Israel ordena más evacuaciones en Jan Yunis después que EEUU bloquea pedido de alto al fuego
Por Bassam Masoud y Nidal al-Mughrabi
GAZA/EL CAIRO, 9 dic (Reuters) -Israel ordenó el sábado a los residentes que abandonaran el centro de Jan Yunis, y siguió bombardeando la Franja de Gaza, después de que Estados Unidos ejerciera su derecho de veto en el Consejo de Seguridad de la ONU para proteger a su aliado de la exigencia de un alto el fuego.
Desde el fracaso de la tregua la semana pasada, Israel ha ampliado su campaña terrestre a la mitad sur de la Franja de Gaza, adentrándose en Jan Yunis. Simultáneamente, ambas partes han informado de un importante aumento de los combates en el norte.
El portavoz israelí en lengua árabe publicó un mapa en la red social X en el que se señalaban seis manzanas numeradas de Jan Yunis que los residentes debían evacuar "urgentemente". Entre ellos había zonas del centro de la ciudad que no habían sido objeto de tales órdenes anteriormente.
Israel emitió advertencias similares antes de asaltar las zonas orientales de la ciudad y los residentes dijeron que temían que las órdenes de evacuación anunciaran un nuevo ataque.
"Puede que sea cuestión de tiempo que actúen también contra nuestra zona. Llevamos toda la noche oyendo bombardeos", dijo Zainab Khalil, de 57 años, desplazada con 30 de sus familiares y amigos en Jan Yunis, cerca de la calle Jalal, donde las tropas ordenaron a la gente que se marchara.
Ante la escasez de alimentos y suministros médicos, un funcionario del Programa Mundial de Alimentos de la ONU declaró que se estaba probando un nuevo sistema para introducir ayuda en Gaza a través del paso fronterizo de Kerem Shalom con Israel, lo que podría permitir aumentar las importaciones. Sin embargo, el Estado judío aún no ha accedido a abrir el paso.
La gran mayoría de los 2,3 millones de habitantes de Gaza ya se han visto obligados a abandonar sus hogares, y muchos han huido varias veces. Los combates se extienden por todo el territorio, por lo que los residentes y las agencias de la ONU afirman que ya no hay ningún lugar seguro al que ir, aunque Israel lo niega.
En Jan Yunis, los muertos y heridos llegaron durante la noche al desbordado hospital Nasser. Un médico salió corriendo de una ambulancia con el cuerpo inerte de una niña pequeña vestida con un chándal rosa.
Los niños heridos lloraban y se retorcían en el suelo de baldosas mientras las enfermeras corrían a consolarlos en el lugar. Afuera, en tanto, los cadáveres se alineaban en sudarios blancos.
Nassar y otro hospital del sur, al Aqsa en Deir al-Ballah, informaron de 133 muertos y 259 heridos en las últimas 24 horas, lo que eleva el número oficial de víctimas a casi 17.700, con muchos miles más desaparecidos y presuntamente fallecidos.
"Creemos que el número de mártires bajo los escombros podría ser mayor que los recibidos en los hospitales", declaró a Reuters el portavoz del Ministerio de Sanidad, Ashraf al-Qidra.
Los trabajadores médicos del norte de Gaza, donde se están produciendo algunos de los combates más intensos, acusaron a Israel de atacar hospitales y ambulancias.
Un trabajador de ambulancias del distrito de Shejaiya, en la ciudad de Gaza, dijo a Reuters que a menudo los equipos no podían responder a las llamadas de los heridos y que sus equipos eran objeto de fuego israelí, y pidió que no se publicara su nombre por temor a represalias.
El Dr. Mohammed Salha, director del hospital de al-Awda, dijo que las fuerzas israelíes habían asediado el lugar por días con tanques, disparando a la gente que intentaba entrar o salir. Según él, mataron a tiros a una mujer en la calle y a un trabajador del hospital que estaba junto a una ventana.
El Ministerio de Sanidad palestino declaró que las fuerzas israelíes habían matado a tiros el sábado a dos miembros del personal médico del hospital Kamal Odwan, también en el norte de Gaza.
El Hospital Médico Jaffa de Deir al-Balah, en el centro de la Franja de Gaza, dijo que había dejado de funcionar el viernes debido a los graves daños causados por el bombardeo israelí de una mezquita cercana.
Familias del norte de Gaza publicaban mensajes en Internet suplicando a los equipos de emergencia que se adentraran en la ciudad para rescatar a los seres queridos que seguían atrapados allí.
Un portavoz del Ejército israelí no respondió de inmediato a una solicitud de Reuters para comentar los informes de disparos contra ambulancias y hospitales. La fuerza ha acusado antes a Hamás de ocultar combatientes en instalaciones médicas.
EEUU, "CÓMPLICE" CON SU VETO
Estados Unidos utilizó el viernes su derecho de veto para rechazar la votación de 13 de los 15 miembros del Consejo de Seguridad de la ONU a favor de una resolución que pedía un alto el fuego humanitario inmediato. Gran Bretaña se abstuvo.
Israel lanzó su campaña para aniquilar a los líderes de Hamás en Gaza después de que los combatientes del grupo islamista apoyado por Irán irrumpieran en la valla fronteriza de Gaza el 7 de octubre, matando a 1.200 personas y capturando a 240 rehenes en un asalto a ciudades israelíes.
Washington dijo que ha pedido a Israel que haga más de lo que ha hecho hasta ahora para proteger a los civiles en la próxima fase de la guerra. Esta semana, el Secretario de Estado Antony Blinken dijo que había una "brecha" entre las promesas de proteger a los civiles y el resultado sobre el terreno.
Pero Washington ha seguido apoyando la insistencia de Israel en que un alto el fuego sólo beneficiaría a Hamás.
Ezzat El-Reshiq, miembro del buró político de Hamás, condenó el veto estadounidense por "inhumano". Mahmoud Abbas, presidente de la Autoridad Palestina, que perdió el control de Gaza ante Hamás en 2007, afirmó que el veto convertía a Estados Unidos en cómplice de los crímenes de guerra israelíes.
En tanto, el embajador de Israel ante la ONU, Gilad Erdan, afirmó en un comunicado: "Un alto el fuego sólo será posible con la devolución de todos los rehenes y la destrucción de Hamás".
La Casa Blanca dijo el viernes que Israel podía hacer más para reducir las víctimas civiles y que Washington compartía la preocupación internacional por la situación humanitaria en Gaza.
"Ciertamente, todos reconocemos que se puede hacer más para tratar de reducir las víctimas civiles", declaró a la prensa el portavoz del Consejo de Seguridad Nacional de la Casa Blanca, John Kirby.
(Información de Bassam Masoud y Salem Mohammed en Gaza, Nidal al-Mughrabi en El Cairo, Dan Williams, Emily Rose y Henriette Chacar en Jerusalén, Humeyra Pamuk y Simon Lewis en Washington, Michelle Nichols en Nueva York y las oficinas de Reuters.Editado en español por Javier Leira)