Yahoo Noticias La insólita creencia de que Donald Trump es un enviado de Dios para salvar el alma (blanca) del país
Desde un estrambótico video hasta las profecías de una evangélica o el fanatismo de los cristianos nacionalistas, al expresidente lo está vendiendo como un nuevo Mesías
¿Es Donald Trump un enviado de Dios? ¿Creó el Altísimo a este hombre como un regalo para los estadounidenses? ¿Es Trump el nuevo Mesías que vino a este mundo a salvar el alma del país y, por qué no, de la humanidad entera?
Eso, al menos, sugiere “God Made Trump” (Dios hizo a Trump), un estrambótico video propagandístico que se viralizó en el ecosistema virtual MAGA unas semanas atrás.
El video de casi tres minutos comienza con imágenes borrosas de un tocadiscos antiguo que reproduce un sermón que parece ser de otra época en la voz de una especie de predicador que dice:
“El 14 de junio de 1946, Dios miró hacia el paraíso planeado y dijo: ‘Necesito un cuidador’. Así que Dios nos dio a Trump. Dios dijo: ‘Necesito a alguien dispuesto a levantarse antes del amanecer, arreglar este país, trabajar todo el día, luchar contra los marxistas, cenar, luego ir a la Oficina Oval y quedarse despierto hasta pasada la medianoche en una reunión de jefes de Estado’. Así que Dios hizo a Trump”.
“God Made Trump” es una adaptación de “God Made a Farmer” (Dios hizo un granjero), el sermón de 1978 del locutor de radio Paul Harvey inspirado en el texto de la Creación del Génesis en el que elogiaba las virtudes de los granjeros. En este caso, “God Made Trump” es narrado por una posible reproducción de la voz de Harvey (muerto en 2009) por inteligencia artificial.
“God Made Trump” pic.twitter.com/AOtg4XynGJ
— Donald J. Trump Posts From His Truth Social (@TrumpDailyPosts) January 13, 2024
Más adelante, Harvey pronuncia:
“Dios tenía que tener a alguien dispuesto a entrar en la guarida de víboras. Denunciar a los fake news por sus lenguas afiladas como las de una serpiente. El veneno de las víboras está en sus labios. Así que Dios hizo a Trump”.
Y también:
“Dios dijo: ‘Necesitaré a alguien que sea fuerte y valiente. Que no tenga miedo ni se aterrorice de los lobos cuando ataquen. Un hombre que cuide del rebaño”.
El candidato de los evangélicos
El video circuló rápidamente tras ser compartido por el propio Donald Trump en su red social Truth Social en la víspera del caucus de Iowa, así como por personalidades como la representante Marjorie Taylor Greene o por su asesora espiritual, Paula White-Cain, una televangelista de Florida que ya había trabajado como enlace de la Casa Blanca con grupos y coaliciones cristianas evangélicas del país, la base de partidarios más fieles del expresidente y candidato presidencial.
Un estudio del Pew Research Center de 2021 reveló que aproximadamente una cuarta parte de los adultos estadounidenses (24%) se identifican como evangélicos. A su vez, según AP VoteCast en 2020 Donald Trump obtuvo el apoyo de ocho de cada 10 votantes cristianos evangélicos blancos. Y no parece que vaya a ser distinto en 2024 pese a las controversias que rodean al candidato.
Por las “controversias” de Trump me refiero a las acusaciones de adulterio, a alardear de sus agresiones sexuales, a las acusaciones de agresiones sexuales reales, a la quiebra de casinos, al pago de dinero por su silencio a una estrella porno a la que, presuntamente, años antes le había pagado por mantener relaciones sexuales cuando su hijo menor cuando era un bebé recién nacido…
Aunque este inventario no supone, precisamente, una oda a la santidad o un material apropiado para un sermón dominical, los cristianos evangélicos blancos siguen considerando a Donald Trump la persona necesaria para tomar las riendas y conducir el país.
“Ellos ven esto como una guerra espiritual, y Trump está del lado de los ángeles”, dijo John Fea, historiador de la Universidad Messiah de Mechanicsburg, Pensilvania, que ha investigado el papel del cristianismo evangélico en la historia de Estados Unidos, a la agencia AP. “Desde este punto de vista, Trump es políticamente un salvador, va a restaurar Estados Unidos, y resurgirá de sus cenizas en noviembre a pesar de la persecución y el sufrimiento”.
En batalla espiritual
En particular, para los nacionalistas cristianos, un segmento del cristianismo estadounidense cuya ideología se basa en la creencia de que Estados Unidos fue fundado como una nación cristiana y que los valores cristianos deberían ser prioritarios en el gobierno, en las leyes, en la política y en la vida pública, el éxito político de Trump es crucial, dado que es el elegido de Dios para regresar a la Casa Blanca.
Para los nacionalistas cristianos –con su ejército de pastores extremistas, televangélicos, profetas apocalípticos, jueces, figuras políticas y medios de comunicación–, el multimillonario exconductor del reality show The Apprentice es algo así como una especie de “agente divino” que está librando una batalla espiritual del bien contra el mal y que servirá como brazo ejecutor de la voluntad del Todopoderoso.
"Debemos reelegir al presidente Trump por tercera vez”, dijo el pastor evangélico y activista Joel Tenney, en un mitin celebrado en diciembre pasado en el estado de Iowa (lo de “por tercera vez” se refiere a la teoría de la conspiración de que a Donald Trump le robaron la elección en 2020, lo que suelen denominar "la gran mentira"). Para Tenney, en las elecciones del 5 de noviembre hay “fuerzas demoníacas en juego”.
De modo que, el regreso de Trump a la Casa Blanca –si sucede– es visto por muchos como si de la mismísima Segunda Venida de Jesucristo a la Tierra anunciando el fin de los tiempos, el juicio y el establecimiento del reino de Dios se tratara. Una teocracia cristiana que, paradójicamente, podría mandar al diablo la democracia imperante en la república.
Julie Green, la autoproclamada profeta que suele recibir mensajes divinos –eso dice– ha advertido una y otra vez en sus numerosas profecías difundidas en su podcast del cambio profundo que se avecina en el gobierno, los medios de comunicación, la religión y, en general, en las estructuras de poder del país.
Dios le dijo directamente a ella que el gobierno de Estados Unidos será derrocado en 2024 y habrá un cambio de poder “de las manos de los malvados a las de los justos". En otro mensaje, Dios le dijo que traerá de vuelta a Donald Trump a la Casa Blanca sin necesidad de pasar por una elección, aunque no le precisó exactamente cómo lo va a hacer. “Él no me da ese tipo de información”, dijo la profeta.
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¿El nuevo Jesucristo?
Aunque durante mucho tiempo se identificó como presbiteriano, en una declaración escrita exclusivamente para Religion News Service en octubre de 2020 a instancias de su asesora espiritual, Paula White-Cain, Trump dijo que ya no se identificaba como presbiteriano, sino como un “cristiano no confesional”, es decir, que no está afiliado a una confesión cristiana específica.
Aquella declaración, apenas unos días antes de las elecciones, fue, sin dudas, un mensaje dirigido a su base de seguidores cristianos evangélicos: yo estoy con ustedes. Y de ahí a la tentación de poner a Trump en el mismo pedestal de Jesucristo hay solo un paso.
A principios de este mes, el actor ganador del Oscar y padre de la actriz Angelina Jolie, Jon Voight, dijo en un mensaje difundido en las redes sociales: “El único hombre que fue ridiculizado, destruido como Jesús, Trump, puede volver y salvar el sueño americano para todos”.
Desde luego, el expresidente no le ha hecho ascos a semejante comparación.
En aquella misma campaña de 2020, Trump afirmó que sólo hay una persona más famosa que él en el mundo: Jesucristo. Y sus seguidores más religiosos, en lugar de condenar lo que en cualquier otro momento podría haberse considerado una blasfemia o una herejía, celebraron y rieron a mandíbula batiente la gracia.
Ya más en serio, Trump se ha encargado de imprimirle un tono mesiánico o apocalíptico a su campaña. El año pasado, en un mitin en la ciudad de Waco, Texas, calificó a su intento por retomar la Casa Blanca nada menos que como la “batalla final”.
“Nuestros adversarios han hecho todo lo posible por aplastar nuestro espíritu y doblegar nuestra voluntad” –dijo Trump en marzo de 2023–. “Pero han fracasado. Sólo nos han hecho más fuertes. Y 2024 es la batalla final. Si ustedes me vuelven a poner en la Casa Blanca, su reinado habrá terminado y América volverá a ser una nación libre".
También, en octubre de 2023, prometió que prohibiría la entrada a inmigrantes a quienes “no les guste nuestra religión”, lo que constituiría una violación a la Primera Enmienda de la Constitución que garantiza la libertad de religión en Estados Unidos.
A su vez, Eric, el más vocal de los hijos de Donald en cuanto a este tema, sostiene que hay una guerra en curso contra Dios, la familia y la libertad religiosa en Estados Unidos y le atribuye a su padre la salvación del Cristianismo en el país. También ha acusado al Partido Demócrata de ser el “partido de los ateos”.
"Sólo hay un Dios"
En una nota publicada por The New York Times el pastor Joseph Brown, de la Marion Avenue Baptist Church en Washington, Iowa, se mostró preocupado y en desacuerdo con el lenguaje de tintes bíblicos utilizado en “God Made Trump” para comparar al expresidente directamente con Dios, en lugar de verlo como un siervo de un poder superior.
“El pecado original de Satanás o Lucifer no es que quisiera ocupar el puesto de Dios, sino que quería ser como Dios. Sólo hay un dios, y no es Trump ni ningún otro hombre”, dijo el pastor Brown, y yo creo que estoy de acuerdo.
Que Dios nos proteja.
