Es un espectáculo, con escenografía de Leose, y una vedette cubana, cantante lírica, que se ha ganado la admiración en todo Miami y hace 15 años hizo La viuda alegre en el Anfiteatro de La Habana; es Maylú la que lo inspiró”.

También fue el amor a la zarzuela que tiene Tania Martí quien se inició como cantante y desde pequeña ya lo era. “Mi mamá me llevaba en mi fantasía infantil al Teatro Nacional en La Habana, a ver zarzuelas como Cecilia Valdés y yo aprendí a querer el género”, revela. “Salí de Cuba en 1968, y en 2019 hice mi primera producción de zarzuelas con Operetta Fantasy, donde debutó en Miami Laura de Mare”.

¿Con quién estudiaste canto? “Canté desde los cuatro años con mi mamá tocando el piano, Margot Presno, directora del Centro Escolar Teresa Cantón de San Antonio de las Vegas en la antigua provincia de La Habana. Con ella estudié hasta el tercer año de piano, y puedo leer las notas musicales”.

“Mis pininos los hice cuando estaba en el Instituto José Varona y me inscribí en un concurso de aficionados como una picardía, con el pasodoble ‘El sombrero’ ”, cuenta la cantante-productora. “Pero llegué a Estados Unidos en 1970, donde participé en el Segundo Festival de Canciones Latinoamericanas, con mi verdadero nombre Tania Díaz Pérez-Presno, y la Peer International me grabó el primer Monica Records en la ciudad de Nueva York, donde me bautizaron como Tania Martí, Augusto Monsalve de Chile, y Omar Marchant de Miami”.

Luego le pidió a Marta Pérez que la dejara cantar en Pro Arte Grateli, donde participó por fin en las zarzuelas. Pero por muchos años las ganancias le vinieron de trabajar en la banca. “Estoy retirada de la industria financiera”, asiente. ¿Y cómo aprendiste? “Antiguamente te daban ‘training’ desde un ‘tour’ en la reserva federal, para ver cómo funcionaba, hasta todo lo demás. Empecé como ‘teller’, luego ‘new accounts, savings and loan’, pero luego vino la quiebra de los ‘savings and loans’ y desapareció esa industria, y fui evolucionando hasta convertirme en lo que fue Citibank, como ‘Financial Representative’”.

Esto la ayudó a ser productora que requiere arte y conocimiento de los negocios. “Soy muy organizada”, afirma. ¿Cómo se consigue el dinero para pagar artistas, teatro, etc.? “Hay que solicitar grants del Condado de Miami Dade y del Estado de la Florida. Y depender de benefactores de las artes, como la doctora Aida Levitán, directora de ArtesMiami. Sin olvidar la taquilla del público, que siempre nos están llamando, lo que es muy lindo, que estén atentos a la cartelera de Marti Productions”.

“La viuda alegre”, Marti Productions, sábado 16 de noviembre, 8:15 p.m. y domingo 17 de noviembre, 4:15 p.m., Teatro Manuel Artime, 900 SW 1 St., Miami, Fl 33130. Reservaciones: (305) 220-2863, www.caroentertainment.com

Arreglos musicales de Otto KnightDirección de Voices of Miami, Greisel DomínguezBallet de Geo MinietEscenografia Leose Productions