La intriga por Kate Middleton: quién es Sarah Rose Hanbury, la mujer señalada como la amante del príncipe Guillermo
Los rumores sobre un presunto romance entre el príncipe Guillermo y Sarah Rose Hanbury se vienen gestando desde hace un tiempo, pero han alcanzado un nuevo nivel en los últimos meses tras la repentina desaparición de Kate Middleton de la vida pública.
La princesa de Gales se sometió a una cirugía abdominal en enero, pero el hermetismo que ha rodeado su cuadro de salud y su posterior recuperación ha despertado todo tipo de especulaciones. En ese contexto, revivió la hipótesis de que Kate estaría atravesando una grave crisis matrimonial, ocasionada justamente por un supuesto vínculo de su esposo con Hanbury, amiga de la pareja real.
Los rumores cobraron tanta fuerza que la propia Hanbury tuvo que salir a desmentirlos esta semana, una actitud inusual para un miembro de la nobleza británica. “Son completamente falsos”, se limitó a decir en un breve pero contundente comunicado que compartió con el medio Business Insider.
La amistad entre la pareja real y Hanbury supuestamente nació tras la oficialización del matrimonio de esta última con David Rocksavage, marqués de Cholmondeley y 23 años mayor que ella, y su mudanza al histórico Palacio de Houghton Hall, en Norfolk, a corta distancia, apenas unos 15 minutos en auto, de Sandringham, la casa de campo de la familia real británica.
Dos años más tarde, en 2011, los Cholmondeley asistieron a la boda real de Kate y Guillermo.
Los lazos se estrecharon cuando Guillermo y Kate comenzaron a pasar más tiempo en Anmer Hall, su mansión georgiana en la zona rural de Norfolk, y se unieron a un grupo selecto y aristócrata apodado por la prensa británica como “Turnip Toffs” o “Club del Nabo” –ya que todos poseen tierras donde se cultivan nabos–, al que también pertenece Hanbury, una exmodelo británica e hija de dos diseñadores.
Todo parecía marchar bien hasta que hace unos años comenzaron a hacerse públicas algunas rispideces entre las dos mujeres. En un primer momento, no se habló de infidelidad, pero sí de un quiebre en la amistad de Kate y Rose, a quien los medios británicos describen como “rebelde” y “descontracturada”.
En 2018, The Sun reportó que Kate le habría pedido a su marido que “elimine” a los Cholmondeley de su lista de amigos por una razón no especificada. “Kate ha dejado claro que ya no quiere verlos y quiere que Guillermo los elimine gradualmente a pesar de su estatus social”, escribió el periódico británico citando a una fuente anónima.
El primero en sugerir un posible romance entre Hanbury y el príncipe Guillermo fue el periodista británico Giles Coren, quien trabajó durante años para The Times informando sobre la realeza. “Todo el mundo sabe sobre la infidelidad”, publicó en 2018 en su cuenta del entonces Twitter, aunque más tarde borró el mensaje.
Pero el tema no escaló hasta que se involucró la prensa amarillista norteamericana. El sitio Radar publicó en 2019 un artículo que indicaba que Kate estaba celosa de su amiga porque creía que Guillermo coqueteaba con ella. Luego el tabloide In Touch llevó a su portada la historia, que tituló: “¡El príncipe William la engaña a Kate ¡con su amiga!”.
In Touch afirmó que a pesar de las negaciones de Guillermo, Kate le ordenó que dejara de socializar con los Cholmondeleys. Según la revista de chimentos, el escándalo “sacudió al palacio y a su matrimonio”.
Con el tiempo y la aparición de otros escándalos en la realeza británica –la ruptura de Meghan y Harry con la familia real o las acusaciones de abuso sexual contra el príncipe Andrés, por mencionar algunos–, los rumores sobre la supuesta infidelidad se aplacaron, aunque nunca dejaron de circular por completo. El año pasado, por ejemplo, el escritor especializado en realeza, Tom Quinn, publicó el libro Crecer en la familia real: un íntimo retrato sobre la juventud dorada en el que aseguró que después de más de una década de matrimonio y tres hijos en común, Guillermo y Kate podrían estar al borde de la ruptura.
De acuerdo con la versión de Quinn, los príncipes de Gales sólo se muestran cariñosos en actos públicos, mientras que su relación es mucho más fría en su vida privada. El libro también especulaba que podrían anunciar muy pronto el fin de su matrimonio, aunque eso no ha sucedido. El libro también mencionaba a Hanbury.
Conexiones reales
Nacida el 15 de marzo de 1983, Hanbury tiene sus propias conexiones reales: su abuela paterna fue dama de honor en la boda del príncipe Felipe y la reina Isabel II, en noviembre de 1947. Estudió en la Stowe School y luego obtuvo un título de la Open University.
Con 23 años, trabajó brevemente como modelo, contratada por la agencia Storm. De hecho, Rose apareció en los titulares por primera vez al posar con su hermana mientras vestía un bikini rosa en una foto con el primer ministro Tony Blair en 2005.
Tras dejar el mundo del modelaje, optó por un cambio radical en su faceta profesional al obtener un puesto como investigadora parlamentaria para el político conservador Michael Gove. Este capítulo de su carrera concluyó cuando decidió renunciar a su posición para dedicarse a la maternidad de sus gemelos, fruto de su matrimonio con el marqués de Cholmondeley, con quien más tarde tuvo una tercera hija.
Uno de sus gemelos, Oliver Timothy George, participó en la coronación del rey Carlos, en mayo pasado, como uno de los cuatro pajes que acompañaron al monarca en esa fecha trascendental. El príncipe Jorge era otro de ellos. Esa imagen revivió en las redes sociales en estas semanas, cuando los rumores sobre la familia de Kate y Guillermo se convertían en el tema preferido.